La intención de Chih-i, con respecto a la práctica religiosa, era proporcionar una educación que llevara a discernir y vivir la realidad última de todos los fenómenos desde la perspectiva de la tradición Mahayana. Por ello, se formula la doctrina de la "unidad de las tres verdades" (Jap:. Ennyu no santai), que se acompaña de una práctica meditativa cognitivo-universal (que se caracteriza por la liberación de los tres ilusiones y la adquisición de las tres sabidurías), y propone entonces el método de las Diez Contemplaciones en Diez Maneras (tocadas en una entrada anterior), lo que representa la articulación de la doctrina de las tres verdades, diferenciadas en función de sus beneficios y el nivel de los practicantes.
El objetivo de la práctica es representada por el Ichinen Sanzen, cuya realización experiencial es vivir la verdad del Camino del Medio: la verdad de la existencia provisional y convencional, la vacuidad, y la afirmación y la negación simultánea de ambas.
La contemplación triple de la mente y la liberación de las ilusiones:
Este método conduce al practicante a captar la unificación de las tres verdades, que es el Camino Medio, elimina las tres categorías de ilusiones y luego le permite adquirir las tres sabidurías. Esto permite transformar las ilusiones en los factores que conducen a la iluminación.
Esta práctica puede ser llevada a cabo de una manera gradual, en tres fases separadas. Sin embargo, para adaptarse a las más profundas y captar la verdadera naturaleza de todos los fenómenos (que no son ni existentes ni inexistentes), las tres meditaciones se practican en su totalidad y al mismo tiempo, de modo que sean interdependientes (doctrina completa).
Las ilusiones se dividen en tres tipos como sigue:
1. Las iIusiones derivadas de:
1.1. Visiones falsas (percepciones erróneas de la realidad), tales como:
1.1.1. El ego existe independientemente de los procesos físicos y mentales que constituyen la vida;
1.1.2. El ego (la vida) es totalmente destruida por la muerte o, por el contrario, se mantiene sin cambios después de la muerte;
1.1.3. Falta de reconocimiento de la ley de causa y efecto;
1.1.4. Prejuicios y apegos a opiniones erróneas;
1.1.5. La apreciación errónea de las prácticas religiosas y los preceptos que se deben observar a fin de alcanzar la iluminación.
1.2. Emociones (que engañar, ocultar la mente y acompañar a las falsas visiones):
1.2.1. El apego;
1.2.2. La aversión;
1.2.3. El adormecimiento;
1.2.4. La intranquilidad;
1.2.5. La duda.
De estos: a) se deriva el deterioro físico y espiritual de los seres humanos, que b) implica una vida desordenada, lo que a su vez, c) produce un trastorno ambiental y social.
2. Las ilusiones innumerables como los granos de partículas de polvo o arena (o la ilusión de la uniformidad de los fenómenos).
3. Las ilusiones derivadas por la ignorancia fundamental (Skr. Avidya): que impiden la comprensión de la verdad del Camino Medio.
Esto se logra meditando sobre todos y cada uno de estos aspectos. En esto consta la meditación Tendai.