En lecturas, clases y conferencias, uno de los temas que más confunde a las personas es el funcionamiento de la Ley del Karma cuando el Budismo expone la doctrina del "Anatman" o del "no-ser", que comúnmente es polarizada con la doctrina hindú del "Atman" o "alma". En esta instalación trataré de explicar la concepción budista de la Realidad Última, desglosar el entendimiento budista del "ser-ego", detallar el funcionamiento de la doctrina del Karma y su relación con el renacimiento en la Tierra Pura.
El Budismo está cimentado sobre la doctrina india del Karma. Esta no es una doctrina original del Budismo sino que fue una incorporación hecha por el Buda Shakyamuni del profundo océano de enseñanzas y doctrinas del Hinduismo. El Hinduismo, ontológicamente expone que la totalidad de la existencia es Brahmán, lo no-creado, la Fuente de todo en el Universo. Brahman es el Principio Universal más alto, la Realidad Suprema del universo. En las escuelas principales de la filosofía hindú, es la causa material, eficiente, formal y final de todo lo que existe. Es
la verdad omnipresente, sin género, infinita y eterna. Brahman como concepto metafísico es la única unidad vinculante detrás de la diversidad en todo lo que existe en el universo. Brahman
en los Upanishads es la "esencia, la partícula más pequeña del
cosmos y el universo infinito", la "esencia de todas las cosas que no se
pueden ver, aunque puedan ser experimentadas", el "yo, alma dentro de
cada persona, cada uno Ser ", la "verdad", la "realidad", el "Absoluto".
Además
del concepto de Brahman, la metafísica hindú incluye el concepto del
"Atman" - o alma, ser - que también se considera en última instancia
real. Las
diversas escuelas del Hinduismo, particularmente las escuelas duales y
no-duales, difieren en la naturaleza de Atman: si es distinto de
Brahman, o igual que Brahman. El
Brahman, así como el Atman en cada ser humano (y ser vivo) es
considerado igual a la única realidad, el Absoluto Eterno, no-nacido, ilimitado, innatamente libre y dichoso en las escuelas del
Hinduismo como la Advaita Vedanta y el Yoga. Conocerse
a uno mismo es conocer a Dios dentro de sí mismo, y esto se sostiene
como el camino para conocer la naturaleza ontológica del Brahman (Ser Universal), ya que es idéntico al Atman (ser individual).
El Budismo, adoptando doctrinas de la matríz india de la cual nació, posteriormente desarrolló sus propias concepciones ontológicas y metafísicas equivalentes al Brahman. Esto no es muy enseñado porque pertenece al corpus esotérico, el cual no es muy divulgado en Occidente. En el Budismo Esotérico, el concepto de Brahman es equivalente al concepto del Dharmakaya.
El Budismo originalmente rechazó la doctrina del Brahman y del Atman (como un alma o un yo
permanente). En los escritos Pali del Budismo Theravada, podemos leer que el Buda dijo que él no podía
encontrar ninguna evidencia que sustentara la existencia de un alma personal (atman)
o su contraparte cósmica (Brahman). La metafísica del Budismo Theravada rechaza la doctrina del Brahman (Ser Último), del alma y cualquier cosa metafísicamente equivalente a través
de su doctrina de Anatman.
Sin embargo, algunas formas del Budismo Mahayana han incorporado conceptos equivalentes al Brahman. Por ejemplo, el Budismo Mahayana y el Budismo Esotérico han desarrollado una filosofía religiosa muy panteísta que aún son importantes dado al impulso que dieron al desarrollo del Budismo Mahayana. El Dharmakaya, el Cuerpo de Esencia, el Buda Supremo o Buda Eterno
que impregnó y subyace debajo de todo lo que existe en el Universo es muy similar el Brahman de los Upanishads. Igualmente, el Nirvana, concebido
como la Realidad Suprema, es muy similar el concepto del Brahman.
El Dharmakaya es uno de los tres cuerpos (trikaya) del Buda en el Budismo
Mahayana. El Dharmakaya constituye el aspecto no-manifestado,
"inconcebible" (acintya) de un Buda, del cual surgen todos los Budas y a lo
que regresan después de su disolución. Los Budas encarnados, como el Buda Shakyamuni, son manifestaciones del Dharmakaya llamados Nirmanakaya ("cuerpo de transformación"). Son el cuerpo de la realidad misma, sin forma
específica y delimitada, con la que el Buda se identifica con la
naturaleza cargada espiritualmente de todo lo que es para presentarse ante los seres, de acuerdo con sus manifestaciones, necesidades y circunstancias.
En una pasada instalación habíamos discutido la doctrina del Trikaya a la luz de las Enseñanzas Perfectas del Budismo Tendai. El Buda Shakyamuni, antes de morir, le
dijo a sus discípulos: "refúgiensen en la doctrina (Dharma)". Poco
tiempo luego del Paranirvana del fundador, los discípulos comenzaron a
desarrollar muchas doctrinas, en un intento por sistematizar y organizar
las enseñanzas de su maestro. Si el Dharma era eterno, entonces el Buda
debía residir en el Dharma. Así, se desarrolló la doctrina del
Dharmakaya, el Buda que reside y es la totalidad de la doctrina y del
universo. Esto dió lugar a la formación del Nirmanakaya, el cuerpo que
el Dharmakaya asume - encarnado - para vivir en el mundo y predicar el
Dharma. Posteriormente se desarrolló la doctrina del Sambhogakaya, el
cuerpo que el Buda emana para manifestarse espontáneamente en un mundo
para predicar el Dharma y salvar a todos los seres. Así se forma la
doctrina del Trikaya, la cual dificulta la clasificación del Budismo
bajo términos Occidentales de monoteísmo, politeísmo o panteísmo. A esto
se suma el desarrollo posterior de múltiples Budas y Bodhisattvas que
residen en distintas partes del universo y asumen múltiples formas, de
acuerdo con las capacidades, inclinaciones y necesidades de los seres
para llevarlos a la salvación.
El Buda en el Budismo Tendai es explicado doctrinalmente a partir del
Sutra del Loto y las enseñanzas de Tendai Daishi (Chih-i) y Dengyo
Daishi (Saicho). El Sutra del Loto estipula que el Buda que predica en
este Sutra es uno muy antiguo, que se adapta a nuestras intenciones. El
Sutra del Loto también describe que todos los Budas que existen en el
universo son emanaciones del Buda Shakyamuni; así, todos los Budas son
emanaciones de un sólo Buda, volviendo a la idea de un sólo Buda. Si
bien el Budismo Tendai utiliza la doctrina del Trikaya, explica que
estos tres cuerpos son mutuamente idénticos y forman parte del mismo
Buda original, no creado, no nacido; son tres interpretaciones hábiles
para explicar la naturaleza fundamental de la realidad. Chih-i es
consistente en sus tratados cuando explica que no existe diferenciación
ni separación entre el Buda, la mente y todos los seres sintientes.
Saicho y sus discípulos luego añadieron una capa adicional de
interpretación al sincretizar las enseñanzas Tendai con la doctrina y la
práctica budista esotérica, equiparando al Buda Eterno Shakyamuni con
el Buda Mahavairocana.
A esto se suma la doctrina budista del Anatman, o "no-ser". Contrario a los que muchos exponen, el Budismo no niega a priori la existencia de un alma: todo depende de qué definamos como"alma". En
el Budismo, el término Anatman se refiere a que no existe un alma inmutable y permanente en
los seres vivos. Es
una de las siete percepciones beneficiosas en el Budismo, y junto con
Dukkha (sufrimiento) y Anicca (impermanencia), es uno de los Tres
Entendimientos Correctos sobre las Tres Marcas de la Existencia. El
Buda criticó la doctrina que postulaba un alma inmutable como la base del renacimiento y la responsabilidad moral kármica, a la
que llamó "atthikavāda". También
criticó la doctrina materialista que niega la existencia del alma y el
renacimiento, y que por lo tanto niega la responsabilidad moral
kármica, que él llama "natthikavāda". En cambio, el Buda afirmó que no eixte un ser independiente y separado del todo - todos somos como gotas de agua en un océano. En el marco del karma de Buda, la visión correcta y las acciones correctas son necesarias para la liberación.
En el Budismo Theravada esta doctrina es seguida al pie de lal etra, pero en el Budismo Mahayana, los Sutras Tathagatagarbha (garbha = matriz, semilla que contiene al Tathagata - Buda) muestran un concepto similar al Atman. Estos
Sutras sugieren que todos los seres sintientes contienen al Tathagata (Buda-Universo) como su esencia, núcleo o naturaleza interna
esencial.
El Sutra del Mahaparinirvana afirma explícitamente que el Buda usó el término Anatman originalmente para eliminar el apego a los conceptos y a la existencia de cosas independientes, afirmando un universo donde todo esta interconectado e interrelacionado con todo. El problema del Atman es su independencia - en el Budismo, los seres son manifestaciones temporales del Dharmakaya, en el cual el Buda entra para salvarlos.
La doctrina del Anatman se fundamenta en los Cinco Skandhas (sánscrito) que se pueden traducir como "agregados, colecciones, agrupaciones". En
el Budismo, esto se refiere al concepto de Cinco Agregados que constituyen y explican completamente la existencia
mental y física de un ser sensible. Los cinco agregados son: forma (o materia o cuerpo - rupa), sensaciones (o
sentimientos, recibidos de la forma - vedana), percepciones (samjna),
actividad mental o formaciones (sankhara) y conciencia (vijnana). Los Skandhas explican lo que es un "ser o individuo", complementando la doctrina del Anatman del Budismo que afirma que todas
las cosas y todos los seres no poseen un "ser" o un "yo" independiente del Todo. En el Sutra Mahaparinirvana, el Buda explica cómo los Skandhas del Buda son en realidad eternos e inmutables; se dice que los Skandhas del Buda son incomprensibles para la visión no despertada.
Cuando un ser muere, los Skandhas se disuleven: la forma (cuerpo), sensaciones, percepciones y actividades mentales cesan con la muerte del cuerpo - lo que sucede es la conciencia. La conciencia se sub-divide tradicionalmente en nueve conciencias de acuerdo con las doctrinas de la escuela Yogachara. Las primeras cinco conciencias corresponden a los cinco órganos sensoriales (vista, audición, tacto, gusto y olfato); la sexta correponde a la mente; la séptima es un producto de la momeoria (manas) que dan la impresión de que el "ser" es algo independiente del Todo; la octava es la Alaya o el sub-conciente colectivo; y la novena es la conciencia indiferenciada de la Budeidad - el Dharmakaya. Lo que sobrevive es el karma.
Por ello, cuando un ser muere, es como un hielo que se funde con el agua sobre el cual siempre ha flotado. Cuando otro hielo se forma en otro tiempo y espacio, ese hielo es formado con el karma de todo lo que le rodeaba - karma de sus vida anterior y el karma de todos los seres. Por eso hay que definir dos tipos de karmas - karma individual (creado y experimentado en esta existencia), y karma colectivo (generado por todos los seres junto con el karma creado en esta existencia pero no manifestado), los cuales se sub-dividen. Esto aplica a los seres y a los dioses. Los dioses en el Budismo no son eternos, sino que renacen en los cielos (dentro de la rueda del Samsara) donde viven por un largo tiempo hasta que su karma se agota y descienden a los otros cinco reinos del Samsara, o ascienden fuera de la rueda del Samsara y renacen en las Tierras Puras, lo cual tocaremos en breve.
Es por ello que el Budismo Mahayana no expone la doctrina de la salvación al salir de la Rueda del Samsara. No existe un "ser" que pueda "escapar" el Samsara. Al no existir un ser que pueda ser salvado, uno solo puede alcanzar la salvación junto con la salvación de todos los seres. Por ello, el Budismo Mahayana expone la doctrina del Bodhisattva, un ser que pospone su entrada al Nirvana (lo Absoluto) hasta que todos los seres hayan alcanzado la Iluminación - seres que entran deliberadamente en el Samsara para ayudar a liberar el mal karma de todos los seres y llevarlos al Despertar.
Esto nos lleva a preguntarnos: ¿Qué es el karma? Los seres ordinarios cometen acciones negativas los cuales los atan a la rueda interminable de renacimientos y muertes en la rueda del Samsara. El karma es la ley inalterable de causas y efectos que afectan los estados de existencia de los seres. Karma significa acción, trabajo
o hecho; y se refiere al principio de causa y
efecto donde la intención y las acciones de un individuo (causa) influyen en el futuro de ese individuo o de todos los seres (efecto). Una
buena intención y una buena acción contribuyen al buen karma y a la
felicidad futura, mientras que una mala intención y una mala acción
contribuyen al mal karma y al sufrimiento futuro.
De ordinario, los seres deben de expiar su mal karma a través de su retribución de manera lineal horizontal o a través de sus buenas intenciones y acciones por un largo periodo de tiempo a través de muchas vidas. El Budismo Tierra Pura, sin embargo, propone un camino alterno o una salida vertical por la cual los seres, a través del inconcebible mérito y los votos del Buda Amida, los seres puieden renacer en la Tierra Pura - un mundo fuera de la rueda del Samsara, creado por los poderes del Buda Amida, donde los seres renacen y alcanzan la Iluminación en una sola vida, para luego entrar en la rueda del Samsara para salvar a todos los seres. Esto será explicado en la próxima instalación.