Hoy continuaremos con nuestro ciclo de charlas sobre el Sutra del Loto. La semana pasada tocamos los capítulos 20, 21 y 22, donde vimos el ideal del Bodhisattva, ejemplificado por el Bodhisattva Jamás Despreciar, quien alcanzó el Despertar honrando la Naturaleza Búdica dentro de todos los seres. Igualmente, aprendimos sobre los poderes sobrenaturales de los Budas y la importancia de perpetuar el Dharma eterno para las generaciones futuras. Pero sobre todo, nuevamente, vimos las importancia de estudiar y vivir las enseñanzas en nuestra vida diaria. Como dijimos anteriormente, el Sutra del Loto es un Texto Sagrado religioso, y como tal, debemos de leerlo en el contexto de nuestra propia vida, somáticamente. El Sutra del Loto no es solo un sermón dado por el Buda hace más de 2,500 años, sino que es una texto vivo y que nos habla ahora mismo. Es la culminación de los más de 40 años de predicación del Buda en el mundo, y como todo el Dharma, el mismo es eterno: aplicable a todas las eras y personas en todo el universo. Es por eso que es importante leerlo con nuestros cuerpos.
Hoy, en nuestra penúltima entrada de nuestro ciclo de lectura anual, tocaremos tres capítulos cortos, los capítulos 23, 24 y 25. En estos capítulos, aprenderemos sobre la vida de otros grandes Bodhisattvas que ejemplifican las enseñanzas budistas con sus vidas. Nuestro estudio del día de hoy contiene uno de los capítulos más adorados en la literatura budista, el capítulo del Bodhisattva Avalokiteshvara (Kannon), quien es quizás el Bodhisattva más famoso de todo el panteón budista. Veamos.
En nuestra entrada anterior vimos la dificultad de repagar la dueda que tenemos con los Tres Tesoros del Buda, el maestro quien es la manifestación compasiva del Universo; con el Dharma, que son las enseñanzas sabias del Buda para liberarnos del mar de nacimientos y muertes y del sufrimiento; y la Sangha, que es la comunidad de ministros y practicantes que encarnan las enseñanzas y se apoyan para practicarlas. Estos capítulos nos dan ideas de cómo podemos hacerlo.
El capítulo 23, titulado "El Bodhisattva Rey de la Medicina", nos explica quién es este Bodhisattva, sus votos y sus vidas pasadas. Todo en el Budismo es causalidad; todo tiene una razón de ser. Como recordaremos, el Bodhisattva Rey de la Medicina apareció en el capítulo del "Maestro de la Ley" (10), por lo que es un Bodhisattva avanzado e importante. ¿Quién es este Bodhisattva? En este capítulo, vemos al Buda Shakyamuni relatándole a la audiencia sobre la vida pasada y los votos del Bodhisattva Rey de la Medicina.
El Buda cuenta que hace mucho tiempo atrás, vivió un Buda llamado el Buda Virtud Pura del Sol y la Luna. Entre todos sus discípulos, se encontraba uno llamado Visto Amablemente por Todos los Seres. Este discípulo estudió el Sutra del Loto con este Buda y practicó por muchos años hasta alcanzar el Samadhi de transformarse en cualquier ser, asumiendo la forma física adecuada para poder predicar el Dharma. Este es un Samadhi avanzado que poseen muchos Budas y Bodhisattvas. El Bodhisattva entró en una profunda menditación, donde empezaron a llover flores e incienso. Este Bodhisattva recogió todas las flores y se las ofreció al Buda. Esto significa que el discípulo le transfirió todos sus méritos a su maestro. Sin embago, el Bodhisattva sabía que eso no era lo suficiente como para repagarle la deuda de gratitud al Buda por aparecer en el mundo. Entonces, el Bodhisattva tom> aceites esenciales y perfumes y se predió en fuego frente al Buda, ofreciendo su propia vida. Su luz iluminó todo el mundo, ardiendo por 1,200 años.
Posteriormente, el Bodhisattva renació como el hijo de un rey llamado Virtud Pura, y conociendo que el Buda Virtud Pura del Sol y la Luna aun estaba vivo, fue a donde el Buda y le realizó ofrendas. En ese momento el Buda le revela que está a punto de entrar en el Nirvana, y le transmite todas sus enseñanzas y reliquias tras su muerte. En ese momento, el Buda pasa al Nirvana Final. Entonces, el Bodhisattva crema el cuerpo del Buda y construye 84,000 Estupas conteniendo sus reliquias, y quemó sus brazos por 72,000 años como ofrenda. Las personas se lamentaron que el Bodhisattva quemara sus brazos. Entonces, el Bodhisattva les dijo que si les crecían de nuevo, son convertiría en un Buda. En ese instante, sus brazos se restauraron y todo el mundo se llenó de júbilo.
El Buda le revela al a audiencia que ese Bodhisattva era el Bodhisattva Rey de la Medicina en una vida pasada. Entonces, el Buda relata que el Sutra del Loto es el Rey de todos los Sutras: "Este Sutra salva a los seres sintientes ... igual que una persona sediente encuentra un lago; así como una persona encuentra fuego cuando tiene frio; así como una persona encuentra ropa cuando está desnudo; así como una persona enferma encuentra a un médico; así como una persona encuentra una luz en la oscuridad; así como una persona pobre encuentra un tesoro ... el Sutra del Loto salva a todos los seres sintientes del sufrimiento, de los males, y de las garras de la muerte".
Este capítulo es muchas veces recitado cuando una persona está enferma para su pronta recuperación. Pero las ofrendas del cuerpo, como cuando el Bodhisattva se prende en llamas, deben tomarse simbólicamente. Esto significa que la mejor ofrenda que podemos realizar es la de poner en práctica las enseñanzas en nuestro diario vivir, con nuestros pensamientos, palabras y acciones, y no necesariamente con actos externos de devoción. Npo obstante, la devoción es un elemento importantísimo en nuestro camino al Despertar. Aun así, muchos monjes budistas a través de los años, desde la antiguedad hasta nuestros días, se han inspirado en este capítulo, quemando sus cuerpos en señal de protesta contra crímenes contra la humanidad, como lo fue durante la Guerra de Vietnam, y como sucede hoy día en el Tibet.
En el Budismo, se encuentra la enseñanza de las Cuatro Deudas de Gratitud. La gratitud implica saber con quién estamos en deuda por nuestra vida y circunstancias actuales y, al dedicarnos a nuestra práctica budista, cómo podemos repagar esa deuda de gratitud. En otro sentido, pagar nuestras deudas de gratitud significa elevar nuestro estado de vida de ser apoyado por otros, y en apoyar a otros. Después de que uno reconoce y aprecia lo que se ha hecho por uno, el siguiente paso es vivir una vida dedicada al bienestar de los demás. Este es el origen de la frase que paga las deudas de gratitud que aparecen en los Sutras.
La primera es la deuda de gratitud con nuestros padres y nuestros ancestros. Cuán infinitamente profunda es la deuda que tenemos con nuestros padres que nos dieron la vida vida. Debemos encontrar alguna forma de pagar esta enorme deuda. En segundo lugar está la deuda de gratitud con el gobernante de la nación. Esta es la gratitud que se le debe al soberano por apoyar su sustento, proporcionándo alimentos, refugio y ropa. En el mundo moderno, donde la soberanía recae en el pueblo, es gratitud a la sociedad misma. La tercera es la deuda de gratitud con todos los seres vivos. Como hemos visto, el Sutra del Loto nos enseña que la vida es eterna, extendiéndose a través de las tres existencias del pasado, presente y futuro. Los Sutras nos enseñan que hemos nacido en este mundo después de haber sufrido en el ciclo de nacimientos y muertes infinitas veces. Desde ese punto de vista, en un momento u otro en el pasado, todos los seres han sido nuestro padres y nuestras madres. El Budismo nos ve a todos como personas relacionadas y con deudas de gratitud entre nosotros. Por eso debemos desear la felicidad de todas las personas y finalmente salvarlas del sufrimiento. Dado que la felicidad suprema radica en alcanzar el estado de vida de la Budeidad, la mejor manera de pagar nuestra deuda de gratitud con los demás es enseñarles el Dharma, el último medio para obtener la Iluminación. Finalmente, tenemos nuestra deuda de gratitud con los Tres Tesoros: el tesoro del Buda, el tesoro del Dharma (las enseñanzas del Buda) y el tesoro de la Sangha (la comunidad de creyentes).
¿Cómo podemos repagar nuestras deudas de gratitud? En el Budismo, existe la enseñanza de las Tres Clases de Ofrendas: ofrendas de bienes, ofrendas del Dharma y ofrendas de valentía. Una ofrenda de bienes significa la donación de bienes materiales e incluye donaciones monetarias. Una ofrenda del Dharma significa enseñar la Ley, o explicar las enseñanzas del Buda a otros. Una ofrenda de valentía significa dar valentía o seguridad a aquellos en circunstancias atemorizantes o difíciles. Esto debe de servir de modelo para nuestras vidas.
¿Cómo podemos repagar nuestras deudas de gratitud? En el Budismo, existe la enseñanza de las Tres Clases de Ofrendas: ofrendas de bienes, ofrendas del Dharma y ofrendas de valentía. Una ofrenda de bienes significa la donación de bienes materiales e incluye donaciones monetarias. Una ofrenda del Dharma significa enseñar la Ley, o explicar las enseñanzas del Buda a otros. Una ofrenda de valentía significa dar valentía o seguridad a aquellos en circunstancias atemorizantes o difíciles. Esto debe de servir de modelo para nuestras vidas.
En el capítulo 24, titulado "El Bodhisattva Sonidos Maravillosos", comienza con el Buda Shakyamuni emitiendo un rayo de luz de su entrecejo, iluminando todos los mundos en el universo. Esta luz llegó a la Tierra Pura llamada Adorno de Luz Pura, donde vivía un buda con muchos discípulos. Entre ellos, se encontraba un Bodhisattva llamado Sonidos Maravillosos. Cuando vio la luz del Buda Shakyamuni, el Bodhisattva fue a donde el Buda de su mundo y le pidió permiso para visitar el Mundo Saha, nuestro mundo. El Buda le concedió su petición, pero le pidió que no viera a los seres de nuestro mundo como inferiores, por poseer imperfecciones y porque los seres eran mucho más pequeños que en su mundo.
En ese instante, el Bodhisattva entró en Samadhi, y comenzaron a llover flores en el Mundo Saha donde el Buda Shakyamuni estaba predicando. El Bodhisattva Manjushri le pregunta al Buda por qué está sucediendo esto, y el Buda le dice que viene otro Bodhisattva avanzado de otro mundo para realizar ofrendas al Buda Shakyamuni y al Sutra del Loto. En ese instante, el Bodhisattva Sonidos Maravillosos aparece frente a todos los presentes, junto con 84,000 acompañantes. El Bodhisattva era gigante, midiendo miles y miles de millas, con ojos azules como gemas preciosas, su cuerpo de oro puro, emanando una luz como la de la luna. Sonidos Maravillosos le rindió homenaje al Buda Shakyamuni y al Buda Muchos Tesoros. Entonces, el Buda le dice a todos los presentes que el Bodhisattva Sonidos Maravillosos se llama así porque hizo el voto de venerar a todos los Budas y al Sutra del Loto con sonida melodiosa, renaciendo en la Tierra Pura Adorno de Luz Pura, y pudiendo asumir cualquier forma para predicarle el Dharma a los seres sintientes. El Bodhisattva Sonidos Maravillosos le rindió homenaje a todos los Budas y Bodhisattvas y al Sutra del Loto, y partió a su mundo.
Como vemos, nuestro mundo es llamado el Mundo Saha, que se traduce como el mundo de la perseverancia o de la dureza. Esto es porque nuestro mundo está lleno de dolor y sufrimiento, porque la longitud de vida de los seres es corta, y porque los apegos y desdeos son muchos. Es por eso que otros Bodhisattvas practican para renacer en Tierras Puras, donde existen todas las condiciones ideales para poder alcanzar el Despertar y volver a los otros mundos a salvar a los otros seres sintientes. Cuando uno aspira a renacer en una Tierra Pura, no es para vivir allí eternamente en dicha y placer, sino para alcanzar la Iluminación rápidamente y volver a los otros mundos inferiores a salvar a los seres sintientes. Pero también debemos recordar que este Mundo Saha, como mencionamos en el capítulo 16, es la Tierra Pura de la Luz Serena del Buda Shakyamuni, pero que nuestras obstrucciones kármicas, nuestra ignorancia y nuestros deseos desenfrenados no nos lo permiten ver. Es nuestro deber igualmente convertir este mundo, o mejor dicho, revelar este mundo, como la Tierra Pura de la Luz Serena, a través de nuestros pensamientos, palabras y acciones, y a través de activismo social. Solo así podemos lograrlo.
Ahora, siguiendo esta misma línea de pensamiento, pasamos al capítulo 25, titulado "La Puerta Universal del Bodhisattva que Escucha los Sonidos del Mundo", donde veremos sobre la vida y los votos del Bodhisattva Avalokiteshavara, llamado Kannon Bosatsu en Japón, y Kyanyin en China. Este capítulo ha circulado como un Sutra independiente, y es el primer Sutra que menciona al Bodhisattva Avalokiteshavara en el canon budista. "Avalokiteshvara" se puede traducir como "Aquel que Escucha el Llanto o los Sonidos del Mundo", y hace referencia a que este Bodhisattva responde al llamado de todos los seres sintientes, ofrenciendo ayuda y socorro. Un dato curioso es que originalmente, Avalokiteshavara era personificado como un hombre, pero dado a sus cualidades y capacidades, es representado como mujer en todo Asia. Esto es porque los Budas y Bodhisattvas, como manifestaciones del Dharmakaya - del Infinito - son andrógenos, y se pueden manifestar de infinitas formas. Veamos.
El capítulo, que es uno de los más recitados en el Budismo Tendai, comienza con un Bodhisattva preguntándole al Buda por qué el Bodhisattva es llamado Avalokiteshavara. Entonces, el Buda responde:
"Escucha la práctica de Avalokiteshvara,
Quien diestramente responde en todos los lugares.
Con vastos votos, tan profundos como el mar,
A través de eones inconcebibles,
Él ha servido a muchos miles de kotis de Budas,
Y ha hecho determinaciones o votos grandes y puros.
Ahora te diré en breve,
Que para aquellos que oigan su nombre o lo vean,
Y que estén atentos incesantemente de su nombre,
Él puede extinguir el sufrimiento en todos los dominios de la existencia".
Entonces, el Buda comienza a narrar cómo el Bodhisattva responde al llamado de los seres sintientes:
"Si alguien es la victima del intento dañino de otro,
Y es empujado a un cráter de fuego,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
El cráter de fuego se convertirá en una alberca.
Si alguien está a punto de ser empujado a un gran océano,
Y está rodeado por los peligros de dragones, peces y fantasmas,
Si ésa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Las olas no lo ahogarán.
Si alguien está en la cima del Monte Sumeru,
Y otra persona trata de empujarlo,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Ella se situará firme como el sol en el espacio.
Si alguien es perseguido por personas malignas,
Que quieren tirarlo de Montaña Vajra,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Ni un solo pelo de su cuerpo se dañará.
Si alguien está rodeado por bandidos brutales,
Que lo amenazan con cuchillos,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
La compasión surgirá en todos los bandidos.
Si alguien está en problemas con la ley,
Y al borde de ser ejecutado,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Los cuchillos se romperán en pedazos.
Si alguien está prisionero, encadenado o maniatado,
O si sus manos y pies están sujetados,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Sus cadenas se abrirán y será libre.
Si alguien está a punto de ser dañado,
Por mantras, encantamientos o veneno,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
El daño regresará al que lo envía.
Si alguien se encuentra con rakshasas malvados,
Dragones o fantasmas venenosos,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Entonces ellos no se atreverán a dañarla.
Si alguien está rodeado por bestias salvajes,
Con garras y dientes terribles,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Las bestias rápidamente correrán lejos en otra dirección.
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Las serpientes venenosas y los escorpiones,
Con vapores llameantes letales,
Al sonido de una voz, se dispersaran.
Las nubes con relámpagos y truenos rugientes
Pueden hacer descender granizo o lluvias copiosas,
Pero si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Ellas inmediatamente se dispersan.
Los seres vivientes están plagados de vicisitudes
Y oprimidos por sufrimientos ilimitados.
El poder de la sabiduría maravillosa de Avalokiteshvara
Puede rescatarlos del mundo de sufrimiento.
Él se manifiesta en todas partes y en todos los lugares;
Completo con el poder de penetraciones espirituales
Y cultivando ampliamente la sabiduría y los expedientes diestros,
Viaja a través de los dominios en las diez direcciones
Los destinos malignos diferentes,
Esos de los infiernos, los fantasmas y animales,
Y el dolor del nacimiento, la vejez, la enfermedad y la muerte
Se disipan gradualmente.
¡Meditador Correcto, Meditador Puro,
Meditador con Gran y Vasta Sabiduría,
Meditador Compasivo y Gentil,
Te observamos constantemente con reverencia!
Luz pura e incorruptible,
El sol de la sabiduría que pasa a través de la oscuridad
Es capaz de subyugar las calamidades del viento y el fuego
Al brillar en todos los mundos.
Sustancia compasiva: el trueno de los preceptos.
Intento gentil: nube grande y maravillosa.
Él hace descender el rocío dulce de la lluvia del Dharma,
Que extingue las llamas de la aflicción.
En el medio de la controversia, al enfrentarse a las demandas legales,
O cuando alguien está aterrorizado en el campo de batalla,
Si esa persona evoca el poder de Avalokiteshvara,
Todos sus muchos enemigos se disgregarán y partirán.
Meditador del Mundo de los Sonidos, Maravilloso es tu sonido,
Puro como la ola del mar,
Un sonido más allá de todos los sonidos mundanos,
Siempre lo llevaremos en la mente.
Pensamiento tras pensamiento no tenemos duda:
Kannon es puro y sabio.
En tiempos de sufrimiento, agonía, peligro y muerte,
Él es nuestro refugio y nuestro protector.
Perfecto con todos los méritos y virtudes,
Sus ojos gentiles observan los seres vivientes,
Él está dotado con las bendiciones masivas, ilimitadas como el océano.
Por lo tanto, debemos reverenciarlo y venerarlo".
A veces los problemas del mundo son demasiados y nos abruman. Es expecialmente en esos instantes que llamamos a los Budas y Bodhisattvas para ayudarnos. Los Bodhisattvas nos ayudan constantemente, muchas veces sin nosotros saberlo. ESto es porque pueden asumir cualquier forma. Este capítulo enumera 33 formas tradicionales, pero sus formas son infinitas, así como son infinitos los deseos y problemas de los seres sintientes. Incluso, muchas veces nos ayudan a través de seres cercanos, sin nosotros ni ellos saberlo. Es por eso que este capítulo se llama la Puerta Universal: aquí la palabra "puerta" se refiera a la forma de presentarse o de llevar ayuda (Dharma). La meditación, la devoción, la recitación, las buenas obras, etc., son todas puertas que nos conducen al Despertar.
En ese instante, un Bodhisattva se inspira y le ofrece de regalo un collar de gemas preciosas al Bodhisattva Avalokiteshavara, pero el Bodhisattva no lo acepta. Viendo esto, el Buda Shakyamuni le dice que lo acepte por gratitud y en nombre de todos los seres presentes. Entonces, Avalokiteshavara lo acepta, pero lo divide en dos, y le da una mitad al Buda Muchos Tesoros y otra al Buda Shakyamuni. Esto simboliza que el Bodhisattva comparte el mismo deseo o corazón que los Budas, ayudando a los seres sintientes de millones de formas.
El Bodhisattva Avalokiteshvara es uno de los Bodhisattvas más populares y adorados en todo el Budismo. En nuestro Templo, es uno de los dos Bodhisattvas que acompañan al Buda Amida en nuestro altar, y se encuentra representado por todo mi hogar.
Si bien vemos que los ejemplos de cómo podemos encarnar el Dharma parecen ser complejos, es algo que podemos hacer todos los días, con nuestros pensamientos, palabras y acciones. El diario vivir de un budista idealmente comienza con un acto devocional de gratitud frente al altar por las bendiciones recibidas y las que estamos por recibir. Luwgo, tratamos de no matar, no robar, no mentir, no abusar del sexo y de no abusar de sustancias intoxicantes durante el día, a medida que tratamos de ser amables y gentiles con todo el mundo, dando el regalo de una sonrisa, y siendo el ejemplo de la calma, la razón y la compasión a donde quiera que vamos. Igualmente, debemos de dar gracias antes de cada comida, y ver la cadena interminable de seres que la hicieron posible, y si comemos carne, de dar gracias a esos seres, que como el Bodhisattva de nuestra lectura, dio su vida para que nosotros podamos vivir y continuar practicando el Dharma. Finalmente, debemos de sacar un breve momento para meditar, o para nuevamente estar frente a nuestro altar y dar gracias por nuestro día.
Los Budas y Bodhisattvas trabajan incansablemente para ayudar a todos los seres. Imagina cómo sería el mundo si no lo hicieran. Aún así, todos nosotros somos una de esas mil manos que los Budas y Bodhisattvas usan para aliviar el sufrimiento del mundo. ¿Cómo estas ayudando?