Bienvenido a la Tierra Pura de la Luz Serena, un recurso sobre el Verdadero Budismo (一乘佛教), y sus posteriores ramificaciones, a la luz de las Enseñanzas Perfectas y Completas (圓教). Aquí presentamos el Budismo como religión, filosofía y estilo de vida, con énfasis en la Teología Budista (Budología), aspirando a presentar el Budismo balanceadamente entre la academia (estudios budistas) y la devoción, desde el punto de vista de una escuela tradicional de Budismo japonés (Tendai-shu 天台宗) y las enseñanzas universales del Sutra del Loto (法華経).


jueves, 9 de marzo de 2023

Aspectos de la Dharmología: Comentarios al Catecismo Budista V - Aprovechando al Máximo esta Preciosa Vida Humana 1

 A finales de Diciembre del 2022, el Templo Tendai de Puerto Rico y su Sangha Tendai Hispana, publicó el libro titulado Dharmología: Catecismo Budista - Las Enseñanzas y Prácticas Fundamentales del Verdadero Budismo (Hikari Publishing, 2022), el cual expone las enseñanzas doctrinales canónicas del Dharma Eterno del Buda desde la óptica de la escuela Tendai japonesa - la madre de todas las escuelas budistas en Japón - desde el contexto de nuestra cultura religiosa hispana. En las próximas entradas, expandiremos sobre aspectos específicos del Catecismo, desde un enfoque dharmológico (estudios doctrinales), para poder comprender detalladamente sus implicaciones

En estas próximas dos entradas, exploraremos la importancia de esta vida humana, sus ventajas, y los elementos benficiales y obstáculos en nuestra práctica budista para el Despertar (D:CB-C5.V.1 - C8.VI.5)

Al estudiar el Budismo, podemos ver que el Dharmadhatu (Reino del Dharma o Cosmos) está infinitamente lleno de innumerables formas de vida, donde la humanidad es solo una de sus posibilidades. En el Canon Budista, vemos que el Buda se refiere a este mundo y existencia como una "preciosa vida humana". Esto es porque, comparado con los otros reinos del Samsara (Infiernos, Hambruna, Animalidad, Asuras y Devas), solo esta forma de vida presenta las condiciones necesarias para poder estudiar y practicar el Dharma adecuadamente, pues noposee tanto dolor y tormento como los Infiernos, ni carecemos completamente de los elementos necesarios para nuestra subsistencia como en la Hambruna, ni somos constantemente perseguidos ni tememos por nuestras vidas como en la Animalidad, pero tampoco estamos tan rodeados de placer y opulencia como para estar constantemente luchando por más como los Asuras, ni perdernos en el ocio como los Devas. Esta vida humana es un terreno medio fértil, donde podemos encontrar una amplia gama de experiencias placenteras como no placenteras y neutrales, sin ser saturados por las mismas. La naturaleza efímera de estas experiencias nos permiten reflexionar sobre su naturaleza. Pero por preciosa o rara que sea, está en nosotros aprovechar o perder esta oportunidad. 

En este mundo, podemos desarrollar consciencia sobre los fenómenos y obtener la sabiduría necesaria para realizar la Verdadera Naturaleza de la Realidad y manifestar nuestra Budeidad. Son estas características las que hacen de este mundo, esta existencia humana, una ideal para estudiar y practviar el Dharma. Por ello, debemos de reflexionar sobre la preciosidad de esta vida humana, y su rareza.

Un nacimiento humano y el encuentro con el Verdadero Dharma es descrito en el Canon Budista como algo tan raro como una tortuga tuerta que encuentra un tronco flotante de sándalo con un hueco para sujetarlo. Una tortuga ciega, cuya esperanza de vida es de inconmensurables kalpas, vive en el fondo del mar, y solo una vez cada cien años sale a la superficie. Solo hay un tronco flotando en el mar con un hueco adecuado. Dado que la tortuga es ciega y el viento y las olas sacuden el tronco, la probabilidad de que la tortuga alcance el tronco es extremadamente remota. Es aún más raro, nos dice el Canon, nacer como un ser humano. Es por esto que, habiendo nacido como un ser humano, uno debe aprovechar la oportunidad para descubrir nuestra Naturaleza Búdica, alcanzar el Despertar y manifestar nuestra Budeidad.

 Veamos qué nos dice el Canon Budista.

Las Diez Libertades

En el Canon, vemos que esta preciosa vida humana nos permite Diez Libertades, pues nos permiten estudiar y practicar el Dharma. Las primeras cuatro no ofrecen oportunidad de acercarnos al Dharma:

1. Nacer en los Infiernos - Como vimos en el Catecismo Budista, el renacimiento en los Infiernos, ya sean calientes o fríos, conlleva un sentimiento extremo de dolor, desesperación y tormento, lo que no nos permite estudiar ni practicar el Dharma. Experimentando sus retribuciones kármicas, los seres en este mundo deben esperar a que el karma que los ha llevado allí se agote o a la salvación de un Bodhisattva; mientras, están muy saturados por su agonía como para desarrollar una intención positiva. Sin embargo, si vivimos en un estado mental de sufrimiento extremo, dolor y desesperación, vivimos mentalmente en un Infierno. Por ello, el primer paso es identificar nuestro estado de vida y tomar pasos proactivos para mejorarlo.

2. Nacer entre los Espíritus Hambrientos - Al igual que los seres en el Infierno, los Espíritus Hambrientos no poseen la oportunidad de acercarse al Dharma porque están constantemente atormentados por una sed y hambre que son insaciables; están tan consumidos por sus necesidades que sus mentes no pueden pensar en nada positivo ni por un segundo. Sin embargo, si vivimos en un estado mental denecesidad constante, pobreza, o si nos sentimos insatisfechos constantemente y buscamos saciar nuestro vacío existencial o emocional con objetos (físicos o mentales o emocionales) y nunca nos sentimos satisfechos, vivimos en la Hambruna. Por ello, el primer paso es identificar nuestro estado de vida y tomar pasos proactivos para mejorarlo.

3. Nacer como un Animal - Los animales son conducidos por la vida únicamente por sus deseos y tendencias habituales; solo reaccionan a nivel instintual. Sus capacidades limitadas no les permiten trascender su Ignorancia, no pudiendo entender el Dharma ni mucho menos ponerlo en práctica. Sin embargo, si vivimos en un estado mental donde solo existimos, comemos, tenemos sexo y dormimos, o si estamos constantemente luchando con otros o nosotros mismos, vivimos en la Animalidad. Por ello, el primer paso es identificar nuestro estado de vida y tomar pasos proactivos para mejorarlo.

4. Nacer en los Cielos como un Dios - Los dioses en los Cielos viven vidas llena de placer y opulencia, tan así que ni siquiera tienen que uestionar la naturaleza de su realidad. Esto los ciega a las desventajas de su existencia cíclica y les previene acercarse al Dharma. Hay algunos que se encuentran tan absueltos en sus estados meditativos que sus mentes son tan sutiles que no poseen la capacidad de reflexionar sobre las causas y condiciones que los llevaron a esos renacimientos, pasando una eternidad desperdiciando su buen karma, y eventualmente cayendo en los reinos bajos del Samsara. Sin embargo, si vivimos en un estado mental y físico de opulencia, donde lo tenemos todo, y estamos rodeados de placeres que nos privan de la necesidad o el momento de practicar, vivimos en un Cielo. Por ello, el primer paso es identificar nuestro estado de vida y tomar pasos proactivos para mejorarlo.

Las próximas seis condiciones se refieren a diferentes caminos o formas en los que los humanos no aprovechan o no poseen las condiciones necesarias para abordar correctamente la práctica del Dharma:

5. Nacer en un Lugar donde No Existe el Dharma (Budismo) - De acuerdo con el Budismo, el Cosmos atravieza diferentes ciclos y periodos de oscuridad (Ignorancia) y de luz (Dharma), donde hay momentos o mundos donde no se ha revelado aún un Buda, o donde sus enseñanzas cayeron en desuso, y los seres cayeron nuevamente en la oscuridad de la Ignorancia. No obstante, en este momento vivimos en un mundo donde ha aparecido la figura de un Buda, el mismo ha predicado el Dharma Eterno, y sus enseñanzas siguen vivas y disponibles para todos los seres, aunque estemos en la Era Final del Dharma.

6. Nacer en un Lugar Remoto - Aun cuando ha aparecido un Buda y exista el Dharma en este mundo, hay lugares del planeta donde el Dharma no está presente, o existe de forma fragmentada, imperfecta e incompleta, o donde no existe una comunidad o Sangha dedicada a mantenerla y ponerla en práctica.En estos lugares, existe muy poca posibilidad de practicar correctamente el Dharma. Igualmente, existen lugares donde la cultura o las autoridades no permiten la libertad religiosa, o donde la naturaleza de las personas no les permite tener la habilidad de abrir sus ojos y ver la Luz del Dharma.

7. Nacer sin la Capacidad Mental para Entender el Dharma - A vecesm aún cuando nacemos en un mundo donde haya aparecido un buda, haya predicado su Dharma Eterno y exista una comunidad busista o Sangha, hay seres que no poseen la capacidad mental para abordar y entender sus Enseñanzas. Sus capacidades o intelectos pueden ser limitados o pueden tener discapacidades que no les permitan accesar y practicar el Dharma.

8. Sostener Puntos de Vista Erróneos - Igualmente, hay seres que, ya sea por cultura o disposición propia, sigan puntos de vistas falsos que les impidan abordar y practicar el Dharma. Estos pueden haber sido inculcados por la cultura, la familia o la sociedad donde nacieron, limitando su receptividad, e impidiéndoles desarrollar su potencial al Despertar.

9. Seguir Religiones Falsas o Mundanas - También existen seres con pocos renacimientos, y con pocos méritos y virtudes, que solo ven el mundo y su mundaneidad, y no aspiran a algo superior, comportándose como seres de otros reinos bajos (animales o espíritus hambrientos, o incluso Asuras). Por otro lado, existen seres que no han tenido acceso al Dharma y que siguen religiones falsas que los mantienen atados a sus deseos y pasiones y no les permiten despertar su Bodhicitta y manifestar su Budeidad Innata. Tristemente, igualmente existen seres que siguen enseñanzas Budistas corruptas por maestros o tradiciones falsas. Todo esto impide al acceso al Dharma Verdadero.

10. Seguir el Hinayana - Aunque el Budismo Primitivo o Hinayana es imperfecto e incompleto, siguen siendo un camino que permite la apertura de los ojos para poder vislumbrar en algún momento el Verdadero Dharma. Sin embargo, si solo se sigue este camino, no podremos descubrir nuestra Naturaleza Búdica ni manifestar nuestra Bueidad. No obstante, es un umbral inicial que puede llevarnos al Dharma Eterno en esta vida (descubriendo el Verdadero Dharma) o en una vida futura.

Las Diez Ventajas

Ahora, habiendo establecido las condiciones que no se encuentran presentes en nuestras vidas (si estás leyendo esto), veamos las condiciones o ventajas que poseemos. Si poseemos las siguientes Diez Ventajas, tenemos todo lo necesario para abordar y practicar el Dharma, revelar nuestra Naturaleza Búdica y manifestar nuestra Budeidad, trayendo beneficio y felicidad a todos los seres sintientes y hacer de este mundo una Tierra Pura. Si tenemos las Diez Ventajas, podemos regocijarnos; si carecemos de algunas de ellas, debemos de trabajar para alcanzarlas.

Las primeras cinco son Ventajas Individuales:

1. Nacer como un Ser Humano - Como hemos visto, de todas la formas de vida, el nacimiento humano es uno raro y precioso que nos provee las condiciones necesarias para poder abordar y practicar el Dharma.

2. Nacer con Disposición a la Espiritualidad - Idealmente, hemos nacido con una disposición a la espiritualidad, y en un lugar donde ha llegado el Verdadero Dharma del Buda Eterno y existe una Sangha, y podemos entrar y ser aceptados en la misma como parte de la comunidad (Sangha). Este es de hecho una forma de Renacimiento, pues Renacemos en vida en la Tierra Pura de la Sangha del Buda.

3. Tener las Facultades Intactas - Algunos impedimentos físicos y mentales nos impiden abordar y comprender correctamente el Dharma. Esto incluye el no poder desarrollar Fe en las Enseñanzas, ni devoción, ni poder desarrollar un estilo de vida conductivo para nuestro estudio, práctica y Despertar.

4. No Tener un Estilo de Vida Conflictivo - Existen estilos de vidas que no son conducentes para el Dharma, que generan mal karma y destruyen nuestros méritos y virtudes, oscureciendo nuestra Verdadera Naturaleza. Aun cuando no hemos nacido en ese estilo de vida, lamentablemente podemos caer fácilmente en el mismo. Es por eso que debemos seguir los Preceptos (No Matar, No Robar, No Mentir, No Abusar de la Sexualidad, y No Abusar de los Intoxicantes) y los Seis Paramitas (Caridad, Preceptos o Moralidad, Paciencia, Esfuerzo en la Práctica, Meditar y desarrollar Sabiduría), además de buscar y ser aceptados en una Sangha budista bajo un monje ordenado, pues la Sangha nos ayuda y apoya en nuestro Camino del Bodhisattva, y sin ella, podemos perder esta oportnidad y vida.

5. Tener Fe en el Verdadero Dharma - Es esencial desarrollar Fe en un linaje y una fuente auténtica del Dharma, pues sin Fe, no tendremos la apertura mental y de corazón para tradcender nuestra Ignorancia Fundamental y nuestro ego, y con ello, no tendremos una verdadera oportunidad de práctica. Sin embargo, si abrimos nuestra mente y corazón y seguimos las enseñanzas de nuestro maestro y del Buda Eterno, podemos ser un recipiente adecuado para la Enseñanza y podremos manifestar nuestra Naturaleza Búdica en el mundo.

El segundo set de Ventajas se refieren al karma colectivo del tiempo y lugar donde hemos nacido, destacando por qué ese ambiente es conductivo para la prática:

6. Un Buda ha Aparecido en el Mundo - Si vemos la historia del mundo, podemos ver que el Buda apareció hace solo 2,500 años atrás, y aunque había aparecido bajo otras formas y nombres para sentar las bases para su verdadera aparición encarnada, fundando otras religiones preparatorias y hábiles, solo predicó su Verdadero Dharma hace nos siglos. No obstante, un Buda - Shakyamuni - apareció en este mundo y hoy podemos beneficiarnos de su Enseñanza.

7. El Buda ha Predicado el Dharma - Muchas veces, aunque ha aparecido un Buda en un mundo, no siempre predica completamente su Verdadero Dharma, o la Sangha monástica no cumplió su propósito de preservarla para la posteridad, o la preservó de forma incompleta o corrupta. No obstante, vivimos en un mundo donde el Verdadero Dharma ha sido preservado y restaurado en la Tradición del Loto, y continúa arrojando Luz sobre los seres y guiando al mundo.

8. El Dharma Correcto Existe en el Mundo - En el Budismo, el Verdadero Dharma pasa por tres etapas o eras, conocidas como las Tres Eras del Dharma, donde a medida que pasa el tiempo entre la aparición del Buda y el tiempo en el cual vivimos hacia el futuro, los seres pierden la capacidad deponerlo en práctica y el Dharma Correcto se corrompe. Estos son: (1) el Día Anterior de la Ley, también conocido como la Era del Dharma Correcto (Shōbō), los primeros mil años (o 500 años) durante los cuales los discípulos de Buda son capaces de entender y practicar las enseñanzas del Buda y fácilmente alcanzan la iluminación; (2) el Día Medio de la Ley, también conocido como la Era del Dharma Semblante (Zōhō), los segundos mil años (o 500 años), que solo se parece al Dharma correcto donde los templos existen y se mantienen las enseñanzas pero pocos alcanzan la Iluminación; y (3) el Último Día de la Ley, también conocida como la Era Degenerada o Era Final del Dharma (Mappō), que durará 10.000 años durante los cuales el Dharma declina, los templos existen en forma pero no en substancia, la gente se corrompe y se vuelve más mundana y los seres poseen pocas virtudes para alcanzar la Iluminación. Aunque actualmente vivimos en la Era Final del Dharma, el Verdadero Dharma Correcto se ha preservado en la Tradición del Loto y sus custodios han hecho una gigantesca labor, pues el mismo ahora llega a esta parte del mundo. 

9. La Aceptación de las Enseñanzas - Aunque el Verdadero Dharma aun continúa con nosotros, existen muchos países y sociedades donde aún no ha llegado, o donde no existe la libertad religiosa o de consciencia para aceptarlo. Igualmente, existen muchas versiones distorcionadas del Budismo, y tristemente, son bien populares, por lo que las personas estan siendo engañadas. Es por eso que la aceptación del Verdadero Dharma es una condición necesaria para nuestra práctica. 

10. Encontrando una Sangha - Finalmente, aunque tengamos la oportunidad de vivir en un mundo donde ha aparecido un Buda, ha predicado su Dharma y el mismo ha llegado a nosotros, debemos reconocer la necesidad de una Sangha y la guía de un maestro. No existe Budismo son Sangha, y no hay budistas que no pertenezcan a una. Solo a través de un maestro y con el apoyo espiritual de una Sangha podemos comprender correctamente las Enseñanzas y manifestar nuestra Budeidad. 

Hoy día, esto se ha expandido y, aunque no poseamos la ventaja de tener una Sangha cerca, o no vivamos en una sociedad donde se acepte el Dharma o donde exista un templo o comunidad que siga el Verdadero Dharma, podemos acceder a una virtual, pero esto requiere que pongamos más esfuerzo de nuestra parte. 

En fin, solo esta preciosa oportunidad humana nos permite las condiciones necesarias para poder abordar y practicar correctamente el Verdadero Dharma del Buda Eterno. Por esto, es menester el poder apreciar y aprovechar al máximo esta experiencia.