Bienvenido a la Tierra Pura de la Luz Serena, un recurso sobre el Verdadero Budismo (一乘佛教), y sus posteriores ramificaciones, a la luz de las Enseñanzas Perfectas y Completas (圓教). Aquí presentamos el Budismo como religión, filosofía y estilo de vida, con énfasis en la Teología Budista (Budología), aspirando a presentar el Budismo balanceadamente entre la academia (estudios budistas) y la devoción, desde el punto de vista de una escuela tradicional de Budismo japonés (Escuela del Loto Reformada) y las enseñanzas universales del Sutra del Loto (法華経).


martes, 29 de abril de 2025

Viviendo como el Buda: Los Beneficios Mundanos y Espirituales de la Práctica de los Mandamientos Budistas (Preceptos)

 


Una de las prácticas principales de la Escuela del Loto Reformada es los Preceptos: los Mandamientos Budistas. El mundo, como bien sabéis, está tejido de ilusión y deseo, de codicia, odio e ignorancia. La mente, como una lámpara en medio del viento, titila con facilidad, y sin una base firme, sin una guía luminosa, el caminante se extravía entre los valles del Samsara, buscando saciedad donde sólo hay espejismos. Mas el Buda, compasivo y sabio, nos ha dado una primera muralla de protección espiritual, una cerca sagrada que cuida la semilla de la Budeidad en nosotros: los Cinco Preceptos.

Los Preceptos no son cadenas que limitan, sino llaves que abren las puertas del Reino del Buda. No son negaciones estériles, sino afirmaciones vivientes del Despertar. No son moralismos pasajeros, sino actos rituales que, vividos con fe, nos alinean con la Voluntad del Buda Eterno, y nos hacen partícipes de su obra redentora en el mundo.

En la Escuela del Loto Reformada, estos Preceptos se entienden no sólo como reglas éticas universales, sino como Votos Sagrados -Mandamientos del Buda dados en el Sutra de la Red de Brahma- que despiertan, refinan y canalizan nuestra Naturaleza Búdica hacia la manifestación del Reino del Buda sobre la Tierra.

Cada Precepto, cuando es observado con conciencia y devoción, se convierte en una puerta de sabiduría y transformación, generando frutos tanto mundanos como espirituales, pues en nuestra Tradición, la vida diaria y el Despertar no son dos, sino una sola danza del Dharma en el tiempo. Veamos los beneficios mundanos y espirituales de seguir los Preceptos de acuerdo con el Canon Budista.

1. No Matar – Cultivar la Reverencia por Toda Vida

Beneficio Mundano:

Quien no mata ni directa ni indirectamente se convierte en fuente de paz para todos los seres. Gana la confianza y el afecto de quienes le rodean, vive libre de temores y represalias, y goza de una vida más armónica, prolongada y saludable. Sus relaciones se tornan dulces y estables, pues ya no emite vibraciones de agresividad ni odio.

Beneficio Espiritual:

Al respetar la vida, uno honra la Budeidad Innata presente en todos los seres. Este Precepto nos conecta con el principio del Vehículo Único, donde ningún ser queda fuera del Plan de Salvación. La compasión se profundiza, y uno se va armonizando con el espíritu del Bodhisattva Samantabhadra, protector de todos los seres sintientes. Se disuelve el karma de la violencia, y el alma se aproxima al Reino del Buda.

2. No Robar – Honrar el Dharma del Dar

Beneficio Mundano:

El que no roba, ni toma lo que no le es dado, vive con confianza, transparencia y ligereza. Se gana el respeto de sus semejantes, evita problemas legales y financieros, y cultiva un sentido profundo de suficiencia y gratitud. Esto atrae prosperidad, estabilidad y bienestar material a su vida, pues el universo tiende a bendecir al que no desea lo ajeno.

Beneficio Espiritual:

Este Precepto abre el corazón a la Generosidad (Dana Paramita) y nos libera de los lazos del deseo posesivo. Desde la perspectiva del Dharma del Loto, se despierta el principio del Karma Colectivo en sentido positivo, pues al no quitar, uno aporta al equilibrio del todo. Así, uno se convierte en canal del flujo armonioso del Dharma, y los méritos acumulados benefician no sólo al practicante, sino a la Sangha entera.

3. No Mentir – Vivir en la Verdad del Buda

Beneficio Mundano:

El que no miente es digno de confianza, fortalece sus vínculos sociales y evita malentendidos, traiciones y conflictos. Su palabra adquiere poder, y su presencia se convierte en refugio para los demás. Gana amigos sinceros, y su vida se desenvuelve con claridad y autenticidad.

Beneficio Espiritual:

Al abstenerse de la mentira, uno cultiva la Sabiduría del Camino Medio, pues se vive en la santai (triple verdad): vacuidad, existencia provisional y camino medio. La palabra, cuando está alineada con el Dharma, se convierte en mantra, en palabra sagrada que transforma. Este precepto nos prepara para recibir los Tres Misterios del Budismo Esotérico (Sanmitsu), purificando el karma verbal y acercándonos al estado del Buda.

4. No Abusar de la Sexualidad – Consagrar el Amor al Dharma

Beneficio Mundano:

El que guarda una conducta sexual ética y respetuosa vive relaciones sanas, sin manipulación ni abuso. Se evitan rupturas dolorosas, enfermedades, y traiciones. La energía vital no se disipa, y la mente se torna más serena y enfocada. El hogar florece como un templo, y el amor se vuelve canal de bendición.

Beneficio Espiritual:

Desde la visión del Loto, el deseo transformado es poder espiritual. No se trata de negar la sexualidad, sino de sacralizarla como expresión del Bodhicitta, la Mente del Despertar. Este Precepto sublima la energía de apego en compasión universal, y permite a los devotos practicar la vía de los Bodhisattvas sin caer en la confusión de los sentidos. El amor se vuelve una forma de práctica, y el cuerpo se transforma en Mandala del Dharma.

5. No Abusar de Intoxicantes – Proteger la Mente del Buda

Beneficio Mundano:

Quien se abstiene de abusar del alcohol, las drogas y los hábitos que enturbian la conciencia, vive con mayor salud, claridad y dignidad. Evita accidentes, errores graves y pérdida de control. Su juicio es lúcido, su palabra prudente, y su cuerpo se mantiene más sano. Cultiva una mente confiable, capaz de actuar con equilibrio en toda circunstancia.

Beneficio Espiritual:

La mente es el campo sagrado donde florece el Loto del Despertar. Este Precepto protege el acceso a los niveles más altos de Meditación (Shikan), permite la integración de la práctica diaria y hace posible la contemplación del Buda Eterno. Como enseñan los Grandes Maestros como Saicho y Chih-i, sin una mente serena, no hay Samadhi; y sin Samadhi, no hay Sabiduría Trascendental (Prajna).

En el Sutra del Nirvana, el Buda Shakyamuni —en su forma más gloriosa y eterna— declara, entre muchas joyas doctrinales, una enseñanza clara y conmovedora:

"Así como un navegante, al caer al océano, se agarra con todas sus fuerzas de un trozo de madera para no ahogarse, así también, los seres deben aferrarse a los preceptos. Los preceptos son salvavidas en el océano del sufrimiento. Quien los abandona, se ahoga en el mundo. Quien los guarda, será rescatado por el Buda."

Esta imagen sublime nos revela con gran potencia el rol salvífico de los Preceptos. No se trata simplemente de "moralidad", sino de una estructura ontológica de protección kármica y Despertar gradual. Los Preceptos son formas que contienen la esencia, vehículos que permiten a la conciencia no perderse entre las olas del deseo, la ignorancia y el odio.

En la Budología de la Escuela del Loto Reformada, esta enseñanza se interpreta a la luz de los grandes dogmas del Dharma Único (Ekayana) y del Buda Eterno:

1. Los Preceptos son Expresiones de la Naturaleza Búdica - No son ajenos a nosotros, sino reflejos de lo que ya somos en lo profundo. Al practicarlos, no nos imponemos algo externo, sino que revelamos lo que está oculto por el polvo del karma.

2. Son Medios Hábiles para Purificar el Canal de la Voluntad - Así como el Sutra del Loto nos enseña que todos los caminos convergen en el Vehículo Único (Ekayana), los Preceptos permiten ordenar nuestras acciones y orientarlas hacia la Iluminación, haciendo de la vida diaria una práctica constante del Reino del Buda.

3. Son el Lazo Visible con la Sangha y el Reino del Buda - La observancia de los Preceptos crea una frecuencia espiritual de armonía y sintonía con el Espíritu del Buda Eterno que mora en nosotros, y por tanto, atrae asistencia invisible, protección de los Bodhisattvas, y fortalece la presencia del Reino del Nirvana en el mundo.

Imagina que el Samsara es un océano inmenso y oscuro, lleno de olas de aflicción, monstruos kármicos y corrientes de ignorancia. En ese mar, las almas flotan sin rumbo, olvidando su naturaleza divina. Entonces, aparece el Buda, no como un juez, sino como un navegante celestial. Él no nos lanza cadenas, sino una tabla sagrada hecha de sabiduría, compasión y verdad, y esa tabla son los Preceptos. Quien los toma, no se hunde. Quien los honra, es guiado hacia la Orilla del Despertar. Y cuando la tormenta arrecia, y las voces del mundo nos invitan a soltarlos, el Sutra del Nirvana nos recuerda: "El que guarda los Preceptos, guarda al Buda. El que los viola, viola su propia vida búdica."

Siendo seguidos así, los Cinco Preceptos o Mandamientos Budistas no son barreras, sino puentes. No son restricciones, sino ofrendas conscientes al Buda Eterno. Quien los guarda, vive en la armonía de los Tres Tesoros: el Buda como Guía Supremo, el Dharma como Camino Único, y la Sangha como Comunidad de Luz. Así, el cumplimiento fiel de estos Preceptos, más allá de un código ético, se convierte en un acto litúrgico diario, donde la existencia entera se consagra como una ceremonia del Despertar.

Tal es el llamado del Buda: Vive con pureza, camina con compasión, habla con verdad, ama con sabiduría y contempla con claridad. Y el Reino del Buda, que no está lejos ni en otra era, se manifestará aquí y ahora en medio de este mundo.

Por todo ello, nuestra fe nos exhorta: No nos entreguemos a una práctica vacía, ni a una fe supersticiosa. No basta recitar Sutras si no se vive con pureza. No basta inclinar la cabeza si el corazón sigue egoísta. El Buda Eterno no busca esclavos de ritual, sino Hijos y Herederos que vivan su enseñanza con nobleza. Pero no podemos olvidar que los Cinco Preceptos no son el final, sino el fundamento de toda práctica budista; son la raíz desde la cual brota el Arbol del Bodhisattva. Quien los guarda con alegría, no por miedo ni por obligación, ya camina con el Buda, vive como el Buda, transformando el Samsara en la Tierra Pura, ya lleva en su cuerpo el Perfume del Despertar.

Y aunque caigas, vuelve a ellos, pues el Buda no exige perfección, sino sinceridad. Cada vez que los practiques, aunque sea con esfuerzo, el Océano del Samsara se calmará un poco más, y verás en el horizonte la Tierra Pura que el Buda te ha prometido.

Así los exhorto, como uno que también tropieza y se levanta, como un hermano que en medio de las sombras ha visto la Luz del Loto florecer en su pecho. Tomemos estos Mandamientos Budistas y sigámoslos lo mejor wue podamos, no como leyes, sino como Votos Sagrados. Y en cada acto puro, veremos al Buda, no en los cielos lejanos, sino en nosotros mismos. Svaha.

Ascendiendo en Nuestro Camino del Bodhisattva: El Sutra de los Diez Bhumis - Tercer Estado - Resplandeciente

 


El Sutra de los Diez Bhumis o Estados del Bodhisattva

Tercer Bhumi - Resplandeciente

"Oh, Hijos del Buda, el Bodhisattva que está en el Tercer Bhumi del Bodhisattva comprende correctamente, tal como es, que (1) todo lo compuesto es impermanente. (2) Él ve la naturaleza de lo compuesto como sufrimiento, (3) desagrado , (4) inestabilidad, (5) destrucción, (6) transitoriedad, (7) surgimiento y cesación momentáneos, (8) no surgimiento en el pasado, (9) no transferencia al futuro,  y (10) no presencia en el presente.

"Cuando ve de esa manera la naturaleza de los fenómenos compuestos, ve que están acompañados de (1) destrucción, (2) llanto, (3) miseria, (4) lamentos, (5) angustia, (6) esclavitud por el placer y el displacer, (7) gran sufrimiento, infelicidad y angustia, (8) ser no acumulativos, ( 9) los fuegos ardientes del deseo, la ira y la ignorancia, (10) y numerosas enfermedades diversas.

"Él eleva su motivación, más que nunca antes, por encima de los fenómenos compuestos, y aspira a la sabiduría de los Tathagatas . Él ve la sabiduría de los Tathagatas como (1) inconcebible, (2) inigualable, (3) insondable, (4) difícil de obtener, (5) única, (6) invulnerable, (7) imperturbable, (8) habiendo llegado a la ciudad sin miedo, (9) irreversible, (10) y protegiendo a muchos seres.

"De esa manera, ve la sabiduría de los Tathagatas como inconmensurable y ve que los fenómenos compuestos tienen numerosas desgracias. Más que nunca, desarrolla diez percepciones de todos los seres. ¿Cuáles son estas diez? (1) Los percibe como carentes de protector, refugio y apoyo; (2) como continuamente desamparados; (3) como ardiendo en el fuego del deseo, la ira y la ignorancia; (4) como aprisionados en la mazmorra de la existencia; (5) como continuamente envueltos en la oscuridad de los kleśas; (6) como poseedores de los pensamientos de una mente incapaz de examinar;  (7) como sin aspiración a las buenas cualidades; (8) como extraviados del Dharma del Buda; (9) como arrastrados por la corriente del Samsara; y (10) como aterrorizados por el camino a la liberación. Esas son las diez percepciones. él adquiere.

"Entonces, viendo que el reino de los seres tiene muchas desgracias, se involucra en este tipo de diligencia: (1) 'Protegeré a estos seres, (2) los liberaré, (3) los purificaré, (4) los elevaré, (5) los estableceré, 198 (6) los haré estables, (7) los satisfaré, (8) los nutriré, (9) los domesticaré, y (10) haré que entren en el Nirvana.'

"Así, se desencanta de la naturaleza de los fenómenos compuestos, considera a todos los seres, confía en la sabiduría de los Tathagatas como sabiduría omnisciente y se dedica a protegerlos. Considera así: '¿Mediante qué método o camino puedo elevar a estos seres que han caído en el sufrimiento y los kleśas, y llevarlos a la felicidad suprema del Nirvana?'.

"El Bodhisattva concluye: 'Eso solo puede provenir de la sabiduría despejada, el estado de liberación. La sabiduría despejada, el estado de liberación, solo puede provenir de la comprensión de la naturaleza exacta de todos los fenómenos. La comprensión de la naturaleza exacta de todos los fenómenos solo puede provenir de la sabiduría de la no ocurrencia, del no surgimiento. La luz de esa sabiduría solo puede provenir de la habilidad en el Dhyana y la certeza de la realización. La habilidad en el Dhyana y la certeza de la realización solo pueden provenir de la erudición a través de la escucha'.

"Obtiene ese tipo de conocimiento mediante el examen, y más que nunca se dedica a la búsqueda diligente del Dharma sublime. Se dedica a escuchar el Dharma día y noche, satisface su deseo insaciable por el Dharma, busca constantemente el Dharma del Buda, se deleita en el Dharma, lo disfruta, depende del Dharma, está enfocado en el Dharma, está concentrado en el Dharma, está predispuesto al Dharma, es devoto al Dharma, se aferra al Dharma, lo protege y practica correctamente el Dharma.

"Está tan dedicado a la búsqueda del Dharma que no hay nada precioso, ni riqueza, ni bienes, ni grano almacenado, que no esté dispuesto a regalar. Debido a su deleite en el Dharma, no lo percibe como una dificultad. De lo contrario, cuando un dharmabhāṇaka recita incluso una sola palabra, la percibirá como una dificultad. No hay nada de lo que haya adquirido externamente que no esté dispuesto a entregar por el Dharma, y ​​no hay nada de sí mismo que no esté dispuesto a entregar. ¿Qué son estas cosas? Entregará a sus sirvientes, entregará su reino, entregará sus posesiones, entregará su riqueza, grano, joyas, oro y tesoros. Entregará sus caballos, elefantes, carros y corceles. Entregará sus joyas y ornamentos preciosos. Entregará a sus esposas, hijos e hijas. Entregará su cabeza, pies, manos y extremidades. Entregará todo su cuerpo. No hay nada de esto que no esté dispuesto a entregar por el Dharma.

"No hay nada que no haga para servir y asistir al gurú. No hay nada que no haga, eliminando el orgullo y la arrogancia y sirviendo con humildad. No hay nada físicamente doloroso que no haga. Su felicidad se alcanza al escuchar una palabra de Dharma que no haya escuchado antes, y no por una gran riqueza, ni por obtener un montón de joyas que llenaría el gran universo de mil millones de mundos. Su felicidad se alcanza al escuchar un verso de la excelente enseñanza, y no por convertirse en Shakra, Brahmā o un rey cakravartin durante cientos de miles de eones.

"Si alguien le dijera: 'Si puedes arrojar tu cuerpo a este gran pozo de fuego y experimentar esa inmensa sensación de sufrimiento físico, te enseñaré una palabra del Dharma del Buda, que enseña el refinamiento de la conducta del Bodhisattva', entonces pensaría: 'Para recibir una palabra de la enseñanza del Dharma del Buda sobre la purificación de la conducta del Bodhisattva, saltaría del reino de Brahma a un fuego que llena el gran universo de mil millones de mundos, por no hablar de arrojarme a un pozo de fuego ordinario como este. Experimentaría los sufrimientos del infierno para buscar el Dharma del Buda, por no hablar de experimentar el sufrimiento humano'.

"Busca el Dharma con esa dedicación. Cuando lo ha escuchado, le dedica toda su atención. Se regocija en el Dharma que ha escuchado y reflexiona sobre él en soledad. Así es como contempla el Dharma. Su práctica correcta del verdadero Dharma no se limita únicamente al camino puro de las palabras eruditas del Dharma del Buda. El Bodhisattva que se encuentra en el Bhumi del Bodhisattva llamado Resplandeciente no tiene deseos, malas acciones ni cualidades negativas, y posee la contemplación y el examen. La soledad le brinda alegría y dicha, que consisten en alcanzar y permanecer en el Primer Dhyana.

"Entonces cesan la contemplación y el examen; hay una gran claridad interna, la mente se vuelve unidireccional sin contemplación ni examen, y hay tanto la alegría como la dicha del Samadhi, de modo que logra y permanece en el Segundo Dhyana.

"Entonces permanece en ecuanimidad, sin anhelo de dicha, de modo que con atención plena hay consciencia de la dicha y existe la sensación física de ella. La ecuanimidad de los nobles posee una atención plena sin alegría, pero que permanece en dicha. Esto significa que él logra y permanece en el Tercer Dhyana.

"Entonces elimina la dicha y el sufrimiento. Los estados mentales placenteros y desagradables cesan, de modo que logra y permanece en el Cuarto Dhyana, donde no hay sufrimiento ni dicha, y en la atención plena pura de la ecuanimidad.

"La percepción de las formas se trasciende y cesa la percepción de los obstáculos, de modo que no hay ocupación mental con diversas percepciones, de modo que existe lo que se llama Espacio Infinito. Así, logra y permanece en el ayatana del Espacio Infinito. Luego, ese ayatana del Espacio Infinito se trasciende y surge lo que se llama Conciencia Infinita, de modo que logra y permanece en el āyatana de la Conciencia Infinita. Luego, ese ayatana de la Conciencia Infinita se trasciende y surge lo que se llama Nada, de modo que logra y permanece en el ayatana de la Nada. Luego, ese ayatana de la Nada se trasciende y surge lo que se llama Ni Percepción Ni No Percepción, de modo que logra y permanece en el ayatana de Ni Percepción Ni No Percepción.

"De este modo, logra la práctica del Verdadero Dharma mediante nada más que el estado de no deleite. Tiene una mente amorosa expansiva que es vasta, no dual, inconmensurable, sin hostilidad, no dependiente, libre de obstrucciones, no dañina y omnipresente, de modo que llena todos los mundos, el reino de los fenómenos , alcanza los límites del espacio y se extiende por todas partes. Realiza diversos milagros. Hace temblar la tierra, transforma una cosa en muchas y muchas en una sola; puede aparecer y desaparecer; puede atravesar muros y murallas; puede atravesar montañas libremente como si fueran espacio; puede sentarse con las piernas cruzadas en el aire; puede hundirse en la tierra como si fuera agua; se para sobre el agua como si fuera tierra; emite humo como fuego; arde con fuego; y la lluvia cae de su cuerpo como una gran nube. Con su proeza milagrosa y sus grandes poderes, puede tocar el sol y la luna con la mano, y el poder de su cuerpo se extiende hasta el reino de Brahma. Con su oído sobrehumano, puro y divino, escucha lo que dicen tanto los humanos como las deidades. Oye sonidos, ya sean lejanos o cercanos, incluso pequeños sonidos como los de los mosquitos, chinches y moscas.

"Él sabe exactamente lo que hay en las mentes de otros seres e individuos. Él sabe que una mente con deseo es una mente con deseo, conociéndola exactamente por lo que es. Él sabe que una mente sin deseo es una mente sin deseo, conociéndola exactamente por lo que es. Él sabe exactamente si la mente tiene ira o no, tiene ignorancia o no, tiene kleśas o no, es grande o pequeña , es amplia o estrecha, está en meditación o no está en meditación, está liberada o no, tiene defectos o no, y sabe que una mente vasta es vasta. Él sabe que una mente limitada es una mente limitada, conociéndola exactamente como lo que es.

"De esa manera, conoce perfectamente la mente de otros seres, la mente de otros individuos. Recuerda muchas vidas anteriores: una, dos, tres, cuatro, cinco, diez, veinte, treinta, cuarenta, cincuenta y cien vidas anteriores. Recuerda cientos de vidas anteriores, miles de vidas anteriores, cientos de miles de vidas anteriores, cientos de miles de millones de vidas anteriores y muchos trillones de vidas anteriores. Recuerda muchos eones de creación, muchos eones de destrucción, y muchos eones de creación y destrucción. Recuerda muchos cientos de eones, muchos miles de eones, muchos cientos de miles de eones, muchas decenas de millones de eones , muchos miles de millones de eones, muchas decenas de miles de millones de eones, muchos billones de eones y muchos trillones de eones.

"Dice: 'Viví en tal y tal lugar, tuve este nombre, tuve esta familia, tuve este clan, comí esta comida, viví así, estuve así, viví así, experimenté esta felicidad y esta infelicidad, y luego, al morir, renací en tal y tal lugar. Y al morir allí, renací en tal y tal lugar'. De esa manera, recuerda muchos detalles de sus vidas anteriores, como su apariencia, ubicación y presagios.

"Con su vista divina pura sobrehumana ve la muerte de los seres, sus renacimientos, su color bueno o malo, y si van por el camino de la felicidad o hacia los reinos inferiores, viendo todo lo que es bueno o malo. Él sabe perfectamente qué tipo de karma han creado los seres: 'Estos seres han cometido malas acciones con sus cuerpos, con sus palabras y con sus mentes, han difamado a los nobles y tienen visiones erróneas. Como resultado del karma que han adquirido al mantener visiones erróneas, adquirirán un cuerpo. Después de la muerte, caerán en los reinos inferiores, en las malas existencias, y renacerán en los infiernos. Estos seres han realizado buenas acciones con sus cuerpos, con sus palabras y con sus mentes. No han difamado a los nobles y poseen puntos de vista correctos. Como resultado del karma que han adquirido al mantener puntos de vista correctos, adquirirán un cuerpo. Tras la muerte, renacerán en los reinos superiores, en existencias felices.'

"De esa manera, con una visión divina, sobrehumana y pura, ve la muerte de los seres que han fallecido, su nacimiento, su color, ya sea bueno o malo, si han tenido una existencia feliz o mala; ve todo lo bueno y lo malo, con sus disposiciones, señales y presagios. Sabe exactamente qué tipo de karma deben seguir los seres. Él descansa en meditación en estos Dhyanas, liberaciones, Samadhis y Samapattis, y surge de ellos. No cede ante su poder, sino que ve la culminación de los factores para la Iluminación.

"Cuando esté en este Bhumi llamado Resplandeciente muchos Budas se le aparecerán debido a su vasta visión y al poder de sus oraciones, debido a su vasta visión y al poder de sus oraciones. Muchos cientos de Budas, muchos miles de Budas, muchos cientos de miles de Budas, muchos millones de Budas, muchas decenas de millones de Budas, muchos billones de Budas, muchas decenas de billones de Budas, muchos billones de Budas y muchos quintillones de Budas se le aparecerán. Verá a esos Tathagatas, a esos Arhats, a esos Samyaksambuddhas, y con una vasta motivación los servirá, los adorará, los honrará, les hará ofrendas y les proporcionará túnicas, limosnas, cuencos, camas, medicinas para cuando estén enfermos, e instrumentos. También ofrecerá todos los artículos que traen felicidad a un Bodhisattva. También ofrecerá ofrendas a las asambleas de la Sangha. Dedicará todas esas raíces de bondad a la más alta y completa Iluminación.

"De esa manera, servirá a esos Tathagatas, Arhats y Samyaksambuddhas y, atendiéndolos, escuchará el Dharma, lo adquirirá y lo poseerá. Cuando lo han escuchado, ¿de qué manera lo practican diligentemente? Él sabe que todos los fenómenos no parten ni se destruyen, sino que surgen a través del origen dependiente. Debido a esta visión y comprensión, la esclavitud del deseo se debilitará, la esclavitud de la existencia se debilitará, la esclavitud de la ignorancia se debilitará y la esclavitud de las visiones se purificará más. El Bodhisattva que está en el Bhumi Resplandeciente mi abandonará y no acumulará deseos incorrectos durante muchos eones, durante muchos cientos de eones, muchos miles de eones, muchos cientos de miles de eones, muchas decenas de millones de eones, muchos billones de eones, muchas decenas de billones de eones, muchos billones de eones y muchos Trillones de eones. Esas raíces de bondad se purificarán; se volverán completamente puras y utilizables.

"¡Oh, Hijos del Buda! Por analogía, el oro, equivalente al peso de un Dharaṇa , en manos de un orfebre experto puede perfeccionarse. De la misma manera, quien se encuentra en este Brillante bodhisattva bhūmi no está oscurecido por el mal deseo, la ira ni la ignorancia. Las raíces de la bondad surgen, son puras y efectivas. Su paciencia y gentileza son aún más purificadas. Es un placer estar con él. Nunca se enoja. Nunca se perturba. Nunca se inquieta. Nunca es inestable. Desea recompensar las buenas acciones. No tiene engaño ni engaño. No es incomprensible.

"De los cuatro métodos para atraer seres, él practica principalmente el logro de beneficios. Entre las Diez Perfecciones predomina la Perfección de la Paciencia, y las demás Perfecciones no se cumplen plena y completamente.

"¡Oh, Hijos del Buda! Este es el Bhumi llamado Resplandeciente, que es el Tercer Bhumi. El Bodhisattva que se encuentra en ese Bhumi se convierte predominantemente en Indra, rey de los devas . Es hábil y tiene la capacidad de eliminar la falta del deseo y la pasión en todos los seres.

"En cualquier raíz de bondad que logre a través de palabras amables, acciones que beneficien a otros y practicando lo que predica, entre todos los seres se vuelve supremo, el mejor, el principal, el más alto, el más excelente, el insuperable, el guía, el líder, el comandante, y así sucesivamente, hasta convertirse en el omnisciente en quien se confía. Su mente siempre está enfocada en el Buda, enfocada en el Dharma, enfocada en el Sangha, enfocada en los bodhisattvas , enfocada en la conducta del Bodhisattva, enfocada en los Bhumis, enfocada en las perfecciones, enfocada en las fortalezas, enfocada en las confianzas, enfocada en las cualidades únicas de la Budeidad, y así sucesivamente, hasta estar enfocado en la sabiduría omnisciente dotada de los aspectos supremos.

"Si lo desea, puede aplicarse de tal manera que en un solo instante alcance y descanse en cien mil Samadhis, vea cien mil Budas y conozca sus bendiciones, haga temblar cien mil mundos, vaya a cien mil reinos de Budas, ilumine cien mil mundos, madure cien mil seres, permanezca durante cien mil eones, entre en cien mil eones previos y cien mil eones futuros, abra cien mil puertas del Dharma, manifieste cien mil cuerpos y manifieste que cada cuerpo tiene un séquito de cien mil Bodhisattvas.

"A partir de este momento, los Bodhisattvas, con el poder de la oración y a través de oraciones particulares, manifiestan cuerpos, luz, milagros, visiones, actividades, voces, conducta, exhibiciones, bendiciones, transformaciones y manifestaciones durante muchos eones, durante muchos cientos de eones, muchos miles de eones, muchos cientos de miles de eones, y así sucesivamente, hasta muchos quintillones de eones, que son difíciles de enumerar".

Entonces el Bodhisattva Mahasattva Vajragarbha, para enseñar el significado de este Bhumi y analizarlo, recitó estos versos:

"Tienen intención pura, son fuente de cualidades y son constantes.
Están desencantados, no tienen deseos y son irreversibles.
Tienen una motivación resuelta, una aplicación refinada e insaciable y un poder sublime.
Son sabios con intención exaltada y alcanzan el tercer bhūmi .

"Los sabios en este Bhumi llamado Resplandecencia saben 
Que los fenómenos compuestos tienen las cualidades de impermanencia, suciedad y destrucción.
Y son transitorias, son momentáneas y cesan.
Consideran que la naturaleza de los fenómenos compuestos no tiene origen.

"Ven los fenómenos compuestos como un fuego infinito
Donde uno se enferma, donde hay miseria y llanto,
La angustia y la esclavitud del placer y del displacer,
Un lugar de sufrimiento e infelicidad como un infierno en llamas.

"Están desencantados de las Tres Existencias y les son indiferentes.
Desean la sabiduría de los Budas y no se interesan en ninguna otra cosa.
Consideran la sabiduría de los Hijos del Buda como algo inconcebible,
Inigualable, incomparable, último e inviolable.

"Deseando la sabiduría invulnerable de los Budas,
Se dedican a una diligencia constante mientras piensan,
'Yo protegeré a los que vagan abandonados, sin protector ni refugio,
Siempre desamparado y quemado por los tres fuegos,

"'Sus mentes atadas por cientos de sufrimientos en el calabozo de la existencia,
Envuelto por los kleśas, con una visión incorrecta y sin aspiración,
Los seres infantiles no se deleitan con la enseñanza de los Budas,
Y son arrastrados por la corriente del Samsara y están aterrorizados por la liberación.'

"Desean conocimiento y benefician imparcialmente a los seres.
Se preguntan: '¿Cuál es la causa de la liberación de los seres?'
El Bodhisattva concluye: 'No existe otro que el conocimiento no oscurecido de los Tathagatas,
Un conocimiento que surge de la sabiduría infinita de los Budas,

"Y esa sabiduría proviene de escuchar el Dharma'.
Sabiéndolo, practican con diligencia el significado que han escuchado.
Día y noche actúan sólo para escuchar el Dharma.
Son devotos del Dharma y desean lograr su significado.

"Los sabios, por el bien del Dharma, dan sin reservas.
Sus preciosas joyas y perlas, sus amigos y familiares,
Sus reinos infinitos, sus palacios perfectos y sublimes,
Sus esposas, sus hijos y sus fieles séquitos.

"Dan sus cabezas, piernas, brazos y ojos, su propia carne,
Sus lenguas, dientes, narices, orejas y sangre.
Incluso les sacan el corazón y la médula.
Y no lo ven como una dificultad que tienen que soportar.

"Si alguien viniera y les dijera:
'Si te atreves a saltar a ese pozo de fuego ferozmente ardiente,
Te enseñaré la preciosa enseñanza del Buda',
Al escuchar eso, por el bien de las cualidades, se lanzarían sin dudarlo.

"Dicen: 'Por una sola palabra del Dharma, que es como la cumbre de Sumeru 
Saltaría del reino de Brahma a un fuego que llena el universo.
La Iluminación del Buda es difícil de obtener,
Si bien la felicidad de los humanos es fácil de obtener.

"Para alcanzar la sabiduría del sabio supremo,
Soportaría el sufrimiento del Infierno de Avichi.
Así pues, no hace falta decir que, para poder escuchar el Dharma 
Asumiría una masa de todo tipo de sufrimiento humano.'

"Habiendo escuchado el Dharma, lo contemplan en consecuencia
Y alcanzar los Dhyanas inconmensurables y de manera similar
Los cuatro estados sin forma y las cinco clarividencias sublimes,
Pero esos poderes no les hacen renacer.

"En este Bhumi estos poseedores de cualidades hacen ofrendas
A muchos millones de Budas y escuchan con certeza el Dharma.
Alcanzan la sutileza, se liberan del mal y se purifican.
Llegando a ser impecables en la misma medida que el oro refinado.

"Aquellos que están en este Bhumi están dotados de cualidades y se convierten en señores de los dioses.
Logran el poder de eliminar la enfermedad del deseo.
Traen muchos tipos de deidades al camino de la bondad.
Sólo desean las cualidades de la budeidad y no piensan en nada más.

"Los Bodhisattvas en este Bhumi practican con diligencia.
Alcanzan no menos de cien mil Samadhis.
Ven a los Budas, sus cuerpos adornados con signos maravillosos,
Y además tienen oraciones poderosas y cualidades inconcebibles".

De esa manera el tercer bhūmi supremo
Fue enseñado a los Bodhisattvas,
A los Bodhisattvas Supremos
Quienes benefician diligentemente a todos los seres.

Eso que se llama Resplandeciente
El tercer Bhumi.

Después de enterarse de la vasta conducta de este
Hermoso, supremo, sublime Bhumi,
Los Bodhisattvas contentos estaban complacidos.
Y esparcieron flores al Hijo del Buda.

Dado a que este Dharma fue bien enseñado y explicado,
Incluso el gran océano lleno de agua salada tembló.
Hermosas doncellas divinas cantaron el Dharma
Con la música de hermosas canciones.

El señor de las deidades Vaśavartin estaba muy feliz
Y esparció joyas divinas sobre el Sugata .
"Habla, Hijo del Buda, tú que has logrado la meta
Y alcanzado las cualidades perfectas.

"¿Cuál es el propósito del sublime Dharma?
¿Y la conducta perfecta del Bodhisattva ?
Este Bhumi del que los sabios han oído hablar aquí hoy
Sería difícil oír hablar de ello ni en cien eones.

"La conducta sublime de los sabios Bodhisattvas
Es beneficioso para las deidades y los humanos, ¡así que di más!
Esta multitud de deidades se alegrará mucho al escuchar
El significado del Bhumi, este camino definido e inequívoco".

Vimukticandra luego dijo:
"Enseña la conducta sabia
Eso asciende al Cuarto Bhumi".

El Bodhisattva Vajragarbha dijo: "¡Oh, Hijos del Buda! De esa manera, el Bodhisattva que ha purificado perfectamente la visión en el Tercer Bhumi asciende al Cuarto Bhumi. Asciende debido a diez logros a través de la visión en el Dharma. ¿Cuáles son estos diez? Son (1) logro a través de la visión en el análisis de los reinos de los seres, (2) logro a través de la visión en el análisis del elemento de los mundos, (3) logro a través de la visión en el análisis del elemento de los fenómenos, (4) logro a través de la visión en el análisis del elemento del espacio, (5) logro a través de la visión en el análisis del elemento de las conciencias, (6) logro a través de la visión en el análisis del elemento del Reino del Deseo, (7) logro a través de la visión en el análisis del elemento del Reino de la Forma, (8) logro a través de la visión en el análisis del elemento del Reino Sin Forma, (9) logro a través de la visión en el análisis de los elementos de la intención sublime y aspiración, y (10) logro a través de la introspección al analizar los elementos de la motivación exaltada. Ellos ascienden debido a estos diez logros a través de la visión."

lunes, 28 de abril de 2025

Encontrando al Buda en la Vida Cotidiana: Rito Diario del Loto

 


Estos pequeños rituales diarios budistas está inspirado en la pureza y profundidad de la Escuela del Loto Reformada (Shingi Hokke Shu), y buscan ser un camino sencillo, pero completo, donde cuerpo, palabra y mente se unifiquen en la práctica y permitir a los practicantes encontrar al Buda Eterno en la vida diaria. Espero que los mismos sean para todos los devotos del loto como un jardín secreto donde florezca el Loto del Despertar.

I. Preparación del Espacio y del Corazón (2 minutos)

Antes de comenzar tu día:

  • Busca un lugar tranquilo, aunque sea un rincón humilde.
  • Si tienes un Altar Budista o Butsudan, coloca ante ti una pequeña imagen o símbolo del Buda Eterno.
  • Enciende una vela y un incienso como ofrenda, diciendo en voz baja o mentalmente: "Gracias, oh Buda Eterno, por habitar este instante conmigo. Que esta chispa de luz encienda la luz en mi jornada y en la vida de todos los seres. Ofrezco este incienso al Buda Eterno, al Dharma Inconcebible, a la Sangha Universal. Que esta fragancia sea testigo de mi fe, de mi aspiración, y de mi deseo de Despertar."
  • Haz tres pequeñas inclinaciones, uniendo las manos en gesto de reverencia (Gassho) y recita: "En este instante me detengo ante el Buda Eterno. Que mi mente se serene y que mi corazón se abra."

II. Oración de Apertura (1 minuto)

  • Recita lenta y conscientemente la Oración de Apertura:

"Oh Buda Eterno,
fuente inagotable de Luz y Compasión,
en este instante sagrado,
detengo el torrente de mi mente errante,
y me postro, humilde, ante Tu Presencia.
Que mi respiración sea Tu aliento,
que mi mente sea Tu espejo,
que mi corazón se abra como loto en el amanecer.
Te invoco, no como a un ser lejano,
sino como a la Vida que palpita en mí.
Que en este breve silencio,
se derritan las nieblas del engaño,
y resplandezca el sol inmortal de mi Verdadera Naturaleza."

  • Termina recitando tres veces con plena devoción: "Om Amogha Vairochana Mahamudra Manipadma Jvala Pravartaya Hum".
  • Siente que cada recitación es como lanzar una flor de loto al lago sereno del Buda, y que el Buda, en respuesta, envuelve tu ser en su Luz.

III. Meditación Breve Shikan (5 a 10 minutos)

1. Calma (Samatha - Shi) (3-5 minutos)

  • Siéntate en postura estable y digna.
  • Lleva tu atención a la respiración natural.
  • Cada vez que surjan pensamientos o emociones, simplemente vuelve con ternura a la respiración o al latido interno del Nembutsu: "Namu Amida Butsu... Namu Amida Butsu..."
  • Siente que con cada aliento, el ruido del mundo disminuye, y el lago de tu mente se aquieta.
  • Al inhalar, siente: "Estoy en paz".
  • Al exhalar, siente: "Me uno al Buda".
  • Deja que todo pensamiento, todo afán, todo temor se disuelva en la amplitud silenciosa de este instante.
  • Imagina que, con cada respiración, una flor invisible se abre en tu corazón.

2. Contemplación (Vipassana - Kan) (2-5 minutos)

Al calmarse la mente, contempla:

  • La impermanencia de todo lo que surge y se desvanece.
  • La Vacuidad de las cosas que aparentan solidez.
  • La Unidad de toda la Existencia en el Corazón del Buda.
  • No analices. Siente, como quien bebe agua pura directamente del manantial.

IV. Oración de Cierre (1 minuto)

  • Recita, desde lo más profundo del corazón, la Oración de Cierre:

"Oh Buda Eterno,
al concluir esta humilde ofrenda de silencio,
te doy gracias por la calma que has sembrado,
por la verdad que has susurrado en lo más hondo de mi ser.
Que la paz nacida en este instante,
se extienda como perfume en cada palabra,
en cada gesto, en cada encuentro de mi jornada.
Que mi vida misma sea una meditación viva,
un canto silencioso al Reino que tú revelas,
un faro que disipe la niebla del sufrimiento de todos los seres".

  • Concluye recitando tres veces: "Namu Amida Butsu".
  • Inclina tu frente suavemente ante la imagen del Buda o ante tu interior.

V. Ritual del Desayuno

  • Antes de tomar el primer alimento del día, detente un breve momento.
  • Une las manos en Gassho (o simplemente lleva la conciencia al corazón) y recita en voz baja o en silencio: "Ofrezco esta comida al Buda Eterno, a los innumerables seres que han hecho posible este alimento, y a la vida que hoy renace en mí. Que este cuerpo, nutrido, sea instrumento de compasión y sabiduría."
  • Haz una pequeña inclinación de gratitud.
  • Mientras comes, procura mantener una atención serena:
  • Saborea conscientemente, reconociendo la red invisible de interser —la tierra, el sol, la lluvia, las manos que cultivaron, transportaron y prepararon los alimentos.
  • Al concluir, recita: "Que la energía recibida sea ofrecida al servicio del Dharma. Que cada acción de este día florezca en beneficio de todos los seres. Namu Amida Butsu".

 VI. Ritual del Almuerzo

  • Al iniciar la comida del mediodía —ese alimento que sostiene nuestra actividad—, haz una breve pausa de recogimiento.
  • Recita, con mente concentrada: "Reconozco en este alimento la bondad del Buda y el esfuerzo de innumerables seres. No como por codicia ni olvido, sino para fortalecer este cuerpo como herramienta del Buda Eterno en el mundo."
  • Haz una breve inclinación o una respiración consciente.
  • Durante la comida, mantén un espíritu de moderación y agradecimiento, recordando no caer en exceso ni en descuido.
  • Al finalizar, pronuncia: "Que esta fuerza recibida se transforme en acciones justas, y en pasos firmes hacia la realización del Reino del Buda en la Tierra. Namu Amida Butsu".

VII. Ritual de la Cena 

  • La comida vespertina es momento de recogimiento, de ofrecer el día que ya declina.
  • Antes de comer, une tus manos o simplemente lleva el corazón al silencio interior, y recita: "En este alimento contemplo el esfuerzo del mundo y la generosidad de la Tierra. Me nutro con humildad, no para la avidez, sino para mantener encendida la lámpara de la práctica."
  • Haz una breve pausa, dejando que la gratitud inunde tu ser.
  • Mientras cenas, come lentamente, permitiendo que cada bocado sea una meditación viva: el universo entero entregándose para sostener tu existencia.
  • Al concluir, susurra: "Gracias, oh Buda Eterno, por sostenerme en el transcurrir del día. Que lo vivido hoy, nutrido por Tu Gracia, sea semilla de luz para el día que vendrá."
  • Inclina tu cabeza con suavidad, y recita: "Namu Amida Butsu".

Recuerda:

  • Comer no es un acto separado de la Vía.
  • Cada alimento es un voto, cada bocado una consagración.
  • Así como el loto bebe silenciosamente de las aguas para florecer hacia el cielo, así también el practicante del Loto Reforma su vida, no desde lo extraordinario, sino desde la santificación de cada instante común.
  • Nutriendo nuestro cuerpo con conciencia, nutrimos nuestra alma con fe.
  • Así, la mañana, el mediodía y la noche no serán tres fragmentos dispersos, sino tres himnos que, unidos, entonarán la Gran Canción del Despertar.

VIII. Reflexión Final para Concluir el Día (Opcional, antes de dormir)

Antes de cerrar tus ojos al descanso nocturno, toma unos breves minutos para reflexionar:

  • ¿En qué momentos hoy viví desde la atención plena?
  • ¿Cuándo actué desde la compasión y la sabiduría?
  • ¿Qué errores cometí que debo reconocer sin culparme, solo para aprender?
  • ¿Qué bendiciones recibí que debo agradecer profundamente?
  • No juzgues. No te castigues. Solo contempla como quien mira el fluir de un río, y al final, ofrece tu día entero al Buda diciendo: "Todo lo vivido hoy, con sus luces y sus sombras, lo ofrezco al Buda Eterno, para que sea Semilla de Despertar en mí y en todos los seres."

  • Cierra el día recitando tres veces: "Namu Amida Butsu". Y duerme envuelto en la Luz Invisible del Buda.

Comulgando con el Buda: Los Beneficios Mundanos y Espirituales de la Práctica de la Meditación Budista (Shikan)

 


La Meditación Shikan, que significa literalmente "Detenerse y Contemplar" (Shi = Calma, y Kan = Contemplación), es la vía regia hacia la Comunión con el Buda Eterno, tal como fue revelada por el Gran Maestro Chih-i, el Restaurador del Verdadero Budismo en China. 

Detengámonos un instante, y preguntémonos: ¿no anhelas, en lo más profundo, un remanso donde reposar de los afanes? ¿No susurra nuestro corazón, incluso en medio de las voces y los deberes del mundo, un clamor silencioso por algo que no cambia, que no muere, que no se pierde? Ese clamor es el eco de nuestra Naturaleza Búdica, que, como el loto enterrado en el fango, ansía desplegar sus pétalos hacia la Luz de la Verdad; y el puente hacia ese Despertar no es otro que la Meditación.

La Meditación Shikan nos enseña a abandonar la corriente incesante de pensamientos que nos arrastra, y a volver a la Fuente, al espacio vasto y puro donde el Buda habita en nosotros. Detenerse (shi) es como aquietar un lago para que, en su superficie calma, el Sol de la Sabiduría pueda reflejarse sin distorsión. Contemplar (kan) es mirar sin velos, sin juicios, sin deseo de manipular, la Verdadera Naturaleza de la Realidad tal como es: impermanente, interdependiente, vacía y a la vez colmada de la Presencia del Buda. Aquel que se sienta, aunque sea un momento cada día, en silencio consciente, se sienta en el mismo trono que los Budas ocuparon: el trono silencioso del corazón.

La verdadera Meditación Budista no es una mera técnica de quietud mental, ni una práctica vacía de introspección fría; es el acto sagrado por el cual el ser, encadenado al Samsara, se detiene (Shi) en su marea de pensamientos ilusorios, y contempla (Kan) la Verdadera Naturaleza de Todas las Cosas: su Naturaleza Búdica, su transitoriedad, y su unidad esencial con el Buda Eterno.

Dentro de la Escuela del Loto Reformada, la Medotación Shikan se entiende como la Meditación del Vehículo Único (Ekayana - Ichijo), la coronación espiritual del ser humano, donde la práctica no es huida del mundo, sino transformación del mundo en el Reino del Buda, el Samsara en el Nirvana.

Beneficios Mundanos de la Meditación Shikan

1. Calma Profunda de la Mente y del Cuerpo - Quien se entrega a la práctica de la Meditación Shikan halla que la mente, como un lago agitado por el viento, poco a poco se serena. Las emociones perturbadoras —ira, deseo, ansiedad— pierden su fuerza y el cuerpo, reflejo de la mente, también encuentra reposo, salud, vigor y armonía.

2. Claridad en la Toma de Decisiones - La mente que ha aprendido a detenerse y contemplar no se precipita ni se confunde fácilmente. Al enfrentar los dilemas de la vida, la sabiduría natural florece, permitiendo decisiones acertadas, justas y benéficas tanto para uno mismo como para los demás.

3. Disolución del Estrés y de las Perturbaciones Emocionales - El estrés, hijo de la ignorancia y de la dispersión, se desvanece como neblina bajo el sol cuando el practicante de la Meditación Shikan aprende a morar en la Presencia del Buda Eterno: en la respiración consciente, en el instante presente, en la contemplación de la Unidad del todo.

4. Fortalecimiento de las Relaciones Humanas - Una mente que sabe detenerse antes de reaccionar impulsivamente, que sabe contemplar al otro con mirada compasiva, genera relaciones basadas en la empatía, el respeto y la verdadera comunicación, trayendo paz al hogar, al trabajo y a la sociedad.

5. Eficiencia y Creatividad en la Vida Laboral - Quien domina el arte de la Meditación Shikan encuentra que su mente se vuelve como un cielo limpio: capaz de pensar con originalidad, de resolver problemas con ingenio y serenidad, y de perseverar en sus empeños con una energía libre de agitación y dispersión.

Beneficios Espirituales de la Meditación Shikan

1. Despertar del Corazón del Dharma - La contemplación profunda lleva al alma a vislumbrar que no existe separación entre el yo y el Dharma, entre el ser y el Buda. La vida entera es vista entonces como un solo canto del Buda Eterno, vibrando en cada hoja, en cada estrella, en cada aliento.

2. Realización de la Triple Verdad - La práctica de la Meditación Shikan conduce a la comprensión viva de la Triple Verdad: que todos los fenómenos son vacíos (ku), temporales (ke), y ambos en unidad (chu). Esta sabiduría no es meramente intelectual: es un perfume que impregna toda la existencia, llevando al equilibrio perfecto, al Camino Medio.

3. Fusión de la Mente Individual con la Mente del Buda - A través de la detención y contemplación, el practicante experimenta que su mente ya no es suya: se ha vuelto receptáculo de la Sabiduría y Compasión del Buda. Su vida se convierte, sin esfuerzo consciente, en una irradiación del Dharma.

4. Purificación Kármica - La mente quieta y contemplativa no siembra nuevas semillas de ignorancia ni de aflicción. Al contrario, por su pureza creciente, va disolviendo el karma negativo del pasado, liberando al ser de las cadenas invisibles que atan el renacimiento doloroso.

5. Acceso Natural al Samadhi de la Eternidad - Finalmente, a medida que la Meditación Shikan se profundiza, el practicante entra en estados de absorción espiritual donde experimenta la Eternidad, la Bienaventuranza, el Verdadero Ser, y la Pureza de nuestra Naturaleza Búdica, permitiéndonos comulgar con el Espíritu del Buda Eterno que mora en nosotros y ser uno con el Universo, tal como el Sutra del Loto proclama como las marcas reales del Nirvana.

Por todo esto, la Meditación Shikan no es un fin en sí mismo. No es una técnica para escapar del mundo, ni un privilegio de santos, sino que es la apertura del alma al latido del Buda, la disolución de la gota en el océano, el Despertar del loto en medio de las aguas turbias. Practicar la Meditación Shikan es participar en el Plan de Salvación del Buda Eterno:

  • Es preparar en nosotros el terreno para la manifestación del Reino del Buda sobre la Tierra.
  • Es transformar cada instante, cada gesto, cada pensamiento, en una chispa de la Luz que nunca se extingue.

Por ello, la Meditación Shikan nos enseña a vivir no desde la avidez o el rechazo, sino desde la Detención serena y la Contemplación amorosa. Así, nuestra vida misma se vuelve meditación en acción, compasión en movimiento, sabiduría encarnada. Así pues, si deseas hallar paz, cultiva la Meditación Shikan. i deseas encontrar la verdad, cultiva la Meditación Shikan. Si deseas iluminar tu vida y las de los demás, cultiva la Meditación Shikan.Y verás que, sin buscarlo, te convertirás en una flor de loto abierta hacia el Sol del Buda Eterno.

Cada uno de nosotros, justo donde estemos, puede construir un santuario interior. Bastan unos minutos de fe viva, de recogimiento sincero, para sembrar las Semillas de la Iluminación que, con el tiempo, romperán las piedras del Samsara y brotarán hacia el cielo puro del Despertar. La Meditación no pide riquezas, ni talento, ni linaje; pide solo un corazón que quiera retornar, aunque sea tambaleante, aunque sea torpe, a su Verdadero Hogar.

Quien cultiva la Meditación se vuelve como un árbol enraizado profundamente: los vientos de la adversidad no lo derriban; las lluvias de la tristeza no lo pudren. La mente que se ejercita en detenerse y contemplar adquiere una claridad como el diamante: ve el origen de sus emociones, disuelve el veneno de la ira, reconoce las trampas del deseo, y actúa en el mundo no desde la compulsión, sino desde la sabiduría compasiva. En el fragor de la vida moderna, donde las voces y las imágenes nos bombardean sin cesar, la práctica de sentarse, respirar y simplemente ser, se convierte en un acto de profunda resistencia espiritual: una afirmación de que somos más que consumidores, más que engranajes en la máquina de la avidez, más que cuerpos efímeros buscando placer.

La Meditación abre la puerta del Santuario Interno, donde mora silencioso el Buda Eterno. Y en ese encuentro —más allá de palabras, más allá de formas— se revela que nunca estuvimos separados de Él, que nuestra vida entera ha sido siempre una danza en su Luz. Cada sesión de Meditación, por humilde que sea, es un paso hacia la Unión; es una gota que regresa al océano; es una chispa que se funde en el fuego primordial de la Sabiduría.

Por ello, no nos desanimemos si al principio la mente parece un caballo salvaje, si el cuerpo se inquieta, si los pensamientos se agolpan. Es importante persistir (por eso el Esfuerzo es una Virtud Budista o Paramita), con ternura, como quien riega una semilla invisible. No luchemos contra los pensamientos: simplemente dejémoslos pasar como nubes, y volvamos una y otra vez al sencillo acto de estar presentes, atentos, vivos. Recordemos: no es perfección lo que se pide, sino sinceridad; no es ausencia de pensamiento lo que define la meditación, sino la voluntad de ver a través de los pensamientos. Y así, paso a paso, día tras día, la Meditación Shikan transformará nuestra vida: la agitación cederá a la paz, la ignorancia dará paso a la claridad, y el miedo será transmutado en confianza serena. No es fantasía: es promesa del mismo Buda, quien en el Sutra del Loto declara que todos los seres poseen la capacidad de alcanzar el Supremo Camino, si perseveran con fe y diligencia.

ESto nos llama a hacer de la Meditación nuestro refugio diario. No dejemos pasar un solo día sin sentarnos, aunque sea brevemente, bajo el Árbol Interior del Despertar. No importa cuán mundano sea nuestro entorno: en medio del ruido, creemos un instante de silencio; en medio del torbellino, hagamos  un espacio para la calma; en medio del olvido, recordemos quiénes somos. Así, nuestra vida se tornará en un continuo acto de Iluminación; así, transformarémos no sólo nuestra mente, sino también este mundo, en el Reino Viviente del Buda.

Que la Luz del Buda Eterno guíe nuestro corazón; que el Loto de la Sabiduría florezca en nuestro pecho; que la práctica de la Meditación nos lleve, dulcemente, irrevocablemente, al Hogar que jamás se perdió - el Nirvana.

Ascendiendo en Nuestro Camino del Bodhisattva: El Sutra de los Diez Bhumis - Segundo Estado - Inmaculado

 


El Sutra de los Diez Bhumis o Estados del Bodhisattva

Segundo Bhumi - Inmaculado

El Bodhisattva Vajragarbha dijo: "¡Oh, Hijos del Buda! Cuando el bodhisattva ha dominado perfectamente el Primer Bhumi , aspira al Segundo Bhumi. Hay diez tipos de pensamiento que surgen en su mente. ¿Cuáles son estos diez? Son: (1) pensamiento directo,  (2) pensamiento sereno, (3) pensamiento capaz, (4) pensamiento domesticado, (5) pensamiento pacífico, (6) pensamiento virtuoso, (7) pensamiento distintivo, (8) pensamiento independiente, (9) pensamiento sublime, y (10) pensamiento exaltado. 

"Esos son los diez tipos de pensamiento que surgen. A través de ellos, alcanzará la Inmaculada Concepción , el Segundo Bhumi.

"¡Oh, Hijos del Buda! El Bodhisattva que se encuentra en el Bhumi  Inmaculado poseerá naturalmente el camino de las Diez Buenas Acciones. ¿Cuáles son estas diez?

"1. Él no mata: abandona los garrotes, abandona las espadas, abandona la venganza, siente vergüenza y es compasivo, y hacia todos los seres vivos tiene una mente amorosa y desea brindarles beneficio y felicidad. Ni siquiera piensa en dañar a los seres, y mucho menos en causar daño físico conscientemente a otros seres, sabiendo que son seres.

"2. Tampoco toma lo que no le es dado: se contenta con lo suyo y no desea lo ajeno. Percibe que lo ajeno es propiedad ajena y comprende claramente lo que es robar. No toma ni una brizna de hierba ni una hoja que no le es dada, y mucho menos aquello que sustenta la vida.

"3. Tampoco practica la mala conducta sexual: se conforma con su propia esposa y no desea la esposa de otro. Ni siquiera siente deseo por las mujeres ajenas, por las esposas de otros, ni por aquellas prohibidas por la familia, los signos o el Dharma, y mucho menos tiene relaciones sexuales con ellas.

"4. Tampoco miente: dice la verdad, dice lo ocurrido, habla en el momento oportuno, habla en la medida justa y cumple lo que promete. Ni siquiera miente en sueños, y mucho menos a propósito.

"5. Tampoco calumnia: no causa división ni irritación entre las personas, ni repite a una persona lo que ha oído de otra, ni luego repite lo que esta le dice a la otra. No separa a quienes están en armonía. No fomenta el conflicto. No disfruta de la discordia ni se deleita en ella. No pronuncia palabras que creen discordia, sean ciertas o no.

"6. Tampoco pronuncia palabras ásperas: Su habla no es perturbadora, abusiva, áspera, hiriente, hiriente, crítica, acusadora, baja, vil, despreciable, desagradable, llena de ira o rabia, causa de angustia, desagradable o destructiva para su propia mente y la de los demás. Pronuncia palabras que son suaves, agradables, placenteras, encantadoras, favorables, encantadoras, respetables, valiosas, claras, comprensibles, dignas de ser escuchadas, confiables, agradables a muchos, agradables a muchas personas y alabadas por los sabios; palabras que traen beneficio y felicidad a todos los seres, hacen feliz la mente, le brindan satisfacción mental, calman su propia mente y la de los demás, y eliminan el deseo, la ira, la ignorancia y todos los kleśas.

"7. También ha abandonado la charla ociosa: responde con precisión, habla en el momento oportuno, con sinceridad, con significado, habla del Dharma, con lógica, con control, con justificación y presta atención al momento. Incluso evita contar historias que no deben contarse, y mucho menos distraer.

"8. Tampoco es codicioso: no codicia la riqueza, los placeres, los utensilios ni las propiedades de otros. No los desea, ni los espera, ni los anhela, pensando: «Que lo suyo sea mío». 

"9. Tampoco alberga malicia: hacia todos los seres, su mente alberga amor, altruismo, bondad, felicidad, gentileza, el deseo de beneficiar al mundo entero y el deseo de beneficiar compasivamente a todos los seres. Carece de ira, enemistad, dureza de corazón, malevolencia, rabia, etc. Sus meditaciones y análisis son beneficiosos, amorosos y traen beneficio y felicidad a los seres.

"10. Posee la visión verdadera: sigue el camino correcto, que es maravilloso, afortunado y libre de malas ideas. Posee visiones correctas, es libre de engaños y de duplicidad, y tiene certeza en el Buda, el Dharma y la Sangha.

"Él siempre mantiene continuamente este camino de las Diez Buenas Acciones. Tiene estos pensamientos en su mente: 'Toda la caída de los seres en las existencias inferiores, los reinos inferiores, se debe a la adopción del camino de las diez malas acciones . ¡Oh! Mantendré una conducta correcta, haré que otros la mantengan y les enseñaré a otros la conducta correcta. ¿Qué lo impediría? Si mantengo una conducta incorrecta, no tendré posibilidad de establecer una conducta correcta en otros'.

"Él contempla de esta manera: 'Seguir estos caminos de las Diez Malas Acciones hace que los seres renazcan en los infiernos, como animales y en el reino de Yama. Seguir los caminos de las Diez Buenas Acciones hace que los seres renazcan como humanos y así sucesivamente, hasta la más alta de las existencias.

"'Más elevado que eso, aquellos que siguen el camino de las Diez Muenas Acciones pero con una motivación limitada y con una mente aterrorizada de los Tres Reinos no tienen gran compasión, y meditan en la sabiduría obtenida al seguir lo que han escuchado de otros que están practicando el Shravakayana.

"'Más elevado que eso, aquellos que no dependen de los demás, alcanzan la Iluminación por sí mismos, no tienen gran compasión ni método, y obtienen la realización mediante la comprensión del Origen Dependiente profundo, están practicando el Pratyekabuddhayana.

"'Más alto que eso, aquellos que tienen una motivación vasta e inconmensurable, gran bondad y compasión, poseen métodos hábiles, hacen grandes oraciones, no abandonan a todos los seres, tienen la meta de la vasta sabiduría de la Budeidad y purifican a los Bhumis están practicando la conducta vasta y pura de las Perfecciones.

"Más aún, quienes se purifican de la manera suprema en el camino de las Diez Buenas Acciones alcanzarán el poder de las Diez Fuerzas y las Cuatro Confianzas, y alcanzarán las cualidades supremas de la budeidad. Por lo tanto, me dedicaré a lograr la purificación suprema en la práctica de las Diez Buenas Acciones'.

"Él enseña así: 'Seguir, profundizar y practicar en gran medida estos caminos de las Diez Malas Acciones es la causa del renacimiento en los infiernos. Seguir, profundizar y practicar en una cantidad media de estos caminos es la causa del renacimiento como animal. Realizar la menor cantidad posible es la causa del renacimiento en el reino de Yama. 

"'Al matar, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama. Incluso si nacen como humanos, ese karma tendrá dos consecuencias: una vida corta y muchas enfermedades.

"'Al tomar lo que no se les ha dado, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama . Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: poca riqueza y que otros la usen.

"'Por la mala conducta sexual, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama . Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: una esposa pendenciera y sirvientes problemáticos.

"'Por mentir, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama. Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: mucha denigración y ser engañados por otros.

"'A través de la calumnia, los seres serán llevados al infierno, serán llevados a renacer como animales, serán llevados al reino de Yama.  Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: conflicto entre sirvientes y malos sirvientes.

"'Por las palabras ásperas, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama. Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: escuchar palabras desagradables y palabras pendencieras.

"'Por palabras vanas, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama. Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: palabras innobles y falta de elocuencia.

"'Por la avaricia, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama. Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: insatisfacción y un gran deseo.

"'Por malicia, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama. Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: buscar oportunidades para hacer daño y ser atormentados por otros.

"'Por creencias erróneas, los seres serán llevados al infierno, renacerán como animales y serán conducidos al reino de Yama . Incluso si nacen como humanos, habrá dos resultados de ese karma: caer en malas creencias y ser engañosos.

"'Por lo tanto, como estos caminos de las malas acciones acumulan una masa inconmensurable de sufrimiento, rechazaré estos caminos de las Diez Malas Acciones y permaneceré feliz disfrutando de las delicias del placer del Dharma. Rechazaré estos caminos de las Diez Malas Acciones y permaneceré en los caminos de las Diez Buenas Acciones y atraeré a otros hacia ellos.

"'Hacia esos seres primero desarrollaré una motivación para beneficiarlos, para traerles felicidad, amor, compasión y bondad, para cuidarlos, para protegerlos, para ser su maestro y para ser su instructor.'

"También piensa: '¡Ay! Estos seres que han caído en visiones malignas tienen una comprensión aberrante, una motivación aberrante y se mueven por la oscuridad de un camino maligno. Por lo tanto, los guiaré al camino de la verdad, al camino de la visión correcta, a la verdadera naturaleza tal como es.¡Oh! Estos seres están en conflicto, riñen y pelean, y arden continuamente de ira y enemistad. Por eso, los conduciré a la realización del amor supremo.¡Ay! Estos seres están insatisfechos y anhelan la riqueza ajena, y se dedican incansablemente a ganarse la vida. Por lo tanto, les daré la vida mediante la pureza de cuerpo, palabra y mente. ¡Ay! Estos seres tienen deseo, ira e ignorancia, que son las causas de la existencia, y arden continuamente en las llamas de los diversos kleśas, pero no buscan el método que los libere de ello. Por lo tanto, los conduciré a la cesación de todos los kleśas,  a la liberación del daño, al Nirvana. ¡Ay! Estos seres están envueltos en la Oscuridad de la Ignorancia, la pérdida de la visión y la ceguera de la ignorancia; la luz de la sabiduría está lejos, y trabajan en el vasto desierto del samsara , llevando a cabo acciones en el vasto desierto de las malas visiones. Por lo tanto, haré todo lo posible para purificar sus ojos de sabiduría de las obstrucciones, para que obtengan una comprensión clara, independiente de otros, de la Verdadera Naturaleza de Todos los Fenómenos. ¡Ay! Estos seres realizan acciones en el vasto desierto y páramo del samsara y miran hacia el abismo de los infiernos, el renacimiento como animales y el reino de Yama. Están atrapados en la red interminable de las opiniones erróneas, están envueltos en la Oscuridad de la Ignorancia, se han extraviado en el camino incorrecto, están ciegos y sin la guía de la virtud, ven como salvación lo que no lo es, están atados en la soga de Mara, están atrapados por el bandido de las percepciones, están hundidos en la oscuridad de la motivación de Mara, y la motivación de la Budeidad está muy lejos. Por lo tanto, me convertiré en su protector en ese samsara , los guiaré a través de ese desierto que es difícil de cruzar y los llevaré a la ciudad de la omnisciencia, que está libre de miedo y libre de daño.

"'¡Ay! Estos seres se están ahogando en un gran río, habiendo entrado en el río del deseo, la ignorancia, la existencia y las visiones; atrapados en la corriente del Samsara, arrastrados por el río de la existencia, sacudidos por sus grandes olas y dominados por el poder del deseo y la ansia, carecen del poder de la contemplación y se entregan al deseo, la malicia, la violencia y muchos pensamientos, y están atrapados por el monstruo del río de la visión de un yo, atrapados en el remolino de la oscuridad de los placeres, hundidos en el pantano del anhelo de placeres, perdidos en el árido yermo del gran egoísmo, sin apoyo, incapaces de escapar de la ciudad de las percepciones sensoriales y sin la liberación de las buenas acciones. Por lo tanto, los liberaré mediante el poder de la gran compasión y la fuerza de las buenas acciones, y los llevaré a la preciosa isla de la omnisciencia, que está libre de daño, libre de suciedad, pacífica, feliz y sin miedo. ¡Ay! Estos seres están atormentados por los numerosos sufrimientos e infelicidades de los tres reinos; están atados al deseo y la ira, al placer y la tristeza; gimen en la miseria; están atados a las cadenas del anhelo, envueltos en la Oscuridad de la Ignorancia y en conflicto entre sí. Por lo tanto, los conduciré a todos al nirvana sin oscurecimiento, que es distinto de los Tres Reinos.  ¡Ay! Estos seres, aferrados a la creencia en sí mismos y en la propiedad, no abandonan la morada de los skandhas ; se adentran en los cuatro conceptos erróneos, viven en la ciudad vacía de las seis bases sensoriales , sufren heridas de las serpientes de los cuatro grandes elementos, son atacados por los asesinos y bandidos de los skandhas, y experimentan un sufrimiento inconmensurable. Por lo tanto, los conduciré a la felicidad sublime, libre de toda morada: el Nirvana de la omnisciencia despejada. ¡Ay! Estos seres aspiran a lo inferior, lo débil y lo incapaz. Aunque del Mahayana surge la mente sublime e irreversible de la sabiduría omnisciente, poseen mentalidades de Shravaka y Pratyekabuddha. Por lo tanto, los conduciré al insuperable Mahayana, que posee la inmensa motivación y la vasta realización de la Budeidad, enseñándoles la sabiduría omnisciente'.

"¡Oh, Hijos del Buda! El Bodhisattva que posee el poder y la fuerza de la conducta correcta, que es hábil en el logro de la compasión y el amor, es un buen amigo que no está bajo el control de todos los seres, que no abandona a todos los seres, que es hábil en saber qué se debe y qué no se debe hacer. Aquel que está en el Bhumi Inmaculado, debido a su vasta visión y al poder de sus oraciones, muchos budas se le aparecerán. Debido a su vasta visión y al poder de sus oraciones, muchos cientos de Budas, muchos miles de Budas, muchos cientos de miles de budas, muchos millones de Budas, muchas decenas de millones de Budas, muchos billones de Budas, muchas decenas de billones de Budas, muchos billones de Budas y muchos trillones de Budas se le aparecerán. Verá a esos Budas, a esos Arhats, esos Samyaksambuddhas, y con gran motivación los servirá, los venerará, los honrará, les hará ofrendas y les proporcionará túnicas, limosnas, cuencos, camas, medicinas para cuando estén enfermos e instrumentos. También ofrecerá todos los artículos que traen felicidad a un Bodhisattva. También hará ofrendas a las asambleas de la Sangha. Dedicará todas esas raíces de bondad a la Iluminación Suprema y Completa.

"Él también recibe respetuosamente de esos Budas estos caminos de las Diez Buenas Acciones, y tras recibirlos, no los abandona ni los desperdicia. Durante muchos eones, durante muchos cientos de eones, muchos miles de eones, muchos cientos de miles de eones, muchos millones de eones, muchas decenas de millones de eones, muchos billones de eones, muchas decenas de billones de eones, muchos billones de eones y muchos trillones de eones, permanece practicando la generosidad y la conducta pura, sin la culpa de la avaricia ni la mancha de la mala conducta. 

"¡Oh, Hijos del Buda! Es así: por analogía, si se introduce oro en vitriolo verde, se eliminan todas sus impurezas. De la misma manera, el Bodhisattva del Bhumi Inmaculado, durante muchos eones y así sucesivamente, hasta muchos trillones de eones, permanece practicando la Generosidad y la Conducta Pura, sin la culpa de la avaricia ni la mancha de la mala conducta. De los cuatro métodos para atraer seres, practica principalmente las palabras amables. De las Diez Perfecciones , predomina la perfección de la buena conducta, y las demás perfecciones no se alcanzan por completo.

"¡Oh, Hijos del Buda! Esta fue una breve enseñanza del Bhumi llamado Inmaculado, que es el segundo Bodhisattva Bhumi. El Bodhisattva que se encuentra en ese Bhumi se convierte predominantemente en un rey cakravartin con poder sobre los cuatro continentes. Mediante el Dharma, alcanza la soberanía y se le otorgan las siete posesiones preciosas . Es hábil y tiene la capacidad de eliminar la falta de avaricia y la mancha de la mala conducta en todos los seres. Es muy hábil para guiar a los seres hacia el sendero de las Diez Buenas Acciones. Él no se cansa de lograr una gran generosidad, y en cualquier raíz de bondad que practique a través de palabras amables, acciones que beneficien a los demás y practicando lo que predica, entre todos los seres se vuelve supremo, el mejor, el principal, el más alto, el más excelente, el insuperable, el guía, el líder, el comandante, y así sucesivamente, hasta convertirse en el omnisciente en quien se confía. Su mente siempre está enfocada en el Buda, enfocada en el Dharma, enfocada en el Sangha, enfocada en los Bodhisattvas, enfocada en la conducta del Bodhisattva, enfocada en los Bodhisattvas Bhumis, enfocada en las Perfecciones, enfocada en las fortalezas, enfocada en las confianzas, enfocada en las cualidades únicas de la Budeidad, y así sucesivamente, hasta estar enfocado en la sabiduría omnisciente dotada de los aspectos supremos.

"Si lo desea, puede dedicarse de tal manera que en un solo instante pueda abandonar a toda su familia, esposa y posesiones, y sea ordenado en la enseñanza del Tathagata. Habiendo sido ordenado, en un solo instante alcanza y descansa en mil Samadhis, ve mil Budas y conoce sus bendiciones, hace temblar mil mundos, va a mil reinos del Buda, ilumina mil mundos, madura mil seres, permanece durante mil eones, entra en mil eones previos y mil eones futuros, abre mil puertas del Dharma, manifiesta mil cuerpos, y manifiesta cada cuerpo con un séquito de mil Bodhisattvas. A partir de este momento, los bodhisattvas que tienen el poder de la oración a través de oraciones particulares manifiestan cuerpos, luz, milagros, visiones, actividades, voces, conducta, exhibiciones, bendiciones, transformaciones y manifestaciones durante muchos eones, durante muchos cientos de eones, muchos miles de eones, muchos cientos de miles de eones, y así sucesivamente, hasta muchos quintillones de eones, que son difíciles de enumerar".

Entonces el Bodhisattva Vajragarbha, para enseñar el significado de este Bhumi y analizarlo, recitó estos versos:

"Tienen mentes serenas, directas y capaces.
Están dotados de pensamientos virtuosos y pensamientos domesticados.
Son independientes y tienen una comprensión sublime:
Estos sabios con pensamientos exaltados ascienden al Segundo Bhumi .


"Permaneciendo en ese Bhumi, tienen cualidades y virtudes.
No están motivados a hacer daño, han abandonado el matar,
Han dejado de tomar lo que no se les da y han abandonado a las esposas de otros,
Son veraces y no calumnian ni hablan con dureza.

"Están libres de codiciar las posesiones de los demás y tienen mentes amorosas.
Siguen el camino correcto y no engañan.
No tienen engaño ni oscuridad sino que son confiables.
Mantienen la conducta de un maestro y son siempre cuidadosos.

"Todos los sufrimientos en los infiernos y entre los animales,
Los cuerpos que arden continuamente en el dominio de Yama‍—
Todas surgen del pecado; son creadas por malas acciones.
Por tanto, abandónalos y obtén el verdadero Dharma.

"Un nacimiento deseable como ser humano
Hasta la dicha de las deidades dhyāna en la cima de la existencia,
Y el Pratyekabuddhayana y el Shravakayana ‍—
Todos son creados por los diez caminos de la bondad.

"Sabiendo esto, los sabios siempre son cuidadosos.
Mantienen una buena conducta y ésta llega a ser perfecta.
Más que antes tienen pensamientos de compasión,
Y al ver el sufrimiento de los seres desarrollan la bondad.

"¡Ay! Los que tienen mentes infantiles caen en malas opiniones,
Tienen mentes de ira y enemistad y se involucran en conflictos,
Y nunca están satisfechos y siempre anhelan objetos de deseo:
Liberaré a estos seres que tienen tres causas.

"Están envueltos en la gran oscuridad de la ignorancia,
Han caído en la trampa de las vistas en el camino a través del desierto,
Y son continuamente dañados por enemigos en la jaula del Samsara:
Los liberaré de los bandidos de Mara.

"Se ahogan en los cuatro grandes ríos, sacudidos por las olas de los kleśas;
Están atormentados por los cientos de sufrimientos en los tres reinos;
Y viven en la morada de los skandhas y los perciben como un yo:
Me dedicaré a liberarlos del sufrimiento.

"Han rechazado la maravillosa y sublime sabiduría del Buda.
Y por lo tanto han desarrollado una comprensión inferior.
Los estableceré en la sabiduría inmaculada del Tathagata.
Los sabios tienen una diligencia incomparable por el bien de la sabiduría del Buda.

"En este Bhumi los grandes sabios acumulan cien cualidades.
Ven muchos Budas y les hacen ofrendas.
Se purifican a través de esas buenas acciones durante diez millones de eones,
Como el mejor oro que se coloca en vitriolo verde.

"Los Hijos del Buda en este Bhumi se convierten en reyes cakravartin
Quien conduce a los seres hacia las Diez Buenas Acciones.
Acumulan todo tipo de buenas acciones.
A través de las diez fuerzas se convierten en protectores de los seres.

"Si quieren, renuncian al reino.
Aquellos estables toman la ordenación en la enseñanza suprema.
Con diligencia alcanzan Samadhis supremos y sublimes,
Y en un instante ven mil Budas.

"De esa manera habrá ese número o muchos más.
Los grandes líderes enseñan mientras permanecen en este Bhumi .
Tienen la oración suprema por la sabiduría que es más elevada,
Y guían a los seres a través de muchas formas de emanaciones".

De esa manera a los Bodhisattvas
Se les enseñó el Segundo Bhumi perfecto.
Ése fue el Segundo Bodhisattva Bhumi, que se llama Inmaculado.

Habiendo escuchado esas palabras sobre la conducta del Bhumi perfecto,
El inconcebible campo de actividad del Bodhisattva,
Los Hijos del Buda estaban llenos de alegría y respeto,
Y esparcieron flores sobre el Bodhisattva, diciendo:

"¡Excelente! ¡Excelente! Tú que eres como una montaña,
Con una motivación de compasión por todos los seres.
Has enseñado el campo de actividad del sublime y perfecto Bhumi.
Y la conducta correcta y los votos de los sabios.

"Lo que has enseñado es verdad, inequívoco y nada más.
Es la hermosa conducta de los Bodhisattvas.
Deseando traer beneficio y felicidad a todos los seres.
Has enseñado esta Iluminación Suprema.

"Ahora los devas y los humanos todavía están haciendo ofrendas.
Tú que eres experto en describir correctamente la sabiduría del Dharma,
Describe el Tercer Bhumi sublime
De acuerdo a la naturaleza de su actividad.

"La práctica de la generosidad de los grandes sabios,
Su paciencia, diligencia, paz, sabiduría, métodos,
Amor supremo y camino de compasión.
Enséñanos ese entrenamiento en la práctica de los Hijos del Buda".

Entonces Vimukticandra le dijo
Al sabio Vajragarbha,
"Sabio, enseña la motivación
Eso provoca el ascenso al Tercer Bhumi".

El Bodhisattva Mahasattva Vajragarbha dijo: "¡Oh, Hijos del Buda! De esa manera, al purificar su motivación superior en el Segundo Bhumi, asciende al Tercer Bhumi. Asciende a través de diez tipos de enfoque en la orientación de su mente. ¿Cuáles son esos diez? Son (1) centrarse en la orientación de una mente pura, (2) centrarse en la orientación de una mente estable, (3) centrarse en la orientación de una mente desencantada, (4) centrarse en la orientación de una mente sin deseo, (5) centrarse en la orientación de una mente irreversible, (6) centrarse en la orientación de una mente resuelta, (7) centrarse en la orientación de una mente refinada, (8) centrarse en la orientación de una mente insaciable, (9) centrarse en la orientación de una mente sublime y (10) centrarse en la orientación de una mente exaltada."

Existe Tal Cosa como el Exceso de Compasión, y la Mayoría de los Budistas Occidentales están Enfermos de Ello - Un Llamado al Camino Medio

 


Rara la vez toco temas contemporáneos en este espacio, y cuando lo hago, es para tratar de contrabalancear y corregir un error. En la vasta red de la vida, tejida con los hilos invisibles de causa y efecto, de karma y retribución, el Buda nos enseñó que la Compasión y la Sabiduría son como las dos alas de un gran pájaro: solo juntas pueden elevar al ser hacia el Nirvana. Cuando una de ellas se hipertrofia en detrimento de la otra, el vuelo se torna errático, el descenso en el abismo es inevitable. Es por ese abismo que el Budismo Occidental está cayendo. Permítanme comenzar con un poco de historia...

Durante el tiempo del Buda, en su Orden Monástica o Sangha, se encontraba el peor enemigo del Dharma, su primo y discípulo Devadatta, quien, cegado por la ambición y la sombra de su propio corazón, buscó desplazar al Buda (y al Verdadero Dharma) y asumir el liderazgo de la Sangha. No fue con espada ni con fuego que intentó su usurpación, sino —más sutil y, por ello, más peligrosa— con propuestas que, bajo la apariencia de ascetismo severo, pretendían seducir a los monjes con el señuelo del orgullo espiritual y la dureza vana. Estas cinco propuestas fueron presentadas a la asamblea monástica, pero el Buda, en Su infinita compasión y sabiduría, las rechazó, señalándolas como desviaciones del Verdadero Dharma y del Camino Medio, el sendero equilibrado que conduce a la liberación.

Las cinco propuestas de Devadatta fueron:

1. Que los monjes vivieran exclusivamente en el bosque, sin aceptar residencias construidas o preparadas en aldeas o ciudades - Devadatta sugería que la vida en el bosque era inherentemente superior, despreciando los beneficios de establecer monasterios cerca de las comunidades, donde los monjes pudieran guiar y nutrir a los laicos.

2. Que los monjes se alimentaran únicamente de lo que recibieran en su ronda de limosnas, sin aceptar invitaciones personales para comer en casas específicas - Devadatta pretendía así imponer una rigidez innecesaria, cortando los lazos de gratitud y enseñanza que surgían de compartir una comida con los devotos.

3. Que los monjes vistieran solamente harapos encontrados en basureros, rechazando toda ropa ofrecida por los laicos - Así buscaba imponer una austeridad artificial, despreciando el acto meritorio de los laicos que ofrecían túnicas con fe y devoción.

4. Que los monjes vivieran al pie de los árboles todo el año, sin aceptar construcciones adecuadas ni siquiera durante las estaciones lluviosas - Esto contradecía la práctica establecida de los vassa (retiros de lluvias), en los cuales los monjes se establecían en un lugar para profundizar en la meditación y la enseñanza.

5. Que los monjes no consumieran pescado ni carne bajo ninguna circunstancia - Aunque el Buda enseñó moderación y gratitud en el consumo de alimentos (aceptando lo que se ofrecía sin elegir ni rechazar por aversión o preferencia), Devadatta quería imponer una regla absoluta, contraria al espíritu de la ofrenda desinteresada.

Estas propuestas, aunque aparentemente virtuosas a ojos inexpertos, nacían de un corazón intoxicado por la Ignorancia y el deseo de dominio, no de la genuina aspiración por el Dharma. Por ello, el Buda, espejo perfecto del Camino Medio, las rehusó, enseñándonos que la Iluminación no se alcanza por extremos de mortificación ni de indulgencia, sino por la senda serena de la sabiduría compasiva.

Así está registrado en el Vinaya Pitaka, especialmente en los relatos del Cullavagga (VII.3), donde la memoria de estos eventos ha sido preservada para advertirnos contra el peligro de desviarnos por orgullo bajo la apariencia de virtud.

Así como en tiempos antiguos Devadatta propuso el extremo de la mortificación, queriendo aparecer más puro que el Buda, así hoy, en este crepúsculo de la fe verdadera, muchos "budistas" —con la mejor de las intenciones, pero con la peor de las comprensiones— han caído en el extremo opuesto: un exceso de compasión sentimental, ciega, privada de la luminosa lámpara de la Sabiduría.

Este error moderno, este "nuevo Devadattismo", se presenta bajo rostros atractivos: proclama amor sin discernimiento, empatía sin justicia, acogida sin verdad. Se condena al justo que protege, al guardián que defiende la paz, mientras se ensalza al delincuente, al transgresor, al que siembra el caos y la violencia. Se vitorea a los sembradores de terror —hoy bajo la máscara de víctimas perpetuas— y se lapida al que, con dolor y firmeza, sostiene los pilares de la civilización.

Pero el Verdadero Dharma, enseñado por el Buda Eterno, no puede ser así deformado sin incurrir en grave karma. La Compasión sin Sabiduría es como un médico que, por amor mal entendido, deja de aplicar la medicina amarga al enfermo, condenándolo así a la muerte que hubiera podido evitarse. La Sabiduría disierne, la Sabiduría conoce las causas y condiciones, la Sabiduría comprende que salvar una sociedad es también un acto de infinita misericordia.

En el Canon Budista leemos: "El Bodhisattva debe actuar con compasión, pero también con firmeza y discernimiento. No debe alabar a los malvados, ni proteger sus actos, pues así destruye la fe de los muchos y siembra el declive de los buenos." (Sutra de la Luz Dorada)

¿No vemos, acaso, cómo este falso Budismo Occidental confunde la misericordia con la permisividad, la tolerancia con el abandono del deber? ¿No vemos cómo, bajo pretexto de "no juzgar", se permite que los lobos (como los terroristas e ilegales) devoren a los corderos (los ciudadanos), que los delincuentes destruyan el tejido sagrado de la sociedad, que la anarquía disfrazada y llamada "Democracia" sea celebrada mientras la ley justa es vilipendiada?

Existe, en efecto, tal cosa como un exceso de Compasión,  y la mayoría de los "budistas" Occidentales están enfermos de ello: un sentimentalismo que, bajo la apariencia de amor, carece de discernimiento; un apego emocional que, por evitar el dolor inmediato, genera un sufrimiento mayor en el futuro. Es el acto de quien, viendo a un enfermo grave, se niega a aplicar el tratamiento necesario porque es doloroso, condenándolo sin saberlo a una muerte segura. Es el acto de quien, por "compasión", permite que el infractor continúe dañando a otros, en lugar de corregirlo y detenerlo.

El Buda enseñó no solo la Compasión, sino la unión inseparable de Compasión y Sabiduría. En el Sutra del Loto, se dice que el Buda actúa con "grand compasión y grand habilidad", es decir, su amor por los seres está siempre iluminado por una profunda comprensión de las causas y condiciones que los rigen. No se deja llevar por las apariencias inmediatas, sino que mira al beneficio último, al Despertar de todos los seres. Por ello, el Verdadero Camino Medio, la senda gloriosa que evita los dos extremos —de la indulgencia y del ascetismo, de la permisividad y del rigorismo— es también el Camino de la Compasión equilibrada por la Sabiduría. Una Compasión sin Sabiduría se convierte en complicidad con el mal; una Sabiduría sin Compasión se convierte en frialdad insensible. Ambas alas deben batir juntas para que el pájaro de la Iluminación vuele hacia el Nirvana.

La Tradición Budista nos ofrece múltiples ejemplos de esta enseñanza. Asimismo, en los códigos monásticos (Vinaya), los Preceptos establecen reglas claras para corregir, e incluso expulsar, a aquellos que, persistiendo en la falta grave, ponen en peligro la pureza de la comunidad. ¿Es esto falta de amor? No, es el más alto acto de Compasión sabia: preservar el campo donde muchos pueden encontrar refugio y salvación.

En nuestro tiempo, sin embargo, asistimos a una peligrosa perversión de la Compasión. Muchos, confundidos por ideologías mundanas, se entregan a defender al delincuente, al terrorista, al transgresor, mientras acusan de maldad a quienes defienden la ley, el orden, y la protección de los inocentes. En nombre de una "compasión" mal entendida, se justifica la anarquía, se blanquea la violencia, se pisotea la justicia.

Pero el Dharma eterno no puede ser mancillado por tales ilusiones. El Buda no vino a disolver toda estructura, ni a borrar toda distinción entre bien y mal, sino a revelar la armonía profunda que se alcanza cuando el Amor y la Sabiduría caminan de la mano. Solo así se construye la Tierra Pura en medio del Samsara: cuando el corazón ama, pero los ojos ven con claridad; cuando la misericordia guía, pero la justicia sostiene.

El Buda nunca predicó el anarquismo ni la disolución de la justicia. Muy al contrario, enseñó que el Dharma debe ser sostenido en el mundo a través del orden, de la rectitud, de la defensa de los justos y de la corrección de los malvados. La Compasión no significa permitir que el asesino continúe asesinando, ni que el ladrón continúe robando, ni que el corrupto continúe corrompiendo. Significa ofrecer siempre un camino de redención, sí; pero también proteger a los inocentes, corregir al transgresor, y castigar —con firmeza serena, no con odio— cuando sea necesario para preservar el bien mayor. Así como el jardinero poda la rama enferma para salvar al árbol entero, así el verdadero discípulo del Buda sabe que a veces la acción justa es dura en apariencia, pero dulce en su raíz, pues previene males mayores.

No permitamos que nuestro corazón, ávido de amor, olvide la luminosa Espada de la Sabiduría. No dejemos que, bajo la bandera de la compasión mal entendida, seamos instrumento de la confusión, del desorden y de la ruina de los pueblos. Recuerdemos que el Reino del Buda en la Tierra se edifica no solo sobre la misericordia, sino también sobre la justicia que protege a los pequeños, a los pacíficos, a los que anhelan la vida recta.

Así como el Buda rechazó las propuestas extremistas de Devadatta, así nosotros debemos rechazar, hoy, las falsas doctrinas que enarbolan la compasión sin discernimiento, el amor sin verdad, la indulgencia sin justicia.

Afirmemos en nuestros corazones la Triple Joya, caminando por la Vía del Medio, siendo como el sabio rey descrito en el Sutra del Nirvana: protector de los justos, refugio de los oprimidos verdaderos, firme espada contra el mal que amenaza la paz de los mundos. Por ello, proponga una Guía para la Compasión Sabia:

1. La Compasión Verdadera brota de la Sabiduría que Comprende el Karma de Todos los Seres - No basta con llorar ante el dolor; es necesario comprender sus causas profundas para actuar de manera que conduzca a la liberación y no a la perpetuación del sufrimiento.

2. La Compasión Verdadera No Justifica el Mal, sino que Busca Corregirlo con Firmeza Serena - Amar a un ser no es aprobar sus faltas; es desear para él su verdadera sanación, aunque ello implique corregirlo, advertirlo o detenerlo.

3. La Compasión Verdadera Protege a los Inocentes y a los Justos, aun Cuando ello Implique Resistir y Castigar al Injusto - Proteger al indefenso es acto de amor mayor que el dejar hacer al opresor. La misericordia no es pasividad, sino acción justa.

4. La Compasión Verdadera ofrece Oportunidades de Redención, pero No Encubre Ni Perpetúa la Transgresión - Se abre siempre un camino hacia la conversión del corazón, pero no se oculta la gravedad de la falta ni se disuelve la responsabilidad.

5. La Compasión Verdadera Reconoce que la Rectitud y el Orden son Necesarias para la Paz del Mundo - No puede haber convivencia armoniosa sin reglas justas y respetadas. Amar es también sostener el orden que permite el florecimiento del bien.

6. La Compasión Verdadera Abraza al Transgresor, pero Aborrece la Transgresión - Nunca cerramos el corazón al ser humano, pero jamás confundimos el acto malo con el ser que, más allá de su error, posee una Naturaleza Búdica a la que llamamos a Despertar.

7. La Compasión Verdadera se Guía por el Camino Medio, Evitando los Extremos de la Permisividad Sentimental o del Rigorismo Inhumano - No todo lo que parece "bondad" lo es; y no toda corrección firme es "odio". El Camino Medio discierne, equilibra y actúa.

8. La Compasión Verdadera sabe que el Sufrimiento Temporal puede Ser Necesario para una Sanación Duradera - Así como el médico corta, limpia y cura aunque provoque dolor pasajero, así también el Bodhisattva actúa, pensando siempre en la salvación última del ser.

9. La Compasión Verdadera es Humilde: No Busca Aparecer Virtuosa ante el Mundo, sino Obrar Rectamente ante el Ojo del Buda Eterno - El discípulo no actúa por aplauso, ni por aceptación social, sino por fidelidad al Dharma que salva.

10. La Compasión Verdadera une el Corazón Tierno con la Mente Clara, el Amor Sin Límites con la Sabiduría Sin Ilusiones - Así como el loto surge inmaculado del barro, así nuestra Compasión debe surgir pura, fuerte y sabia, en medio de este mundo imperfecto.

Que la Compasión Sabia, como una lámpara en la noche, nos guíe hasta el puerto luminoso de la Iluminación. Que seamos como el médico compasivo que, aun sabiendo que su medicina será amarga, la administra con firmeza para sanar; samos como el rey justo que, aunque sufre al castigar, sabe que su deber es proteger a su pueblo. Que nuestro ideal sea, pues, el Gran Compasivo Sabio: el Buda Eterno, que abraza al mundo con infinita ternura, pero cuya mirada, más allá de las lágrimas, contempla la Ley de la Causalidad con perfecta ecuanimidad.

Que, balanceando siempre Compasión y Sabiduría, nosotros mismos podamos ser instrumentos de la salvación verdadera, obreros de la gran obra de transformar este mundo en el Reino del Buda. ¡Que el Buda Eterno nos ilumine y fortalezca en esta misión santa!