Bienvenido a la Tierra Pura de la Luz Serena, un recurso sobre el Verdadero Budismo (一乘佛教), y sus posteriores ramificaciones, a la luz de las Enseñanzas Perfectas y Completas (圓教). Aquí presentamos el Budismo como religión, filosofía y estilo de vida, con énfasis en la Teología Budista (Budología), aspirando a presentar el Budismo balanceadamente entre la academia (estudios budistas) y la devoción, desde el punto de vista de una escuela tradicional de Budismo japonés (Tendai-shu 天台宗) y las enseñanzas universales del Sutra del Loto (法華経).


sábado, 8 de abril de 2023

Un Solo Budismo, Dos Modalidades: Zen-Tierra Pura & Tierra Pura-Zen - Reflexiones sobre el Zen y el Budismo Tierra Pura desde la Perspectiva de la Tradición del Loto


Como vimos en la entrada anterior, solo existe un solo Budismo, el Verdadero Budismo, del cual surgieron diferentes denominaciones e interpretaciones enfocadas en partes del mismo. ¿Cómo podemos acercarnos entonces al Dharma desde el Verdadero Budismo de la Tradición del Loto?

En el pasado, para simplificar nuestro acercamiento al Buddha Dharma, he desarrollado una forma original de abordar el Dharma mencionado que el Budismo puede ser abordado de dos maneras (aunque hay otras), desde la perspectiva de la Sabiduría o de la Compasión, pero que solo la integración de ambos puede ser considerado un Budismo Completo. El Budismo de la Sabiduría se basa en el estudio, le meditación y la práctica budista, y puede considerarse un acercamiento de Poder Propio (Jiriki). "Jiriki" es el término canónico que se usa para referirnos a que somos nosotros quienes usamos nuestro esfuerzo por alcanzar el Despertar. Un ejemplo de esto es el Budismo Zen. Por otro lado, el Budismo de la Compasión se basa en la fe, la devoción y la reflexión, y puede considerarse un acercamiento de Otro Poder (Tariki). "Tariki" es el término canónico que se usa para referirnos a que es el Buda, el "Otro", quien nos permite alcanzar el Despertar. Un ejemplo de esto es el Budismo Tierra Pura. Pero aunque los clasifiquemos de esta forma, ambos términos son edios hábiles para ayudarnos, pues uno incluye el otro; son mutuamente incluyentes y complementarios. ¿Cómo podemos ver esto? Veamos las enseñanzas del Budismo Zen desde el Budismo Tierra Pura, y el Budismo Tierra Pura desde las enseñanzas del Budismo Zen.

En el Budismo Zen (Dhyana - Chan), se enfatiza el estudio de los Sutras y los escritos de los Patriarcas, junto con la práctica de los Preceptos y la meditación. El comienzo de la práctica comienza con el Bodhiccita, el Deseo de Alcanzar el Despertar por el Bien de Todos los Seres Sintientes. Luego, nos forzamos a mantener los Preceptos (No Matar, No Robar, No Mentir, No Abusar de la Sexualidad, y No Abusar de los Intoxicantes) para encaminarnos en la Vía del Buda. Entonces, con la práctica de la meditación sentada (llamada "Zazen") podemos accesar una fuente infinita e innata de calma y paz (nuestra Naturaleza Búdica), a través y por la cual tratamos de realizar la Verdadera Naturaleza de la Realidad, eliminar los deseos y pasiones, y descubrir y manifestar nuestra Budeidad Innata. Esto presupone que somos innatamente buenos, pero los deseos y las pasiones nos desacarrilan del verdadero camino. A través de la meditación, podemos ver que poseemos bondad y pureza innata; podemos ver nuestras debilidades y errores, los aspectos feo que negamos y no queremos ver, y los reconciliamos e integramos saludable y positivamente a nuestra persona. Pero como es la naturaleza del mundo el cambio y la impermanencia, debemos de meditar para volver a nuestra Verdadera Naturaleza. Este es el camino Zen tradicional, pero solo es mostrado desde nuestra perspectiva (Jiriki) dual entre la práctica y el logro, entre el Samsara y el Nirvana, entre los deseos mundanos y la Iluminación.

Desde una perspectiva Tariki, cuando meditamos lo suficiente de forma correcta, es nuestra Naturaleza Búdica en lo que descanzamos. No somos nosotros quienes hacemos Zazen, sino que nuestra Naturaleza Búdica hace Zazen por nosotros. Es el Voto Primal del Buda Amida de salvar a todos los seres sintientes lo que despertó (lo que nos permitimos escuchar o despertar) lo que llamamos "Bodhicitta". Es nuestra respuesta al llamado del Buda a Despertar. Nuestra respuesta se manifiesta como Zazen, y nuestro Despertar es el Renacimiento; el reconocimento de que ya hemos sido salvados por la Gracia y el Poder del Buda Amida. Nunca fuimos nosotros (Jiriki) quienes nos movimos, sino que fue el Buda Amida quien se movió a través de nosotros. En ese momento, nos damos cuenta que somos la encarnación del Bodhisattva Dharmakhara, del Voto Primal, del Buda Amida. El Buda Amida es nuestra Naturaleza Búdica, nuestro Verdadero Ser.

Por otro lado, en el Budismo Tierra Pura (Buddhasmurti - Jingtu), se enfatiza la fe, la devoción y la recitación del "Nembutsu", el Nombre del Buda - "Namu Amida Butsu". El comienzo de este camino sucede cuando despertamos el Deseo del Renacimiento en la Tierra Pura de la Bienaventuranza del Buda Amida, donde abandonaremos este Mundo Saha impuro y alcanzaremos nuestro Despertar de la Budeidad. Este camino no enfatiza la adherencia estricta a los Preceptos, pero siguen siendo fundamentales en su verdadera esencia (diferente a las escuelas Tierra Pura independientes japonesas, donde la adherencia a los Preceptos es a veces vista como desconfianza al Voto Primal del Buda Amida de salvar a todos los seres tal y como son). Este camino presupone que somos personas malas, "bonbu", llenas de pasiones y deseos y mal karma. A través del Nembutsu, sin embargo, podemos ver que poseemos bondad y pureza innata, y esto permite que igualmente reconciliemos ambos aspectos de nuestra persona, manteniendo una actitud de humildad. Esto requiere esfuerzo (recitación); requiere que demos pasos decisivos por nuestro Renacimiento y desarrollo espiritual por el Despertar.

Si bien al principio nuestra recitación del Nombre del Buda puede ser una súplica para lograr este propósito, el Canon Budista, en los Sutras de la Tierra Pura, nos aseguran que si tenemos fe, nuestro Renacimiento ya está asegurado, por lo que con el tiempo nuestra reacitación se vuelve una muestra de agradecimiento por habernos salvado (asegurar nuestro Renacimiento). Es por eso que, cuando recitamos el Nembutsu con total fe y confianza, podemos accesar la Tierra Pura aquí y ahora, pues el Nembutsu nos permite eliminar las obscuraciones de nuestros ojos y ver la Luz Infinita (Gracia) del Buda Amida, la cual siempre ha estado brillando sobre nosotros en todo momento. Este es el camino Tierra Pura tradicional (expuesto por las escuelas Tierra Puras independientes japonesas), pero solo es mostrado igualmente desde nuestra perspectiva del Jiriki, donde sigue habiendo dualidad entre la práctica y el logro, entre el Samsara (este Mundo Saha impuro) y el Nirvana (la Tierra Pura), entre los deseos mundanos y la Iluminación, por lo que podemos ver que el Renacimiento es logrado por nuestro Poder Propio por medio de la recitación del Nembutsu.

Desde una perspectiva Tariki, pues todos nosotros somos una manifestación del Voto Primal del Buda Amida, y el Buda Amida es nuestro Verdadero Ser, y cuando recitamos el Nembutsu, alcanzamos la unión (el Samadhi) con el Buda Amida, nuestra Verdadera Naturaleza - Naturaleza Búdica. Ya no somos nosotros quienes recitamos el Nembutsu, sino que el Nembusu surge espontáneamente de nuestro labios como una manifestación del Voto Primal del Buda Amida. Es el llamado del Buda para que Despertemos de nuestro sueño y veamos la Unidad Fundamental de nosotros con el Buda; que somos el Buda. En ese momento, "Renacemos" en la Tierra Pura, es decir, realizamos el Nirvana, y vemos que este Mundo Saha impuro y el Nirvana son uno. Renacer es alcanzar la Budeidad en esta vida y en este cuerpo, aun con nuestros deseos y pasiones. En ese instante, los Preceptos surgen espontáneamente de nuestra Verdadera Naturaleza. Es por eso que el Nembutsu se vuelve un agradecimiento por la actividad dinámica que siempre ha estado trabajando a través de nosotros por nuestra salvación (Renacimiento). Pero como es la naturaleza del mundo el cambio y la impermanencia, debemos de continuar recitando el Nembutsu para continuar Renaciendo en la Tierra Pura. Este Renacimiento nos permite "regresar" a este mundo y realizar el Trabajo del Bodhisattva por el bien de todos los seres sintientes.

Como vemos, si bien esto parece ser bien diferente del Budismo Mahayana como es expuesto por muchas otras denominaciones, aspectos tradicionales Mahayana ortodoxos como el Bodhicitta, el Deseo de Alcanzar el Despertar por el Bien de Todos los Seres Sintientes, es reemplazado por un concepto similar, el Deseo de Renacer en la Tierra Pura. La práctica es la misma: la meditación, la devoción, el estudio y la recitación, pero tiene un fuerte componente de fe (el cual se encuentra en todas las escuelas). El Despertar y el Nirvana es reemplazado por el Renacimiento y la Tierra Pura, respectivamente. Zazen es Nembutsu, y Nembutsu es Zazen. Meditar en Zazen, habiendo sido ya salvados por el Buda Amida, significa vivir en la Tierra Pura del aquí y ahora; descanzar en una flor de loto en medio del estanque del mundo. Recitar el Nembutsu sin pensamiento de nosotros mismos - de nuestro ser finito y falso - es alcanzar el Nembutsu Samadhi y regresar a nuestro Verdadero Ser. Así, como vemos, es el mismo camino budista, con diferente terminología y enfoque, pero el fin es el mismo - el Despertar y la realización del Trabajo del Bodhisattva en el mundo.

Es interesante destacar que en ambos casos, ya sea en el Zen o en el Nembutsu, parte del proceso en el progreso espiritual es el reconocimiento de nuestras ilusiones, de los aspectos negativos o incluso malvados dentro de nosotros. Esto es algo que es resaltado muchas veces solo en el Budismo Tierra Pura (sobre todo, en sus vertientes independientes, como el Jodo Shinshu), pero es algo que se encuentra también en el Zen. Meditar y contemplar la mente es darnos cuenta de nuestros deseos, ilusiones y mal karma (en la forma de malos pensamientos y patrones habituales). Aquellos que no meditan no saben ni entienden nada de esto. Una de las primeras cosas que aprendemos cuando comenzamos a meditar es que somos "bonbu", seres llenos de deseos y pasiones ciegas, muchas de ellas tan malvados como nuestros peores pesadillas. Pero el darnos cuenta de ello significa que estamos haciendo progreso. Es solo gracias a que estamos alumbrando nuestra mente con la luz de la consciencia (o la Luz Infinita del Buda Amida) que podemos ver nuestras sombras. Gran parte de la meditación es también el tratar de no identificarnos con esas sombras, con esos pensamientos y sentimientos, y ver su naturaleza real pero ilusoria; es tratar de hecharlos a un lado para poder estar presentes en el aquí y ahora, en nuestra Verdadera Naturaleza. Es ese deseo de moverlos a un lado lo que es igualmente la fuerza del Buda, nuestra propia Naturaleza Búdica - el Espíritu del Buda en nosotros  - el trabajo de la actividad dinámica del Cosmos al Despertar dentro de nosotros. Es el Buda guiándonos de Esta Orilla de la Ilusión y el Sufrimiento a la Otra Orilla del Nirvana. Es ese reconocimiento lo que nos hace Budas. 

Ambos caminos requieren el Poder Propio (Jiriki) del abandono del ser finito y falso, nuestro ego, y confiar (tener fe) en la práctica y su resultado. Así como ambas prácticas requieren que nos dediquemos totalmente a ellas, sin noción de nosotros mismos ni del "Otro" (Tariki). Entonces, uan vez damos los primeros pasos y extendemos nuestras manos hacia arriba para alcanzar al Buda, el Buda nos extiende igualmente su mano y nos hala hacia el Despertar. Cuando meditamos, somos Budas meditando; cuando recitamos el Nembutsu, somos el Buda llamándonos. No hay diferencia ni división entre la prática y el logro. Cuando abandonamos nuestro ser finito y falso y nos confiamos a la Gracia del Cosmos (Buda), podemos manifestar nuestro Verdadero Ser, el cual es uno con Todo y con todos. Esta es la comunión con el Buda, la cual podemos lograr por medio de la meditación (Zazen - Shikan) y el Nembutsu. Esta es la perspectiva única del Zen y la Tierra Pura dentro de la Tradición del Loto*.

* En la escuela Tendai, muchos templos practican Zazen en vez de la meditación Shikan. Después de todo, el Gran Maestro Saicho trajo las enseñanzas Zen al Monte Hiei en el Siglo 8, y es una forma de meditación menos elaborada para las personas no budistas.