Bienvenido a la Tierra Pura de la Luz Serena, un recurso sobre el Verdadero Budismo (一乘佛教), y sus posteriores ramificaciones, a la luz de las Enseñanzas Perfectas y Completas (圓教). Aquí presentamos el Budismo como religión, filosofía y estilo de vida, con énfasis en la Teología Budista (Budología), aspirando a presentar el Budismo balanceadamente entre la academia (estudios budistas) y la devoción, desde el punto de vista de una escuela tradicional de Budismo japonés (Shingi Hokke Shu - Escuela del Loto Reformada 新義法華宗) y las enseñanzas universales del Sutra del Loto (法華経).


viernes, 26 de julio de 2024

Joyas de la Tesorería del Dharma: La Sabiduría del Maestro Shinran - El Santo Nombre del Buda Amida (Nembutsu)

 

La razón para la aparición del Buda en el mundo es para llevar a todos los seres al Despertar y permitirles alcanzar la Budeidad; esto es, el reconocimiento y el regreso a la Unidad Fundamental con la Existencia, el Buda Eterno, lo cual nos permite hacer de este mundo, uno mejor. Existen 84,000 formas para lograr esto, pero una de las más hermosas y accesibles es la práctica del Nembutsu: la Recitación del Santo Nombre del Buda Amida.

El Nembutsu es la práctica budista tradicional de la recitación del Nombre del Buda. La palabra "Nembutsu" literalmente significa "Meditación sobre el Buda", y en nuestro templo, asume la forma de "Namu Amida Butsu", que significa (entre muchas cosas) "Tomo Refugio en el Buda Amida, el Buda de la Luz y la Vida Infinita". La recitación del Nembutsu ilumina nuestro ser, arrojando luz sobre nuestras limitaciones, y nos muestra el trabajo incansable de la Compasión y la Sabiduría infinita del Buda en nuestras vidas. Igualmente, el Nembutsu nos permite ver nuestra Unidad Fundamental con el Buda y con todos los seres sintientes.

En sus sermones sobre el Buda Amida y la Tierra Pura, el Buda Shakyamuni nos revela que el Santo Nombre es el fruto del Voto Primal de llevar a todos los seres al Despertar y la salvación. Es la Esencia del Gran Voto de Compasión del Buda Eterno; su encarnación espiritual. El Buda Eterno, Amida, encarnó en su Santo Nombre para hacerse presente a todos y cada uno de los seres, y poder ser uno con ellos en cuerpo, mente y espíritu, y otorgarles su Gracia. El Maestro Shinran nos dice:

"El Buda Gautama ha dispuesto ochenta y cuatro mil puertas de enseñanzas diversas para permitir a todos los seres sintientes lograr la destrucción de su ignorancia y karma y sus efectos. Pero ninguna de estas puertas supera el poder del Santo Nombre del Buda Amida, es decir Namo-Amida-Butsu, que, una vez recitado, rompe por completo la cadena del pecado, como una espada afilada corta de un solo golpe."

El invocar el Santo Nombre del Buda nos permite hacer la presencia del Buda Amida presente en nuestro cuerpo, mente y espíritu - invocar su Gracia - la cual nos llena de paz y es verdaderamente un Refugio en todos los momentos de nuestras vidas. El Verdadero Nembutsu tiene el poder de traer la paz de la Tierra Pura al momento presente. Este es solo uno de los beneficios que os otorga en esta vida. El Maestro Shinran nos dice:

"Aquellos que repitan el Santo Nombre del Buda Amida recibirán en esta vida terrenal el favor divino que es inmensurable. El pecado que causa la transmigración en el mundo del Nacimiento y la Muerte será exterminado, y la desgracia y la muerte prematura se evitarán."

Así, cuando lleguemos al momento de nuestra muerte, podemos descartar este cuerpo lleno de impurezas y de mal karma y Renacer en la Tierra Pura de la Bienaventuranza, el Nirvana, alcanzando la absoluta Budeidad, y regresar a los mundos para realizar la labor salvífica del Buda por el Cosmos.  El Nembutsu es entonces el Puente al Nirvana, la mano extendida del Buda, creado por el Poder y la Gracia del Buda Amida. El Maestro Shinran nos dice:

"El Buda Amida, nuestro Padre, nos conduce a la Salvación por medio de Su Santo Nombre. Así, cuando lo escuchamos con nuestros oídos y lo repetimos con nuestros labios, sus méritos ilimitados penetran en nuestro espíritu y se convierten en la semilla de la Budeidad."

La práctica de la recitación del Santo Nombre del Buda Amida encarna los Tres Misterios: con las manos en oración formamos un Mudra; con los labios recitando su Santo Nombre, recitamos un Mantra; y con nuestra mente y corazón en total entrega, somos un Mandala, permitiendo que nos unamos al Buda Amida en cuerpo, palabra y mente, armonizando con el Cuerpo, Palabra y Mente del Buda Amida. Esto nos permite manifestar el Espíritu del Buda Amida - nuestra Naturaleza Búdica - en este cuerpo y en este mundo, manifestando nuestra Budeidad Innata (Nembutsu Jobutsu), la cual es consumada y perfeccionada completamente en nuestro Renacimiento en la Tierra Pura.

Si bien el Santo Nombre nos fue dado - como nuestra Salvación - como regalo desde el principio del tiempo, el mismo debe ser aceptado voluntariamente y de forma inequívoca. Si bien el mundo (que hemos creado) es como una casa en llamas (pues nosotros mismos lo hemos incendiado), y el Buda tiene el Poder para sacarnos, tenemos libre albedrío y podemos decidir quedarnos, aunque las aguas del océano de nacimientos y muertes del Samsara nos ahogue indudablemente. Por ello, el Buda Amida, como un buen Padre, no nos saca a la fuerza, sino que nos llama constantemente para que salgamos (nos salvemos) cuando así lo deseemos. Esto es lo que hace con su Santo Nombre, el cual encarna su Esencia en forma sonora, luz y vida.

Es por eso que la verdadera recitación del Nembutsu es la que el Buda recita por nosotros, no la que recitamos por el Buda. Si bien al pirncipio nuestro Nembutsu será un llamado (una súplica - Nembutsu del Poder Propio) al Buda, cuando nos entreguemos totalmente, quien recitará el Nembutsu a través de nuestros labios será el Buda mismo, respondiendo nuestro llamado, asegurándonos nuestra Salvación. Esto es el Shinjin o la Fe Asegurada. Esto es lo que el Maestro Shinran llama el Nembutsu del Otro Poder. El Maestro Shinran nos dice:

"A quienquiera que escuche Su Santo Nombre, crea y se regocije en él, el Buda Amida le otorga Sus propios méritos infinitos. Entonces, puesto que su destino es la Tierra Pura de la Dicha en la que renacerá, nunca se desviará de su objetivo."

Nuestro Renacimiento en la Tierra Pura es doble: cuando nos entregamos completamente al Buda Amida y aceptamos su Regalo de Salvación, aseguramos nuestro Renacimiento (aceptamos su Regalo) en la Tierra Pura. Así, el Renacimiento se logra en esta vida (cuando obtenemos Shinjin) pero se consuma en el momento de la muerte. El Maestro Shinran nos explica:

"Siempre que una persona en la tierra decide recitar el Santo Nombre de Amida, surge en la Feliz Tierra de Occidente un nuevo tallo de loto que lo recibirá en su flor, cuando él, sin haber dejado nunca de practicar el Nembutsu, llegue por fin al final de sus días en la tierra."

Pero a su vez, ese momento marca otro tipo de Renacimento: el Renacimento a una nueva persona en esta vida. Este no es el resultado de nuestros esfuerzos (Poder Propio), sino de la Gracia del Buda Amida (Otro Poder). Esta es una transformación espiritual completa, que nos transforma - como dice la Tradición - de pedazos de piedra a oro. Entonces, todo bien que hagamos es solo nuestro agradecimiento al Buda Amida por su Regalo de Salvación. Como Shinran nos dice en uno de su Himnos:

"Gracias a la compasión de Shakyamuni y Amida,
hemos podido realizar la mente que busca alcanzar la Budeidad.
Al entrar en la sabiduría del Shinjin,
nos convertimos en personas que responden con gratitud a la benevolencia del Buda."

Cuando estudiamos la Tradición Budista - y sobre todo, los Sutras del Buda Amida - vemos que ya el Buda Amida nos ha salvado. Una de las condiciones para su Budeidad era que todos los que reciten su Santo Nombre renazcan en la Tierra Pura, y su Budeidad ha sido alcanzada, lo que demuestra que ya todos hemos sido salvos; el Buda solo espera que aceptamos su Salvación. El Maestro Shinran nos dice:

"Antes de alcanzar la Budeidad, el Buda Amida hizo un voto de que recibiría en el Paraíso a todos aquellos que escucharan Su Santo Nombre y creyeran en Él con todo su corazón. Así pues, no importa si son pobres o ricos, ignorantes o eruditos, virtuosos o pecadores, observantes o transgresores del Dharma, aquellos que se transforman al recitar Su Santo Nombre serán transformados del estado más bajo al más alto de ser, tal como una piedra se transforma en oro."

Esta Salvación es para todos, sin distinción, como el Maestro Shinran nos dice:

"Aunque el mundo entero esté en llamas, aquel que pase por él y escuche el Santo Nombre estará calificado para alcanzar la Budeidad en la siguiente vida."

El "Namu" de "Namu Amida Butsu" nos representa a nosotros y a todos los seres, y el "Amida: representa al Buda Eterno, quien abraza a todos los seres y no abandona a ninguno. El Buda Eterno no solo es nuestro Padre Espiritual trascendente, sino que es nuestra Verdadera Naturaleza Innata que se abre cuando nos entregamos completamente. Así, el Infinito siemre abraza lo finito, lo que permite una verdadera transformación. La recitación del Santo Nombre, entonces, nos permite trascender las barreras de nuestro ser finito y falso y abrirnos al Infinito, nuestro Verdadero Ser. Este es el Renacimento por medio del Nembutsu en esta vida. 

Así, como vemos, la práctica del Nembutsu no es solo la recitación del Santo Nombre del Buda, sino nuestra completa entrega al Buda para recibir su Regalo de Salvación. Por eso el Maestro Shinran nos advierte:

"Sobre el Nembutsu, la no práctica es la verdadera práctica, dado a que está más allá de la descripción, explicación y el entendimiento."

Si bien el Canon y la Tradición llenan volúmenes explicando esto, el Santo Nombre del Buda sigue siendo un Misterio Budista, que es mejor abordado por medio de la fe. Es por eso que el requisito real para aceptar el Regalo de Salvación del Buda es la total entrega y confianza - la Fe. 

Al principio, cuando oímos hablar por primera vez del del Nembutsu, muchos de nosotros lo asumimos como un esfuerzo aparentemente autónomo (Propio Poder). No hemos llegado a comprender que el Santo Nombre es el llamado del Buda Amida para que alcancemos nuestro Despertar y aceptemos su Regalo de Salvación. Todavía no hemos respondido al llamado ni aceptado el Shinjin del Buda Amida.

Para Shinran, recitar el Santo Nombre es escuchar al Buda Amida llamándonos a refugiarnos en la Sabiduría (Luz) y Compasión (Vida) ilimitadas del Despertar. Cuando recitamos el Santo Nombre, escuchamos la voz del Buda Amida que nos llama y nos dice: "Refúgiate en mí (Buda Amida)". El Nembutsu es el Nombre que Llama; el Nombre Viviente. Esto puede ser algo gradial, como algo súbito; esto es lo único que depende de nosotros. Al escuchar el Nembutsu de esta manera, con nuestro oído espiritual al recitar el Nembutsu, descubrimos la alegría y la paz mental que surgen de confiar en el Buda Eterno. Así, la simple práctica de recitar el Nembutsu se convierte en una expresión de profunda conciencia de la sabiduría y la compasión del Buda Amida que nos guía y sostiene constantemente a través de todos los momentos de nuestras vidas.

No importa nuestro pasado, nuestro mal karma, y el mal que hayamos hecho, si nos encomendamos completamente al Buda Amida y recibimos su Regalo de Salvación, podremos borrar todos nuestro pecados y mal karma y renacer de nuevo a una nueva vida, no porque lo merezcamos; no porque lo hayamos logrado nosotros; sino porque el Buda nos los da de su infinito Amor y Misericordia. 

"Recita el Santo Nombre del Buda Amida con tu corazón confiado, pues Kannon y Daiseishi (los Bodhisattvas Avalokiteshvara y Mahasthanaprapta) siempre te acompañarán, como la sombra sigue a la sustancia, con una multitud de Bodhisattvas para protegerte de los espíritus malignos."

Esto no significa que nuestras vidas estarán libres de problemas, o que no cometeremos mal, sino que el Buda Eterno nos dará las fuerzas para poder enfrentar todas nuestras circunstancias y ver y responder mejor a nuestros pensamientos, palabras y acciones en el futuro.

Como vemos, la única diferencia entre la concepción del Nembutsu del Maestro Shinran y la Tradición Budista radica en la exclusividad. Shinran aportó a la Tradición Budista el desarrollo y mejor entendimiento del Misterio del Nombre Sagrado, la cual anterior a Shinran era entendida de forma diferente. Antes de Shinran, los Maestros sostenían que el Renacimiento era exclusivo tras la muerte (no como un "Renacimiento Espiritual" en esta vida), y que la misma descanzaba sobre el número de recitaciones y el mérito que acumulaban (buenas obras). Después de todo, cuando leemos los Sutras del Budas Amida, vemos que todas las prácticas budistas - hechas con la intención correcta - son medios para alcanzar el Renacimiento en la Tierra Pura.

El Maestro Shinran logró revelar la verdadera intención del Buda Eterno en los Sutras del Buda Amida y rescató la intención del Buda de extendernos su Regalo de Salvación por medio de la fe. Esto no fue una invención, sino un descubrimiento; la aclaración del Misterio del Santo Nombre y la Salvación por Medio de la Fe ya existente en la Palabra del Buda. Donde el Maestro Shinran erra es en hacer el Nembutsu la única práctica a exclusión de toda otra, viéndo las otras prácticas budistas como dudas sobre la fe y el Regalo de Salvación del Buda. Esto va en contra de la Palabra del Buda contenida en el Canon y de la Tradición Budista.

Pero esto se reconicilia parcialmente en su visión (poco desarrollada y altamente ignorada por el Jodo Shinshu) de que luego de obtener Shinjin, todo acto positivo hecho es una expresión de agradecimiento al Buda por su Regalo de Salvación. Esto se puede extender a toda práctica budista - como la Meditación, los Paramitas y el Camino del Bodhisattva - la cual, hecha como acto de agradecimiento, sigue teniendo sus beneficios espirituales para nosotros y el mundo. 

Así, toda práctica budista hecha como agradecimiento al Buda Amida, es una recitación del Santo Nombre del Buda.