Bienvenido a la Tierra Pura de la Luz Serena, un recurso sobre el Verdadero Budismo (一乘佛教), y sus posteriores ramificaciones, a la luz de las Enseñanzas Perfectas y Completas (圓教). Aquí presentamos el Budismo como religión, filosofía y estilo de vida, con énfasis en la Teología Budista (Budología), aspirando a presentar el Budismo balanceadamente entre la academia (estudios budistas) y la devoción, desde el punto de vista de una escuela tradicional de Budismo japonés (Tendai-shu 天台宗) y las enseñanzas universales del Sutra del Loto (法華経).


martes, 7 de febrero de 2023

Aspectos de la Dharmología: Comentarios al Catecismo Budista II - El Buda Eterno y el Voto Primal

 A finales de Diciembre del 2022, el Templo Tendai de Puerto Rico y su Sangha Tendai Hispana, publicó el libro titulado Dharmología: Catecismo Budista - Las Enseñanzas y Prácticas Fundamentales del Verdadero Budismo (Hikari Publishing, 2022), el cual expone las enseñanzas doctrinales canónicas del Dharma Eterno del Buda desde la óptica de la escuela Tendai japonesa - la madre de todas las escuelas budistas en Japón - desde el contexto de nuestra cultura religiosa hispana. En las próximas entradas, expandiremos sobre aspectos específicos del Catecismo, desde un enfoque dharmológico (estudios doctrinales), para poder comprender detalladamente sus implicaciones.

En esta segunda entrada, comentaremos brevemente sobre el Voto Primal del Buda Eterno (D:CB-C2.III.1) y (D:CB-C5.4).

Entre las doctrinas budistas del Verdadero Budismo, se encuentra la doctrina del Voto Primal. Esta es una doctrina poco hablada, que aparece en ramas budistas como la Tierra Pura (Jodo Shu y Jodo Shinshu), pero que tiene su genesis en dentro del Budismo Canónico, y sobre todo, en el Sutra del Loto. Como recordaremos, la rama Tierra Pura no es realmente una escuela o secta independiente, sino que desde sus inicios ha sido un camino o rama de interpretación y práctica dentro del Budismo Canónico. Sin embargo, en el periodo Kamakura en Japón (1185-1333 EC), en el medioevo japonés, un reformador Tendai llamado Honen (1133–1212) trató de implementar una reforma dentro de la escuela que no fue aceptada, pero que fue ampliamente acogida por parte de la población general, sobre todo, entre los campesinos, que posteriormente se independizó como la secta Jodo Shu. Años más tarde, otro reformador Tendai llamado Shinran, discípulo de Honen, llegaría igualmente a sentar las bases para lo que siglos más tarde sería la escuela Jodo Shinshu. Estas son las dos sectas independientes (con sub-sectas) del Budismo Tierra Pura en Japón. En el resto del continente asiático y del mundo budista, el Budismo Tierra Pura sigue siendo parte del Budismo Canónico hasta nuestros días.

Comencemos examinando esta doctrina desde su manifestación más popular, en el Budismo Tierra Pura.

En el Budismo Tierra Pura chino y japonés, se dice que el Voto Primal (Hongan) tiene su origen en el decimoctavo voto que forma parte de una serie de 48 votos que el Buda Amida (Amitabha) hizo en el Sutra del Buda de la Luz y la Vida Infinita (Sutra Largo). El texto del Voto 18 del Buda Amida, según el Sutra Largo, dice:

"Si, cuando alcance la Budeidad, los seres sintientes en las tierras de las diez direcciones que se confían a mí con alegría y sinceridad, desean renacer en mi tierra y llaman mi Nombre, aunque sea diez veces, y no renacen allí, que yo no pueda alcanzar la Iluminación Perfecta. Sin embargo, quedan excluidos aquellos que cometen las Cinco Ofensas Graves y los que abusan del Dharma Correcto".

Según la Dharmología (estudios budistas sectarios) de las escuelas Tierra Pura independientes (Jodo Shu y Jodo Shinshu), el Buda Amida, en el principio del tiempo en su carrera del Bodhisattva como Dharmakhara, realizó este Voto Primal, que sienta las bases de todo su poder y Gracia salvífica. Dado a que fue realizado en el principio del tiempo, y dado a que es la base de su aparición y propósito como un Buda en el Cosmos, es llamado el "Voto Primal". 

Como leímos, este Voto tiene un caveat, y es que el Buda Amida mismo dice que no aplica a los que cometan las Cinco Graves Ofensas y abusen del Dharma Correcto. Las Cinco Graves Ofensas o Cinco Pecados Capitales (Go-Gyaku) son cinco transgresiones o pecados que se encuentran en los Sutras o el Canon Budista que en el Budismo se consideran capitales. Estos son: (1) matar al padre, (2) matar a la madre, (3) matar a un Arhat o santo budista, (4) herir a un Buda y (5) causar desunión en la Orden Budista (Sangha). Se dice que aquellos que cometen cualquiera de los Cinco Graves Ofensas invariablemente caen en el Infierno del Sufrimiento Incesante (Avichi). Las últimas tres ofensas se conocen colectivamente como los Tres Pecados Capitales. Abusar del Dharma Correcto (Hobo) es negar, oponerse, menospreciar o calumniar la enseñanza budista correcta. Esto es algo que igualmente vemos mucho en el Canon Budista. Por ejemplo, en el Sutra del Loto leemos: "Si una persona no tiene fe y en cambio calumnia este Sutra, inmediatamente destruirá todas las semillas de la Budeidad en este mundo... Cuando su la vida llega a su fin, entrará en el Infierno Avichi". Este es un pecado por comisión, pero aplica igualmente a la omisión. Según el Sutra del Nirvana, no reprochar a quienes calumnian el Dharma Correcto equivale a calumniarlo a uno mismo. Sin embargo, el Buda es un ser infinitamente compasivo y sabio. Entonces, ¿por qué excluiría estos pecados? El Canon y los Tratados Budistas han abordado extensamente esta interrogante.

En el Sutra de la Meditación en el Buda Amida y su Tierra Pura (Sutra de la Meditación), el cual fue predicado posteriormente al Sutra Largo mencionado arriba, el Buda le enseñó a la madre de Ajatassattu, la reina Vaidehi, que aquellos que renacen en el nivel más bajo del grado más bajo son los seres sintientes que cometen males como las Cinco Ofensas Graves, los Diez Actos Malvados y todo tipo de inmoralidad. Sin embargo, cuando están a punto de morir, pueden encontrarse con un buen maestro, que lo consuela de varias maneras, enseñándole el Dharma Correcto y animándolo a tener en cuenta al Buda; pero está demasiado atormentado por el dolor para hacerlo, por lo que el buen maestro le aconseja que repita el Nembutsu (el Nombre Sagrado del Buda Amida) aunque sea diez veces. Debido a que recita el Nombre del Buda, con cada repetición, se extingue el mal karma que ha cometido durante cientos de vida en el Samsara, lo que le abre la posibilidad a la redención. 

Igualmente, Ajashatru, el rey homicida de Maghada, y Devadatta, el primo malvado del Buda, son ambos ejemplos de pecadores graves que pudieron alcanzar la redención y la expiación misma del Buda en vida, mostrándonos que incluso los más malvados y pecadores, si reconocen sus faltas y las enmiendan, pueden alcanzar la salvación y manifestar su Budeidad. Esgto es porque todos los seres, sin excepción, poseen la Naturaleza Búdica (el Espíritu y la Esencia del Buda), la capacidad innata de alcanzar el Despertar y manifestar su Budeidad, y esta Naturaleza Búdica no se ve manchada ni corrompida por nuestro mal karma.

También, los grandes maestros nos han asegurado que la inclución de estas exclusiones en los Sutras son medios hábiles para alejar a los seres sintientes del mal, acercarlos al bien, y para que purifiquen sus mentes, por lo que no son condenas absolutas. De hecho, como vemos, este Voto fue hecho especialmente para las personas "malvadas", que no han podido acumular las raíces del bien, evitando un mal destino.

Entonces, como vemos, según el Budismo Tierra Pura, el Voto Primal es el Voto 18 del Buda Amida que promete la salvación (Renacimiento) a todos los seres que reciten su Santo Nombre, aunque sean diez veces, con total fe y entrega, y así es como la mayoría de las personas lo interpreta.

Ahora, el término "Voto Primal" (Hongan)  se deriva originalmente del término sánscrito "Pūrvapraṇidhāna", que significa "Voto Original" o "Voto Primal", y generalmente se refiere a todos los votos hechos por un Bodhisattva para desarrollar Bodhicitta y comenzar el esfuerzo hacia la Budeidad, por lo que no es un término original de los Sutras del Buda Amida ni del Budismo Tierra Pura. Todos los Budas y Bodhisattvas tienen Votos Primales, que son los votos hechos que manifiestan su Dharma o ministerio salvífico en el Plan Cósmico. Por ejemplo, el Buda de la Medicina (Yakushi Nyorai) hizo 12 Votos, entre los que se encuentra el Voto Primal de brindar sanación física, mental y espiritual a todos los seres que reciten su Santo Nombre y se encomienden a su Gracia. Entre los Bodhisattvas, tenemos al Bodhisattva Ksitigharbha (Jizo Bosatsu), quien hizo el Voto Primal de no alcanzar la Budeidad hasta que todos los Infiernos se vacíen; y al Bodhisattva Avalokiteshvara (Kannon Bosatsu), el Bodhisattva del a Compasión, quien hizo el Voto Primal de salvar a todos los seres sintientes de 3,000 calamidades si recitan su Santo Nombre. De hecho, el Nombre de los Budas y Bodhisattvas encarna sus Votos Primales. Esto es porque todos los Budas (y muchos Bodhisattvas, quienes son realmente Budas) son manifestaciones de las cualidades iluminadas del Buda Eterno (D:CB-C2.III.1), quien aparece de múltiples formas, maneras y bajo diferentes nombres en todos los mundos para llevar a los seres sintientes a la salvación y el Despertar.

Ahora, en el Catecismo Budista, hablamos del Voto Primal del Buda Eterno. En el mismo (D:CB-C5.4), leemos:

"V.4 - El Voto Primal - Aunque los seres sintientes pueden olvidar o rechazar al Buda Eterno, el Buda no cesa de llamar a todos los seres a buscarle para que viva y encuentre la dicha. Pero esta búsqueda exige de los seres todo el esfuerzo de su inteligencia, la rectitud de su voluntad, una mente y un corazón abierta, para que pueda escuchar y responder a ese llamado al Despertar."

Aunque conciso (como debe ser un Catecismo), el mismo posee múltiples niveles de interpretación. Esta cita del Catecismo se basa en el Voto Primal del Buda Eterno, que es manifestado por primera vez en el Sutra del Loto, cuando leemos que, vida tras vida, manifestación tras manifestación, y encarnación tras encarnación, el Buda Eterno se manifiesta y encarna entre los seres, mundos tras mundo, manifestando su Voto Primal: "Siempre estoy pensando: ¿Cómo puedo hacer que los seres vivos entren en el Camino Insuperable y perfeccionen rápidamente el cuerpo de un Buda?" (Sutra del Loto 16). Podemos encontrar igualmente referencias a la Vida Eterna del Buda en muchos Sutras Mahayana, como el Sutra del Nirvana, el Sutra de la Luz Dorada, el Sutra de Vimalakirti, el Sutra de Lankavatara, los Sutras del Buda Amida, los Sutras Esotéricos (Sutra de Mahavairocana, Sutra Vajrasekhara, Sutra Susiddhikhara), etc. El pasaje completo del Sutra del Loto, el cual es el Sutra más importante de todo el Canon Budista, lee así:

"Desde el tiempo en que alcancé la Budeidad,
Los eones que ha pasado
Son ilimitados cientos de miles de miríadas
De kotis de asamkhyeyas en número.
Yo siempre predico el Dharma para enseñar y transformar
Incontables millones de seres vivientes,
Para que entren al Camino del Buda.
Y a través de esos ilimitados eones
Para salvar a los seres vivientes,
Yo manifiesto apropiadamente el Nirvana.
Pero en realidad yo no paso a la tranquilidad inactiva o al Nirvana;
Sino que permanezco aquí, siempre predicando el Dharma.
Siempre estoy aquí,
Y usando el poder de las penetraciones espirituales,
Causo que los seres sintientes trastocados o perturbados,
Aunque estén cerca de mí, no me vean."

En este pasaje, vemos que el Buda Shakyamuni, hablando desde su Dhamrakaya o Cuerpo del Dharma - el Buda Eterno - nos dice que, aunque dio la apariencia de haber nacido, crecido, practicado el Camino y alcanzado la Budeidad como un hombre en este mundo, en realidad, él es una encarnación del Buda Eterno, una mnaifestación del Alma del Cosmos y de la Budeidad, por lo que su Despertar en este mundo fue un medio hábil para predicarnos el Dharma en una forma humana y mostrarnos que todos podemos alcanzar el mismo estado y salvación. Según el Sutra del Nirvana, el último sermón del Buda en el mundo, los seres mundanos no logran ver esta eternidad del Buda y su Dharma dado a sus deseos, pasiones y obstrucciones kármicas.

"Las multitudes entienden que paso al Nirvana.
Ellos extensivamente hacen ofrendas a mis reliquias.
Todos me aprecian y anhelan ardientemente,
Y sus corazones me buscan sedientos.
Los seres sintientes, entonces, fieles y mansos,
Íntegros, con mentes obedientes
Persistentes y concentrados en una sola meta
Desean ver al Buda,
Sin importarles sus propias vidas.
En ese momento yo y la asamblea
Aparecimos todos en el Pico del Águila (este mundo),
Donde le digo a los seres vivientes
Que yo siempre estoy aquí y nunca he cesado de estarlo.
Pero usando el poder de los medios hábiles,
Manifiesto la ‘cesación’ y la ‘no cesación’ del ser."

Igualmente, aunque aparenta "entrar en el Nirvana" (Parinirvana o muerte), en realidad, no entra en el Parinirvana, sino que siempre sigue realizando el trabajo del Bodhisattva de salvar a todos los seres sintientes. Este es realmente el Verdadero y Original Voto Primal: la salvación de todos los seres sintientes; el Bodhicitta. 

"Para los seres sintientes en otras tierras,
Reverentes, confiados y aspirando,
Yo predico el Dharma Insuperable.
Pero esos de ustedes que no oyen esto
Piensan que ha pasado al Nirvana.
Veo a los seres sintientes
Hundidos en la miseria, y sin embargo
Me refreno de manifestarme ante ellos
Para causarles que me busquen,
Y entonces, cuando sus mentes estén llenas con anhelo,
Yo aparezco y predico el Dharma.
Con esas penetraciones poderosas espirituales,
A través de asamkhyeyas de eones,
Permanezco siempre en el Pico del Águila (este mundo)
Y también habito en otros lugares."

Esta es la razón por la cual se manifiesta de infinitas formas, bajo infinitos nombres en todos los confines del Cosmos - para poder realizar su Voto Primal. El Buda Amida y el Voto 18 es solo una de estas manifestaciones. Pero el Verdadero Buda detrás de todos los Budas es el mismo Buda Eterno, nuestro Padre Espiritual. Esto le vemos igualmente en el Sutra de Lankavatara, cuando el Buda dice: "Mahamati, se puede decir de mí mismo, porque me encuentro dentro del rango de audición de la gente ignorante, en este Mundo Saha, bajo muchos nombres, que ascienden a cien mil veces tres asamkhyeyas, y se dirigen a mí por estos nombres no sabiendo que todos ellos son los demás nombres del Tathagata." El mismo Buda lo dice en este capítulo del Sutra del Loto que estamos comentando, cuando dice:

"Yo también soy como un padre para el mundo,
Salvándolos a todos del sufrimiento y la aflicción.
Pero para los seres vivientes, perturbados como son,
Hablo de cesación, aunque actualmente permanezco.
De lo contrario, si me ven frecuentemente
Ellos crecerán en arrogancia y flojedad.
Desordenados y apegados a los cinco deseos,
Ellos caerán en los pasajes malvados.
Yo estoy eternamente consciente de los seres vivientes.
Aquellos que practican el camino y aquellos que no."

En estas estrofas, el Buda revela que posee las Tres Virtudes de Padre, Maestro y Soberano de todos los seres sintientes. Los padres guían a sus hijos y les brindan amor. Un maestro sirve para enseñar y educar a la gente. Las virtudes del soberano se muestran cuando el soberano actúa para proteger y guiar al pueblo. Esto también revela nuestro progreso de la infancia a la adultez. Cuando los niños nacen, deben ser protegidos por los padres y otras personas para que sobrevivan y se conviertan en buenos seres humanos. Esto muestra también la importancia del a institución de la familia. Luego de la niñez, a medida que las personas crecen, se encuentran con varios maestros que les brindan conocimientos y habilidades. Esto muestra la importancia de la institución de la escuela y la educación. Cuando adultos, las personas eligen y se guían por un gobernante o soberano. Cada país tiene su propio gobernante, ya sea un monarca en una monarquía o los propios ciudadanos en las naciones democráticas. El soberano gobierna las políticas del país y sus relaciones con los demás. A través de los esfuerzos de los buenos gobernantes, la gente puede vivir en paz dentro de sus países. 

El Buda encarna las Tres Virtudes, siendo nuestro Padre Espiritual y la Esencia de la cual partimos, para luego guiarnos y educarnos a través de la vida, y dándonos la Ley del Dharma para que podamos conducirnos como Bodhisattvas y vivir en amor, paz y seguridad con el resto de los seres sintientes, y lo revela en estas líneas. Esto también se demuestra en la forma en la que reveló su Dharma Eterno. 

El Buda Eterno, nuestro Padre Espiritual, en su infinita misericordia, no podía ver a sus hijos sufrir y, para evitar que sufrieran, apareció en nuestro mundo y nos reveló sus primeras enseñanzas primitivas, las cuales nos mostraban que nos desapegaramos del mundo, del cuerpo y de los deseos. Una vez pudo hacer que sus hijos estuvieran a salvo de cualquier daño, procedió a enseñarles habilidades más útiles. Sigue siendo nuestro Padre, pero también, comenzó a educar y enseñar habilidades útiles para la vida y patrones de comportamiento. Ahora que Buda sabe que sus hijos están comenzando a liberarse de su ignorancia, la próxima etapa de la enseñanza del Buda es ayudar a sus hijos a entender mejor la Verdadera Naturaleza de la Realidad, y esto lo hace como un buen maestro guía a sus alumnos y los prepara para la vida adulta. Una vez adultos, habiendo madurado en corazón y mente, el Buda por fin nos reveló su Verdadero Dharma y nos reveló que sus enseñanzas primitivas (Hinayana) eran solo medios hábiles, para niños, en lo que estabamos listos para recibir su Ley o Dharma Eterno, y con el mismo, pudiéramos emprender en nuestra misión como Bodhisattvas. Ahora, el Buda, si bien sigue siendo nuestro Padre y Maestro, ahora es también nuestro Soberano, pues su Voluntad es la que guía nuestros pensamientos, palabras y acciones en el mundo. Finalmente, cerca del final de su vida terrenal, el Buda pudo trascender el ser nuestro Padre, Maestro y Soberano (aunque lo sigue siendo). Con su revelación del Sutra del Loto finalmente pudo cumplir su voto de "hacer a todas las personas iguales a mí, sin distinción alguna entre nosotros" (Sutra del Loto 2). Es por eso que en el Sutra del Loto el Buda dice que su Verdadero Dharma es una enseñanza que "solo puede ser entendida y compartida entre Budas"  (Sutra del Loto 2).

Otra de las enseñanzas e implicaciones de esta revelación es que el Buda Eterno es la Energía de Vida de la cual emana todo en el Cosmos. El surgimiento, mantenimiento y disolución del Cosmos, aunque sigue la fuerza natural e impersonal del Karma, y es realizado por agentes divinos (dioses) que encarnan estas fuerzas, es la manifestación del Samadhi del Buda Eterno. Así, el Bodhicitta, el Deseo de Alcanzar el Despertar, es el movimiento dinámico (dualidad y multiplicidad) en la Unidad Fundamental. Esto es revelado en este capítulo, cuando el Buda continúa diciendo:

"Cuando los seres ven el final del eón
Y están devastados por el gran fuego,
Mi Tierra Pura de la Luz Serena es pacifica y segura,
Siempre llena con dioses y humanos,
Jardines y bosques, salones y pabellones,
Y adornos variados y preciosos.
Hay árboles enjoyados con muchas flores y frutos
Donde los seres vivientes viajan en delicia.
Los dioses tocan tambores celestiales,
Produciendo siempre diferentes clases de música,
Y flores Mandaravas
Son esparcidas sobre el Buda y la gran asamblea.
Mi Tierra Pura no es destruida,
Sino que las multitudes la ven quemándose enteramente."

Así, todo surge en la Mente Universal (Alma) del Buda Eterno. Este Mundo de la Dualidad (Samsara) es solo una manifestación del Mundo de la Budeidad (Nirvana). Dado a que las manifestaciones desconocen esto - por su Ignorancia Fundamental, que es un producto natural del proceso del Cosmos. La Ignorancia Fundamental (D:CB-C5.V.3) es la ilusión más profundamente arraigada e inherente a la vida, la cual da a lugar a todas las demás ilusiones. La palabra "Ignorancia" en este sentido significa incapacidad para ver o reconocer la Verdad, particularmente la Verdadera Naturaleza de la Realidad y de la vida de uno. Es por eso que el Alma del Cosmos se manifiesta como "Budas", seres "Despiertos" quienes nos ayudan a reconocer nuestra Verdadera Naturaleza, y así, a aliviar nuestro sufrimiento y ayudar en el proceso del Despertar del Cosmos (D:CB-C5.V.5). Esto es revelado en Sutras como el Sutra Avatamsaka, y lo tocaremos con más detalle posteriormente.

Ahora, al final de este capítulo, el Buda reitera nuevamente cuál es el Verdadero Voto Primal del Buda Eterno, y por ende, de todos los Budas y Bodhisattvas en el Cosmos y las tres existencias:

"Yo hablo varios Dharmas para sus beneficios
Y para salvarlos en una manera apropiada.
Yo siempre estoy pensando,
'¿Cómo puedo causar que los seres sintientes
Entren en el Camino Insuperable
Y rápidamente perfeccionen el cuerpo de un Buda?'"

En resumen, el Buda Eterno es el Alma del Cosmos mismo. El Buda Eterno, quien desde el principio del tiempo enseña y guia todas las criaturas sintientes, apareció en varios lugares (universos, tierras y mundos) en forma de cuerpos duplicados como manifestaciones (Sambhogakayas o Cuerpos Emanados y Nirmanakayas o Cuerpos Encarnados) del estado original (Dharmakaya o Cuerpo del Dharma). De igual forma, todos los seres vivos están sostenidos por una gran vida original. Así, la existencia fundamental del Cosmos es el Buda Eterno, y como una manifestación de su Voto Primal, todos los seres y todo en el universo se encuentra en vías al Despertar.

Este es el Verdadero Voto Primal. Es gracias a este Verdadero Voto Primal que el Buda aparece en los mundos y predica el Dharma para la salvación de todos los seres sintientes, emanando infinitos Budas, Bodhisattvas y deidades, y asumiedo infinitas formas y diversos nombres, todo para encaminarnos al Despertar. Solo en este mundo, el Buda legó 84,000 enseñanzas, cada una con infinitos significados, pero todos estos se encuentran solo en la Tradición del Loto del Verdadero Budismo.

Con esto, vemos que el Verdadero Budismo se basa en el Voto Primal del Buda, y continúa el linaje y la misión original del Buda en el mundo al no solo mantener su Verdadero Dharma Correcto, sino en mantenerlo intacto y adaptarlos a los seres sintientes. El Voto Primal es la manifestación del Cosmos y el trabajo dinámico de la energía y conciencia del Buda Eterno, la cual ha existido desde el pasado infinito y apareciendo en muchas formas a lo largo de los siglos, guia y apoya a los seres para la realización plena de sus vidas y el reconocimiento de su Unidad Fundamental, para que puedan colaborar en el Despertar del Cosmos. Con esto, vemos que la forma más noble de la práctica budista es el Camino del Bodhisattva - aquellos que se dedican a alcanzar la Iluminación, realizando (encarnando) el Voto Primal del Buda Eterno no solo para ellos sino para todos los seres, y hacer de este mundo una Tierra Pura.