Desde el principio de su establecimiento en la Tierra, la Sangha - la Orden Monástica - se ha encargado de preservar el Dharma Eterno del Buda, y por el bienestar de sus miembros laicos y de todos los seres sintientes. No obstante, esta encomienda - dada por el Buda mismo - no siempre fue realizada de la manera correcta, lo que dio como resultado la Gran División (Hinayana - Mahayana) a principios del Siglo I EC. No obstante, el Verdadero Dharma fue preservado por un grupo dentro de la Tradición del Loto. La Tradición del Loto mantuvo no solo la tradición, sino la ortodoxia ("correcta doctrina"), asegurándonse de que la misma fuera pasara a la posteridad. Cuando indagamos el corazón de la Tradición, con sus doctrinas, enseñanzas y prácticas, encontramos los Dogmas.
Las Fuentes de los Dogmas Budistas
¿Cuáles son las fuentes de los dogmas? Las fuentes de los dogmas son las Escrituras Sagradas, la Tradición. Estos dogmas no son fabricados por un grupo de individuos, sino que se basan en el consenso encontrado en el Canon y la Tradición, y son preservados por la Orden (sacerdotes budistas). Las verdades encontradas en las Escrituras Budistas dentro del Canon y la Tradición Budista, armoniosamente unidas, forman los Dogmas Budistas.
Las Escrituras Sagradas del Canon Budista
Las Escrituras Sagradas Budistas se encuentran en el Canon Budista de Doce Divisiones, que incluye principalmente (en Jerarquía de la Verdad) los Sutras o sermones del Buda, los cuales por el Poder del Buda fueron pasados oralmente hasta que fueron compuestos por inspiración iluminada en lo que hoy llamamos Sutras. El Canon Budista más completo es el Taisho Tripitaka, el cual consta de 5,320 textos dentro de 85 volúmenes. Estos textos fueron inducidos y aceptados y ratificados conciliarmente dentro del Canon Budista por su autoridad, ya que fueron revelados por el Buda mismo, poseen una importancia universal, mantienen una ortodoxia y gozan del reconocimiento de la Tradición Budista. el Canon Budista también contiene el Vinaya o el Código de Conducta, y los Shastras o los Tratados de los Grandes Maestros. Por todo esto, Canon Budista es la Palabra Sagrada del Buda (Textos Sagrados Budistas), la Fuente Primaria de la Fe Budista, el Fundamento de la Tradición y la Tesorería del Dharma y el Banco de la Fe.
La Tradición Budista
La Tradición Budista es la tradición - por sucesión discipular y ortodoxa - que fue establecida en la Tierra por el Buda para preservar y pregonar su Enseñanza. La Tradición Budista posee Tres Eras: la Era de los Discípulos, quienes transmitieron oralmente los Sutras y los compusieron; la Era de los Grandes Maestros, quienes tradujeron, interpretaron e inculturaron las enseñanzas budistas por toda la India y el resto de Asia hasta su eventual culminación en el Siglo VI en la escuela Tientai (Tendai) en China, y su posterior perfección en el Siglo VIII en la escuela Tendai en Japón; y la Era de la Orden, compuesta por los sacerdotes y monjas budistas, quienes tienen la tarea de preservar, transmitir y atemperar el Dharma (de manera tradicional y ortodoxa) a los tiempos. La Tradición Budista incluye el Canon Budista, así como los Símbolos de la Fe, las Liturgias, las Ceremonias y Rituales, la Historia del Budismo, los Tratados y Escritos de los Grandes Maestros (los cuales explican con precisión las enseñanzas y crean un lenguaje unitario, y las hacen accesibles a la Comunidad Budista; no obstante, hay que distinguir a veces las doctrinas de las opiniones personales), y la vida misma de la Sangha.
Así, la Traidición Budista está compuesta realmente por el Mensaje (Legado Completo y Perfecto), el Testamento (Voluntad) y la Intención del Buda en la Tierra, pasada por sus Discípulos a los Grandes Maestros, y de ellos, a la Orden (sacerdotes budistas). Esto distingue la Tradición real (con "T" mayúscula) de las tradiciones budolódicas, disciplinarias, litúricas y devocionales que han surgido a través del tiempo (tradiciones con "t" minúscula) - las denominaciones budistas. A diferencia de estas, la Tradición Budista real, que es de origen iluminado, completa y perfecta, es la verdadera custodia del Dharma Eterno del Buda, transmitiendo el Dharma de forma completa e ininterrumpida, adaptándolo a los tiempos y las circunstancias, siguiendo el ejemplo del Buda. Por todo esto, podemos concluir que la Tradición Budista es la verdadera enseñanza y práctica budista que puede ser trazada al Buda, y que ha sido preservada ininterrumpida de forma completa, unida y armónica, hasta nuestros tiempos.
La Necesidad de los Dogmas Budistas
El Budismo, desde sus inicios, posee dogmas. Los Dogmas son un conjunto de principios establecidos por el mismo Buda en su Dharma, así como por la Tradición Budista, como indiscutiblemente verdaderos a través del tiempo. Una verdad exige la respuesta de la fe si es revelada por el Buda y la Tradición Budista la ha definido infaliblemente como tal. Los Dogmas se diferencian de las Doctrinas, o las enseñanzas e interpretaciones doctrinales características de una denominación budista en particular. Por lo tanto, un dogma es cualquier verdad que la Tradición Budista ha definido infaliblemente como contenida en la revelación dhármica, es decir, parte de la Tesorería del Dharma transmitido a la Sangha por el Buda, sus Discípulos y los Grandes Maestros. Lamentablemente, con el pasar del tiempo, estos dogmas fueron ignorados o malinterpretados, siendo incluso negados, especialmente en la Era Final del Dharma, el tiempo en el cual vivimos. En la Era Final del Dharma en la cual vivimos, el ser tradicional y ortodoxo es ser radical.
Al momento, ninguna denominación ha promulgado explícitamente sus dogmas. No conocer los Dogmas Budistas hace que los mismos budistas no conozcan las verdaderas enseñanzas del Buda, creando distorsiones y herejías, así como el relativismo, el falso consenso, el indiferentismo doctrinal, o negar su existencia. El desconocimiento de los Dogmas Budistas son la fuente de las divisiones dentro de la Sangha Universal, así como de las herejías, el sincretismo y el "Humanismo Budista"; todas desviaciones del Verdadero Budismo.
Solo existe Un Solo Budismo (Ekayana), el Verdadero Budismo, el cual es Perfecto y Completo, y todas las denominaciones budistas son reflejos e interpretaciones imperfectas e incompletas del mismo. Por ello, aquí solo pretendemos presentar los Dogmas Budistas que deben ser comunes a todas las denominaciones budistas (desde el lente de la escuela Tendai japonesa). Estos son la Base de la Budología Dogmática, lo que nos permite distinguir las verdaderas doctrinas, enseñanzas y prácticas budistas de las herejías (la negación, la desviación y el sincretismo).
Como un templo budista tradicional y ortodoxo en la Tradición del Loto de la escuela Tendai, comprometidos con el Dharma del Buda Eterno, la Tradición y la Orden Budista, nuestra comunidad se une por una historia y un conjunto específico de enseñanzas y prácticas fundamentales para nuestra tradición, las cuales se centran en el Canon Budista y en la Tradición Patriarcal, y se recogen en el Credo Budista y el Catecismo Budista. Sobre estas bases, declaramos nuestras verdades indiscutibles, nuestros Dogmas Budistas:
Dogmas Budistas
El Buda – El Salvador
1. Solo existe un Buda, el Buda Eterno.
2. El Buda Eterno es la Fuente de todos los Budas en las Diez Direcciones y los Tres Tiempos.
3. Todos los Budas representan diferentes aspectos de la Mente Iluminada del Buda Eterno.
4. El Buda Eterno es el objeto de devoción de la Religión Budista.
5. El Buda Eterno es nuestro Padre Espiritual.
6. Todos los seres son hijos del Buda Eterno.
7. El Buda Eterno es el Tathagata, Eterno, Santo, Perfecto, Único, Indivisible, Incomprensible, Omnipresente, Omnibenevolente, Omnisciente, Omnipotente, Inmutable, Veraz, Providente, Salvador.
8. El Buda Eterno se puede manifestar de infinitas formas.
9. Todas las manifestaciones del Buda Eterno realizan su Providencia y Voluntad en el Cosmos.
10. Tanto el Cosmos como todos los seres son manifestaciones de una Sola Vida, la Talidad (Tathata), el Buda Eterno - la Realidad Última.
11. El Buda Eterno es Trascendente (Cosmos) e Inmanente (Naturaleza Búdica).
12. El Buda Eterno posee las Cuatro Cualidades Iluminadas de Felicidad, Eternidad, Pureza y Verdadero Ser.
13. Todo el Cosmos (Dharmadhatu) emana del Samadhi del Buda Eterno; el Buda Eterno no es creador.
14. El Buda Eterno posee Tres Cuerpos: el Cuerpo del Dharma (Dharmakaya), el Cuerpo Emanado (Sambhogakaya), y el Cuerpo Encarnado (Nirmanakaya), y estos son consubstanciales, indivisibles y triunos.
15. El Dharmakaya, el Cuerpo del Dharma, es el Cosmos, y a su vez, la Personalidad (Satya-Atman) del Buda Eterno.
16. El Dharmakaya posee dos aspectos inseparables: el Dharmakaya Impersonal (Cosmos), y el Dharmakaya Personal o Dharmakaya Hábil (todos los Budas).
17. Tanto el Dharmakaya Impersonal como el Dharmakaya Personal o Hábil se comunica con los seres.
18. El verdadero objeto de devoción, el Verdadero Refugio Budista, es el Dharmakaya – el Buda Eterno.
19. El Buda Eterno, en su infinita misericordia se compadece por todos los seres y se manifiesta ante ellos, revelando su Dharma.
20. El Sambhogakaya, el Cuerpo de Emanación, es la forma en la cual el Buda Eterno se presenta a los seres espiritualmente en el Cosmos.
21. El Nirmanakaya, el Cuerpo Encarnado, es la forma en la que el Buda Eterno encarna en los mundos y se presenta físicamente a los seres en el Cosmos.
22. El Cuerpo Encarnado asume la forma de los seres en los mundos y se comunica con los seres usando su lenguaje, de acuerdo con sus necesidades, capacidades y naturalezas.
23. El Buda Eterno hizo un Voto Primal de salvar a todos los seres sintientes de la Ignorancia y el sufrimiento y llevarlos al Despertar, la salvación de la rueda interminable de nacimientos y muertes del Samsara.
24. El Buda Eterno se manifestó en este mundo como el Buda Shakyamuni hace 2,500 años en la India.
25. El Buda encarnó en este mundo para revelarnos su Persona, su Dharma (Enseñanza) y establecer su Sangha (Comunidad) y salvar a todos los seres de la Ignorancia y del sufrimiento.
26. El Buda tuvo que aparecer en el mundo para eliminar la Oscuridad de la Ignorancia y otorgarnos la salvación.
27. El Despertar del Buda Shakyamuni en el mundo hizo posible nuestro Despertar.
28. El Buda Shakyamuni profetizó el Despertar de todos los seres, por lo que nuestra salvación está asegurada.
29. El Buda Shakyamuni no murió (Parinirvana). Tras su aparente muerte, su Espíritu se mantiene en el mundo en su Gracia, en su Dharma y en su Sangha.
El Dharma – La Enseñanza
30. El Buda reveló su Dharma Eterno gradualmente en su Plan Dhármico de Salvación, su Vehículo Único (Ekayana), de lo provisional a lo esencial, perfecto y completo.
31. Solo existe Un Budismo, el Vehículo Único (Ekayana); la Verdad, manifestada de muchas formas por el uso de los Medios Hábiles. Este es el Verdadero Budismo, unitario, orgánico y armónico.
32. Los Tres Vehículos son solo uno, el Vehículo Único de la Budeidad.
33. Todas las denominaciones budistas derivan del Verdadero Budismo, el Vehículo Único, en diferentes grados e interpretaciones, por lo que mantienen una herencia compartida.
34. El Dharma Eterno del Buda se encuentra en las Doce Divisiones del Canon Budista.
35. El Canon Budista contiene las Palabras Sagradas del Buda, en su Jerarquía de la Verdad.
36. La primera Revelación del Buda Eterno se encuentra en el Sutra Avatamsaka, su Legado en el Sutra del Loto, y su Testamento se encuentra en el Sutra del Nirvana.
37. La enseñanza máxima del Buda Eterno se encuentra en el Sutra del Loto.
38. El Dharma Eterno del Buda recopilado en el Canon Budista es Autoritativo, Inerrante, Necesario y Suficiente. No hay Revelación posterior al Canon Budista.
39. El Dharma Eterno del Buda fue recopilado por sus Discípulos y se interpreta por medio de la Tradición y la Orden Budista.
40. Todas las Enseñanzas y Prácticas Budistas conducen a los seres gradualmente al Despertar.
41. El Dharma Eterno del Buda pasa por Tres Eras: la Era del Dharma Correcto o Primer Día de la Ley (Saddharma - Shobo); la Era del Dharma de la Semblanza o Día Medio de la Ley (Pratirupadharma - Zobo); y la Era Final o de la Degeneración del Dharma o el Ultimo Día de la Ley (Pashchimadharma - Mappo). No hay otras eras hasta el Advenimiento de Maitreya.
42. Actualmente nos encontramos en la Era Final del Dharma (Mappo), donde el mundo está lleno de divisiones, corrupciones y falsas enseñanzas, y surgen los Tres Obstáculos y Cuatro Enemigos.
La Sangha – La Comunidad
43. El Buda Eterno fundó la Sangha, su Comunidad, en el mundo, y es Una, Iluminada, Universal y Discipular.
44. La Sangha es el Cuerpo del Buda en el Mundo, compuesta por la Cuádruple Asamblea de monjes, monjas, así como de devotos laicos y laicas.
45. No hay distinción esencial entre los integrantes de la Cuádruple Asamblea, sino en expectativas, función y grados de autoridad; sin embargo, son mutuamente complementarios dentro de la comunión de la Sangha.
46. La Orden Budista, compuesta por monjes y monjas formados y ordenados por una tradición legitima e histórica, tradicional y ortodoxa, en comunión con el Verdadero Dharma, son los Representantes del Buda.
47. El Buda, el Dharma (Enseñanza y Tradición) y la Sangha (Iglesia - Orden Budista y los Laicos) son los Tres Tesoros del Budismo.
48. Al Tomar Refugio en los Tres Tesoros, una persona renace en la Familia del Buda.
49. Los Tres Tesoros son triunos e indivisibles.
50. Todo budista debe pertenecer a una Sangha tradicional, ortodoxa y en comunión con el Verdadero Dharma.
51. La Sangha Eterna, compuesta por los Bodhisattvas, es la expresión del Dharma y su acción en la Tierra, y son los ojos, los oídos, la boca y las manos del Buda en el mundo.
La Condición Humana
52. Toda vida humana es digna, única e irrepetible, por lo que es preciosa y sagrada.
53. Todos los seres nacen en Ignorancia Fundamental, desconociendo su Verdadera Naturaleza.
54. Todos los seres poseen el Espíritu del Buda, su Naturaleza Búdica (Buddhata - Tathagatagarbha), su Verdadero Ser (Atman), el cual es uno e indivisible con el Buda Eterno, nuestra Verdadera Naturaleza. El Verdadero Ser (Atman) es verdadero, permanente, virtuoso, eterno, puro, pacífico, soberano, autónomo, inmutable, incorrupto.
55. Dado a que todos los seres poseen el Espíritu del Buda y proceden de su Esencia, todos están Iluminados Originalmente, pero esa Verdadera Naturaleza es ocultada por la Ignorancia Fundamental y el mal Karma.
56. La Naturaleza Búdica es eterna, luminosa, incambiable, impoluta e incorruptible.
57. Todos los seres sintientes poseen la capacidad de alcanzar el Despertar, su Budeidad Innata.
58. El ser individual es un agregado de Cinco Skandhas, Nueve Consciencias y la Naturaleza Búdica (Atman).
59. Los seres nacen puros (Naturaleza Búdica), pero la Ignorancia Fundamental y el mal Karma cubren esta pureza.
60. Dado a que nacemos con la Ignorancia Fundamental, creamos mal Karma. Todo mal proviene del corazón y la mente de los seres. Pero todos los seres tienen la posibilidad de cambiar y evolucionar espiritualmente.
61. Los seres crean Karma por medio de sus pensamientos, palabras y acciones.
62. La Ignorancia y el mal Karma crean sufrimiento, lo que perpetúa la Rueda del Samsara.
63. Podemos purificar nuestro mal Karma por medio del Arrepentimiento, la Práctica Budista, el Trabajo del Bodhisattva, y por medio de la Gracia del Buda Eterno.
64. El acumular buen Karma nos conduce a mejores estados de existencia y a acumular virtudes y méritos, acercándonos a nuestro Despertar y Budeidad.
65. La vida es eterna, el ser individual no. Tras la muerte, los Skandhas se disuelven y el Karma pasa a otra vida.
66. Renacemos tras la muerte a otra vida de acuerdo con nuestro Karma y la Gracia de los Budas.
67. Podemos renacer en una de las infinitas dimensiones dentro de los Seis Reinos del Samsara o en una Tierra Pura.
68. Cada uno de los Seis Reinos del Samsara son impermanentes; ni el Cielo ni el Infierno son eternos.
69. El Buda Eterno otorga su Gracia equitativamente y trabaja incansablemente por la salvación de todos los seres.
70. El buen Karma de los seres, unido a sus méritos, virtudes y la Gracia del Buda, nos conducen eventualmente al Verdadero Dharma, y con ello, a nuestra salvación.
El Mundo
71. Todo el Cosmos, el Triple Mundo y las Tierras Puras, son una sola Realidad, un solo mundo, el Reino Dhármico (Dharmadhatu), el Samadhi del Buda Eterno, emanando de su Esencia.
72. Las Deidades Benevolentes y los Protectores del Dharma son fuerzas que asisten al Buda Eterno en su obra salvífica por todo el Cosmos.
73. El deseo, así como las fuerzas malignas, mantienen a los seres atrapados en la Ignorancia en el Samsara.
74. El Cosmos se forma de acuerdo con el Karma, la Ley de Causa y Efecto, determinando los mundos, sus condiciones, sus seres y sus circunstancias.
75. Dado a que todo emana de una sola Fuente, todo está interconectado; todo es interdependiente.
76. El Samsara (Reino Saha) y el Nirvana (Reino de la Iluminación) provienen de la Talidad (Tathata) o Vacuidad (Sunyata); son dos manifestaciones indivisibles de la misma Esencia.
77. Las Tierras Puras son otra manifestación hábil de la Talidad (Tathata).
78. El Samsara está caracterizado por el Sufrimiento, la Impermanencia, la Impureza y el Falso Ser (No-Ser).
79. El Nirvana está caracterizado por la Quietud, la Felicidad, la Eternidad, la Pureza y el Verdadero Ser.
80. No hay división entre el mundo y la vida mundana (Samsara) y el mundo y la vida espiritual (Nirvana); es una cuestión de grados y énfasis (intención).
81. La aparición y encarnación del Buda Eterno en el mundo, como el Buda Shakyamuni, representa la total unidad indivisible entre el Samsara (carne) y el Nirvana (espíritu).
82. Podemos experimentar el Nirvana y las Cuatro Cualidades Iluminadas de la Felicidad, la Eternidad, la Pureza y el Verdadero Ser en medio del Samsara, como una persona común y corriente que posee deseos terrenales, por medio de la Fe, el Estudio y la Práctica Budista.
El Camino Budista y la Salvación
83. El Budismo es una Religión, aunque también es una Filosofía y un Estilo de Vida; indivisibles y complementarios.
84. Los Tres Pilares del Budismo son la Fe, el Estudio y la Práctica. Estos son la base del Camino Budista.
85. La Fe, el Estudio y la Práctica nos permiten comulgar con el Buda, vivir el Dharma y manifestar nuestra Naturaleza Búdica.
86. El Camino Budista comienza con el Bodhicitta, el Deseo de Alcanzar el Despertar por el Bien de Todos los Seres Sintientes, y la Toma de Refugio.
87. El Bodhicitta y la realización de la Voluntad del Buda en el mundo nos convierte en Hijos del Buda, Bodhisattvas.
88. El Bodhicitta es acompañado por el Voto del Bodhisattva, donde el ser hace uso de sus carismas para realizar la Voluntad del Buda en el mundo.
89. Todas las prácticas budistas son complementarias y nos ayudan a manifestar nuestra Budeidad Innata.
90. Los Mandamientos o Preceptos Budistas (Sila - No Matar, No Robar, No Mentir, No Abusar de la Sexualidad y No Abusar de Intoxicantes) y las Virtudes Budistas (Paramitas - Caridad, Moralidad, Esfuerzo, Paciencia, Meditación y Sabiduría) son nuestra guía en la vida.
91. Comulgamos con el Buda Eterno por medio de la Meditación y el Sagrado Nombre (Nembutsu), revelando nuestra Naturaleza Búdica.
92. Los Sacramentos Esotéricos, como el Goma, por medio de la Gracia del Buda Eterno y la intercesión del monje budista, nos permiten eliminar todos los obstáculos en nuestro Camino al Despertar.
93. Manifestamos nuestra Budeidad Innata cuando pensamos, hablamos y actuamos de acuerdo como el Buda Eterno.
94. Podemos alcanzar nuestro Despertar y nuestra Budeidad en esta vida y en este cuerpo.
95. Tanto la Gracia como las Buenas Obras son necesarias para nuestra Budeidad; es un proceso sinergético.
96. Los Bodhisattvas no trabajan por su propia salvación, sino por la de todos los seres sintientes.
97. Los Bodhisattvas comparten y transfieren todos sus méritos con todos los seres sintientes.
98. La fuerza del voto del Bodhisattva mantiene cohesión y virtudes de vida en vida, trascendiendo la muerte.
99. El Bodhisattva actúa con sabiduría y compasión, haciendo uso de los medios hábiles, trabajando para la salvación de todos los seres en el mundo.
100. El Verdadero Budismo no rechaza el mundo, sino que lo afirma, y se compromete a trabajar en el mismo para revelar su Verdadera Naturaleza – la Tierra Pura, y establecer el Reino del Buda en el Cosmos.
* Estos Dogmas Budistas no reflejan necesariamente los dogmas y doctrinas de la escuela Tendai en Japón, sino que son los Dogmas Budistas encontrados en el Canon y la Tradición, por lo que son los profesados por el Templo Tendai de Puerto Rico y su Sangha Hispana.