Bienvenido a la Tierra Pura de la Luz Serena, un recurso sobre el Verdadero Budismo (一乘佛教), y sus posteriores ramificaciones, a la luz de las Enseñanzas Perfectas y Completas (圓教). Aquí presentamos el Budismo como religión, filosofía y estilo de vida, con énfasis en la Teología Budista (Budología), aspirando a presentar el Budismo balanceadamente entre la academia (estudios budistas) y la devoción, desde el punto de vista de una escuela tradicional de Budismo japonés (Tendai-shu 天台宗) y las enseñanzas universales del Sutra del Loto (法華経).


jueves, 16 de diciembre de 2021

La Tesorería del Dharma de las Enseñanzas Perfectas y Completas: Las Enseñanzas del Shoshikan - Capítulo 1: Las Condiciones Externas (2)

El Shoshikan (Hsiao Chih-kuan), que se puede traducir como la "El Pequeño Tratado de la Calma y la Contemplación", fue uno de los primeros tratados de meditación jamás escritos. El mismo fue compuesto por el Gran Maestro Chih-i (Tendai Daishi), el fundador de la escuela Tientai (Tendai) en China. La escuela Tientai rescató el verdadero propósito y mensaje del Buda para el mundo, el cual había sido olvidado o ignorado por los eruditos budistas por siglos, y con ello, influyó enormemente el desarrollo del Budismo Mahayana en el Este de Asia. Este tratado fue un pequeño libro escrito por el Gran Maestro Chih-i para resumir los puntos importantes para la práctica de la meditación budista tradicional de Shikan, o Samatha y Vipassana. En esta serie de Lecturas estudiaremos extractos del Shoshikan del Gran Maestro Tendai y veremos cuáles son sus implicaciones para nuestra práctica budista y nuestra vida diaria.

En la pasada entrada, vimos la primera de las Cinco Condiciones o cosas que debemos de hacer y mantener para poder practicar la meditación correctamente. Ahora, veamos detalladamente las otras cuatro.

 "(2) La segunda condición externa que uno debe poseer si uno desea tener éxito en la práctica del Dhyana, se refiere a la ropa y la comida. Debemos considerar la ropa a partir de tres puntos. (a) Si tenemos la fortaleza para soportar los elementos, debemos seguir el ejemplo de los grandes maestros de las montañas del Himalaya y poseer solo una sola prenda, apenas suficiente para cubrir la propia desnudez. (b) Si nos movemos en el mundo como los monjes itinerantes, debemos seguir el ejemplo de Mahakasyapa y limitar nuestras prendas a tres, hechas de prendas viejas y desechadas. (c) Si vivimos en países fríos, se nos permite tener una prenda extra. En cuanto a un centenar de otras cosas que parecen ser necesarias, se nos permite retener una sola y estar satisfechos con eso. Si permitimos que nuestras mentes se vuelvan avariciosas por muchas cosas, nuestros pensamientos serán perturbados y las muchas cosas se convertirán en un obstáculo para alcanzar la Iluminación."

La segunda de las Cinco Condiciones para la Meditación del Shoshikan es la ropa y la comida. Sobre la vestimenta, el Gran Maestro Chih-i nos recomienda usar ropa cómoda, pues de lo contrario, la incomodidad de la vestimenta nos puede distraer de nuestra meditación. 

Sobre el comentario en torno a los tres puntos, Chih-i se dirige a los monjes. De antaño, los monjes budistas acostumbraban a vestir ropas simples, y sus kesas o mantos de ordenación estaban hechos de piezas de ropa descartada. Cuando el Budismo llegó al Este de Asia, al no continuar la tradición de mendicación - pues el gobierno de los pasíses asiáticos criticaban al Budismo por corromper la familia y la sociedad, al abogar por el abandono del hogar y la medicación - los monjes tuvieron que cultivar su propia comida y vestir ropas dignas de una religión mundial concernida con la salvación universal. Además de esto, el Budismo era controlado por el estado, y servía a la corte y el gobierno. Es por ello que ahora en muchos países como en Japón, los monjes vistan ropas finas y elaboradas. No obstante, es importante que la orden monástica no pierda la mente del Bodhi y no se corrompan.

Pero la atención al control y moderación de la ropa y comida nos llama a tener atención y cuidado con nuestros hábitos de consumo en general y nuestro apego a los bienes materiales. En fin, debemos ser conscientes en todo momento y tratar de practicar el Camino Medio.

"A continuación, en lo que se refiere a la alimentación, hay cuatro maneras de vivir. (a) El primer camino es el camino seguido por los grandes maestros de las altas montañas, que viven de hierbas y frutas estacionales. (b) El segundo camino es el camino seguido por los monjes itinerantes que viven mendigando sus alimentos y que son capaces de resistir la tentación de vivir por los cuatro caminos equivocados, a saber, que trabajan para otros por paga, que viven de la astrología prediciendo los cambios y los efectos de los cuerpos celestes en los asuntos humanos, por la geomancia y la adivinación, y finalmente por la adulación y la dependencia de los ricos y los poderosos. El peligro de estas formas de vida equivocados ha sido descrito por Shariputra. (c) La tercera manera correcta de vivir es vivir en un lugar aislado y depender de la fe y las donaciones de los laicos generosos. (d) La cuarta forma de vida correcta es unirse a alguna hermandad y participar en la vida comunitaria. Si estamos viviendo en cualquiera de estas cuatro formas de vivir, tendremos toda la comida y la ropa necesaria. ¿Qué significa esto? Esto significa que si nos falta alguna de estas buenas condiciones, nuestra mente no permanecerá en la quietud pacífica y será un impedimento para alcanzar la Iluminación."

El mismo Gran Maestro Chih-i reconoce que sin ropa y comida no podemos practicar la meditación y avanzar en nuestro camino al Despertar. Es por ello que se permite pedir bienes materiales para nuestro sustento a los Budas, Bodhisattvas y deidades, porque los mismos son necesarios para realizar el trabajo del Bodhisattva en el mundo.

En la antiguedad, al igual que con las ropas, los monjes budistas mendicaban, y esta era una tradición elogiada y apoyada fuertemente en la India. El Budismo no tuvo la misma suerte en el Este de Asia, donde las otras religiones y filosofías - y el Estado - veían al Budismo como una religión foránea, en contra de los valores de la familia y la sociedad, pues abogaba por una vida de abandono de la familia y la medicación. Para poder sobrevivir y esparcir le Dharma - de lo contrario, sería prohibida por el Estado (ilegal) y perseguida, como sucedió muchas veces - el Budismo tuvo que adaptarse. Esto es parte de la ley de la impermanencia. Con ello, los monjes dejaron de mendicar y comenzaron a cultvar su propia comida en los predios del templo, y con ello, llegaron incluso a contribuir benéficamente a la sociedad y los más necesitados. 

Hoy día, los monjes budistas japoneses, desde el periodo Meiji, trabajan en oficios seculares, y con ello, mantienen sus templos, sin depender mucho en las donaciones. Esto es mucho más cierto en Occidente. 

Referente a la dieta budista, no es necesario ser vegetarianos. Si bien este es el modo de vida seguido y exhortado por Chih-i, en realidad, históricamente, el mismo Buda, ni su orden original, fue vegetariano. Como mendicantes, debían recibir y comer todo lo que le sirvieran. De hecho, se cree que el Buda murió (pasó al Parinirvana, dando la idea de morir) gracias a carne de cerdo en mal estado dada por un donante laico.

Lo importante es comer balanceadamente y solo para abastecernos; ni mucho, ni poco, siguiendo el Camino Medio. Como hemos visto, si bien no existen reglas estrictas y rápidas sobre lo que debe comer y cuánto tiempo debe pasar antes de meditar, existen algunas pautas generales que debe seguir. Las comidas grandes y pesadas pueden causarle somnolencia, especialmente cuando tienen un alto contenido de carbohidratos, así que coma algo ligero antes de sentarse a meditar y espere al menos una hora después de una comida importante. Incluso puede considerar seguir las pautas tradicionales budistas para comer hasta que esté lleno en dos tercios en lugar de llenarnos hasta la saciedad. Además, es mejor abstenerse de sustancias que alteran la mente (por ejemplo, café, alcohol, tabaco, marihuana y otras drogas recreativas) antes de meditar.

"(3) La tercera condición externa que uno debe poseer si uno desea tener éxito en la práctica del Dhyana, se refiere a la vivienda. La misma debe ser tranquila y debe de estar libre de molestias y problemas de ningún tipo. Hay tres tipos de lugares que son adecuados para la práctica del Dhyana: (a) una ermita en las montañas altas e inaccesibles. (b) Una choza digna de un mendigo o un monje sin hogar. Estos deben de estar por lo menos de una milla y media de un pueblo donde incluso la voz de un vaquero no alcanzaría y donde los problemas y la confusión no lo encontrarían. (c) Una cama en un monasterio apartado de la casa de un laico."

La tercera condición es la vivienda, o en nuestro caso, el lugar donde meditaremos. Como vemos, las pautas establecidad por el Shoshikan son básicas. No debemos de tomar al pie de la letra las recomendaciones establecidad por Chih-i para monjes en el Siglo VI. Debemos simplemente de buscar un lugar tranquilo y silencioso, y la temperatura no debe estar ni muy fria ni muy caliente. No debe haber ni mucha luz, ni tampoco debe estar en oscuridad. Es recomendado tener un altar budista o Butsudan con una imagen del Buda o Bodhisattva de nuestra predilección, encender unas velas y un incienso, y realizar un breve ritual o servicio antes de comenzar nuestra meditación. Igualmente, es recomendado tener un Zafu y un Zabuton, o un cojín de meditación cómodo y estable. Puedes igualmente tener una breve campana para señalar el comienzo y el final del periodo meditativo. 

Veremos más tarde instrucciones específicas sobre el proceso meditativo. Antes, veamos la cuarta condición.

"(4) La cuarta condición externa que uno debe poseer si uno desea tener éxito en la práctica de la meditación, se refiere a la libertad del enredo en todos los asuntos mundanos. (a) Significa librarse de compromisos condicionales y responsabilidades sociales. (b) Significa renunciar a todos los amigos mundanos, familiares e intereses mundanos. Esto significa cortar toda relación social. (c) Significa renunciar a todos los negocios mundanos, como artesanos, médicos, empleados, comerciantes, adivinos, etc. (d) Significa renunciar al estudio general, incluso tales como lectura, la escritura, las conferencias o libros, etc. ¿Por qué razón uno debe de alejarse de estas cosas? Es porque si estamos interesados ​​en estas cosas nuestras mentes no están tranquilas y libres para la práctica de la meditación y el logro de la Iluminación. Por otra parte, si nuestras mentes están perturbadas o cansadas ​​y no se encuentran en paz, uno no puede practicar la meditación."

La cuarta condición es estar en un ambiente y entorno propicio para la meditación, y que nuestro estilo de vida sea uno conductivo para nuestro progreso espiritual.

Esta es una de las condiciones menos entendidas, y tal vez una de las más importantes. Si tenemos buena comida, vestimentas, y tenemos preparado un lugar para meditar, y no tenemos un estilo de vida conductivo a nuestro progreso - y mucho más importante, una Sangha - lamentablemente, podemos retroceder en nuestro camino, no importa cuánto progreso hayamos alcanzado. Es por eso que Chih-i nos recomienda: (a) Librarnos de compromisos condicionales y responsabilidades sociales. (b) Renunciar a todos los amigos mundanos, familiares e intereses mundanos. Esto significa cortar toda relación social. (c) Renunciar a todos los negocios mundanos, como artesanos, médicos, empleados, comerciantes, adivinos, etc. (d) Renunciar al estudio general, incluso tales como lectura, la escritura, las conferencias o libros, etc. Aquí es donde muchos tenemos grandes problemas. 

Debemos de recordar que este breve manual fue escrito para monjes budistas en el Siglo VI. Ha pasado mucho tiempo desde su composición, y los tiempos, las circunstancias y las personas wue lo leen, con sus propias naturalezas, inclinaciones y necesidades han cambiado radicalmente desde entonces. Debemos atemperarlo a nuestras vidas modernas del Siglo XXI. Esta es la importancia de la doctrina de los Medios Hábiles o Upayas. Veámoslos uno a uno y tratemos de ver cómo podemos aplicarlos a nuestras vidas.

(a) Librarnos de compromisos condicionales y responsabilidades sociales - a diferencia de los monjes de antaño, ya sea que seamos monjes budistas japoneses o laicos, vivimos en medio de la sociedad, donde el Dharma más se necesita, con nuestras familias y nuestros trabajos mundanos. No podemos librarnos de ellos. Solo podemos sacar un periodo diario o semanal para poder estar en nuestro cuarto de meditación o en el templo y poder dedicarnos - temporarlmente "librarnos" - de nuestros compromisos y responsabilidades sociales, ya sea por 15, 25 o 30 minutos. Es importante no pensar en nada de eso, sino dedicarnos completamente a lograr el Samadhi, la concentración meditativa, y alcanzar la unión - la comunión - con nuestra Verdadera Naturaleza, nuestra Naturaleza Búdica, y con el Buda.

(b) Renunciar a todos los amigos mundanos, familiares e intereses mundanos. Esto significa cortar toda relación social; y (c) Renunciar a todos los negocios mundanos, como artesanos, médicos, empleados, comerciantes, adivinos, etc. - igual a la anterior, esto simplemente no es una opción, sino temporalmente, durante el priodo de meditación. Muy por el contrario, debemos de dedicarnos de lleno a nuestra práctica para ser mejores familiares, amigos y miembros de la sociedad, y realizar el trabajo del Bodhisattva en el mundo.

(d) Renunciar al estudio general, incluso tales como lectura, la escritura, las conferencias o libros, etc . - esta es una recomendación para los principiantes. Debemos recordar que después de todo, el Budismo Tendai que fundó Chih-i es una escuela dedicada balanceadamente al estudio y la práctica. Por ello, es importante leer, estudiar y asistir a conferencias del Dharma, pero no debemos de substituir nuestra práctica exclusivamente por el estudio. La recomendación va encaminada a no tratar de replicar las experiencias que leemos, pues todos somos diferentes. No debemos formar falsas expectativas. 

"(5) La quinta condición externa que uno debe poseer si uno desea tener éxito en la práctica de la medoitación, se refiere a nuestra asociación con la gente. Debemos tener una estrecha relación con tres clases de personas de mentalidad noble: (a) el primer tipo son los que están fuera de la hermandad que nos proveen de nuestra comida y ropa, y que son competentes en un buen cuidado de nosotros y en que nos protegen de molestias y problemas. (b) El segundo tipo de personas nobles son los miembros de nuestra hermandad con los que vivimos en la intimidad, tolerancia mutua y amabilidad. (c) El tercer tipo son nuestros profesores y maestros que nos enseñan y nos guían en el uso de los medios hábiles para cumplir ambas condiciones externas e internas, y nos ayudan a interesarnos y disfrutar de la práctica del Dhyana.

Finalmente, como una extensión de la cuarta condición, la quinta condición se refiere a con quiénes nos relacionamos. Aquí, el Gran Maestro Chih-i nos recomienda estar asociados y pertenecer a una Sangha. Como mencionamos anteriormente, la Sangha es la comunidad de sacerdotes (monjes y monjas) y de laicos creyentes que siguen y ponen en práctica las enseñanzas del Buda. Pero Sangha, en su concepción más amplia, son todos los seres sintientes en el Cosmos.

En la quinta condición, Chih-i incluye a los donantes de la Sangha, la comunidad que apoya el templo (danka), así como los miembros de la Sangha propiamente, quienes son como nuestros hermanos, y los monjes o maestros que nos transmiten y protegen las enseñanzas. 

La Sangha está compuesta por monjes y laicos que comparten los mismos valores espirituales y se ofrecen una fuente de apoyo unos a otros. Participamos e interactuamos con la Sangha para crecer. El mundo triple está en llamas. Estas llamas están compuestas de los deseos, las pasiones ciegas y el mal karma generado por todos los seres en el mundo. Pero a su vez, el mundo triple es un gran océano, donde nos hundimos vida tras vida, y emergemos nuevamente para renacer en mundo tras mundo, interminablemente, continuando el ciclo de transmigración del Samsara. Es por eso que junto con el Buda y el Dharma, nos refugiamos en la Sangha. Refugiarse en la Sangha significa que encontramos seguridad y fuerza en los compañeros que caminan por el mismo camino. Podemos volvernos hacia nuestra comunidad en momentos de necesidad, cuando necesitamos un consejo o simplemente cuando se siente como un puerto seguro para nosotros. Aunque el Budismo se ve a menudo como un camino solitario con la imagen de una persona meditando sola en un entorno aislado, la realidad dista mucho de ello. La Sangha es increíblemente importante. Aprendemos de nuestra Sangha, somos apoyados por la Sangha y podemos ofrecer apoyo y amabilidad a quienes nos rodean. 

La Sangha es la manifestación compasiva real y vívida - física - de la Gran Compasión del Buda en el mundo. Es por ello que como quinta condición indispensable para la práctica de la meditación, Chih-i nos recomienda ser parte de una Sangha.

"Esto concluye la discusión del control de las condiciones externas. Pasemos ahora a la discusión de las condiciones internas y cómo controlarlas."

Así, como vemos, el Gran Maestro Chih-i en el Shoshikan, al igual que en el Makashikan, nos dice que si seguimos los Preceptos a la mejor medida posible, arrepintiéndonos y enmendándolos cuando los rompemos, si tenemos control en nuestra comida y somos conscientes sobre nuestro deseos materiales y nuestra ropa, si preparamos un lugar de meditación adecuado, si dedicamos un tiempo específica y nos rodeamos de personas conductivas para nuestro desarrollo espiritual, podemos practicar adecuadamente la meditación.

En la próxima entrada, veremos qué el Gran Maestro Chih-i nos recomienda para controlar nuestras experiencias corporales, mentales y espirituales durante la práctica de la meditación.