Bienvenido a la Tierra Pura de la Luz Serena, un recurso sobre el Verdadero Budismo (一乘佛教), y sus posteriores ramificaciones, a la luz de las Enseñanzas Perfectas y Completas (圓教). Aquí presentamos el Budismo como religión, filosofía y estilo de vida, con énfasis en la Teología Budista (Budología), aspirando a presentar el Budismo balanceadamente entre la academia (estudios budistas) y la devoción, desde el punto de vista de una escuela tradicional de Budismo japonés (Tendai-shu 天台宗) y las enseñanzas universales del Sutra del Loto (法華経).


lunes, 29 de abril de 2024

El Espíritu del Buda: Las Enseñanzas de los Sutras Tathagatagarbha - El Sutra de la Unidad Fundamental 2

Entre los Sermones del Buda encontrados en el Canon Budista, encontramos una serie de discursos sobre el Espíritu del Buda innato en todos los seres, la Naturaleza Búdica. Al principio de su ministerio público, el Buda negó la existencia de un "Alma" (Atman) que fuera eterno, inmutable e independiente, para que sus discípulos pudieran desapegarse de sus conceptos erróneos de sí mismos y del mundo que imperaban en su época y puedieran abrir sus mentes y corazones para la Verdad. Sin embargo, durante el transcurso de su ministerio iluminado, y especialmente, en la década final de su vida en la Tierra, el Buda reveló que sí existe un Espíritu dentro de todos los seres, el cual es eterno, pero no separado del Todo, pues es uno con el Buda y con todos los seres sintientes. Este es su Espíritu, el Espíritu del Buda Eterno, que mora en el corazón de todos nosotros, y es gracias a ese Espíritu que los seres pueden alcanzar el Despertar y la Budeidad. Estos sermones dentro del Canon Budista se conocen como los Sutras Tathagatagarbha, que culminan con el último sermón dado por el Buda en este mundo, el Sutra del Nirvana.

Al escuchar la respuesta del Buda a sus preguntas, Shariputra, en nombre de todos nosotros, le pide al Buda que por favor clarifique y expanda sobre el Unico Reino (Ekadhatu), la Unidad Fundamental.

"Entonces Shariputrale preguntó al Buda: 'Honrado por el Mundo, ¿qué se entiende por 'el Unico Reino', cuando dijo: 'Debido a que los seres ordinarios ni conocen ni ven el Unico Reino de acuerdo con la verdadera Realidad, albergan visiones extremadamente malvadas y enormemente equivocadas en sus mentes, diciendo que el reino de los seres sintientes aumenta o que el reino de los seres sintientes disminuye.' ¡Muy bien! Honrado por el Mundo, este significado es demasiado profundo para que yo lo comprenda. Ruego que el Tathagata me explique, y que me haga comprenderlo'."

Como mencionamos en nuestro estudio del Sutra de la Naturaleza Búdica, por más que el Buda nos lo explique, y que yo lo comente, estas enseñanzas seguirán siendo un Misterio, que como dice el Buda en el Sutra del Loto (e implícitamente en este Sutra), solo puede ser comprendido entre Budas.

"Entonces el Honrado por el Mundo le dijo a Shariputra: 'Este profundo significado está en el reino de la sabiduría de un Tathagata y en el rango de acción de su mente. Shariputra, incluso usando su sabiduría, ningún Shravaka o Pratyekabuddha puede conocer, ver u observar un significado tan profundo. Mucho menos puede cualquier ser tonto y corriente comprenderlo. Sólo la sabiduría de los Budas puede conocer, ver y observar este significado. Shariputra, usando su sabiduría, todos los Shravakas y Pratyekabuddhas sólo pueden creer en este significado por fe, pero no pueden conocerlo, verlo u observarlo de acuerdo con la verdadera Realidad. Shariputra, este significado profundo es la verdad más elevada (Paramārtha), y la verdad más elevada es el reino de los seres sintientes. El reino de los seres sintientes es el Espíritu del Tathagata (Tathagatagarbha), y el Espíritu del Tathagata es el Cuerpo del Dharma (Dharmakaya). Shariputra, el Cuerpo del Dharma, como he explicado su significado, no está separado, ni desapegado, ni dividido, y no es diferente del mérito y la sabiduría de un Tathagata, ni del inconcebible Buddha Dharma, con enseñanzas más numerosas que las arenas del Ganges."

Aquí el Buda le dice a Shariputra que esta revelación es un Misterio que solo puede ser comprendido por Budas. Ni los Shravakas ni Pratyekabuddhas pueden comprenderlo; solo pueden acercarse a el mismo por medio de la fe. Si los discípulos más avanzados del Buda no pudieron comprenderlo en este sermón (solo lo llegan a casi totalmente comprender, aunque parcialmente, en el Sutra del Loto y el Sutra del Nirvana), ¿cómo podemos nosotros, "seres ordinarios", osar a creer que lo comprendemos?  Como dice el Buda, solo podemos acercarnos a ello, no comprenderlo, gracias a la fe, que no es otra cosa que gracias a la Gracia del Buda Eterno. El Buda nos dice que la existencia de su Espíritu en todos nosotros, la Naturaleza Búdica (Tathagatagarbha), es la Verdad Ultima (Paramartha), y que ese Espíritu del Buda en nosotros es uno con el Cuerpo del Dharma (Dharmakaya, el Buda Eterno, pues el Cosmos es su Cuerpo, y todo - el Samsara y el Nirvana - se encuentra dentro del Cuerpo Cósmico del Buda Eterno. 

Como vemos, el Buda nos dice que el Cuerpo del Dharma (Dharmakaya), el Cosmos o Reino Dhármico (Dharmadhatu), y el Espíritu del Buda en todos los seres, la Naturaleza Búdica (Tathagatagarbha), todos comparten la identidad esencial de toda la Existencia; los tres (el Buda, el Cosmos y los seres) son uno. Con esto, el Buda nos revela que su Esencia (Talidad - Tathata) aparece bajo diferentes aspectos – impuro, en parte puro y en parte impuro, y puro – y, por lo tanto, constituye la base de todo ser y del Cosmos, tanto impuro como puro, tanto ordinario como trascendente. Estos tres aspectos se equiparan, respectivamente, con los seres ordinarios, los Bodhisattvas y y los Budas. En la Budología, esta es una visión budista monista, que refleja una interpretación reificada del Dharmakaya como el Cuerpo del Buda Eterno en el sentido de un principio absoluto de realidad trascendente, que es coextensiva con el universo. En términos simples, el Buda le contesta a Shariputra que la razón básica por la que no hay aumento o disminución en el reino de los seres y el Nirvana, a pesar de que los seres alcancen el Despertar, es que el dominio de la Existencia es fundamentalmente unitario - la Unidad Fundamental. 

Para ilustrar mejor esta enseñanza, el Buda usa una serie de analogías que hace la misma más entendible:

"Shariputra, como analogía, una lámpara no está separada ni desprendida de su luz, color y tacto. Como otra analogía, una joya preciosa no está separada ni separada de su brillo, color y forma. Shariputra también es lo mismo con el Cuerpo del Dharma, tal como el Tathagata ha explicado. No está separado, desapegado, dividido, ni diferente del mérito y la sabiduría de un Tathagata, ni del inconcebible Dharma del Buda, con enseñanzas más numerosos que las arenas del Ganges.

"Shariputra, el Cuerpo del Dharma es un dharma (fenómeno) sin nacimiento ni muerte, ni pasado ni futuro, porque está separado de los dos opuestos. Shariputra, no es del pasado porque está aparte del momento del nacimiento; no es del futuro porque está aparte del tiempo de la muerte. Shariputra, el Cuerpo del Dharma de un Tathagata es permanente porque es un dharma sin cambios y un dharma sin fin. Shariputra, el Cuerpo del Dharma de un Tathagata es eterno porque es un refugio siempre disponible y porque es igual en todos los Budas y seres sintientes en todos los tiempos. Shariputra, el Cuerpo del Dharma de un Tathagata es tranquilo porque es un dharma libre de dualidad y un dharma libre de diferenciación. Shariputra, el Cuerpo del Dharma de un Tathagata nunca cambia porque es un dharma sin destrucción y un dharma sin acción."

En estas líneas - que escapan el entendimiento de la mayoría de sus discípulos - el Buda revela que, así como el Cosmos y la Vida es eterna, el Buda es eterno. También, así como la Vida del Buda es eterna, la vida de todos los seres es igualmente eterna, aunque cambie de forma entre renacimientos. Esta es, como vimos anteriormente, una de las distinciones principales entre el Atman del Hinduismo (el cual es uno, personal, eterno y sin cambios) y el Atman o Alma Budista (el cual es uno con todo, impersonal, y eterno pero transcurre cambios entre vidas).

Como vemos, el Samsara no es más que una modalidad de la Esencia Universal (Talidad - Tathata). No se trata de que los seres "estén" en el Samsara y luego "pasen" al Nirvana, después de la cual ya no habitan más en el Samsara, y tampoco se trata de la expansión del reino del Nirvana. Sólo hay una Realidad (Ekadhatu o Ekadharmadhatu), denominado entre otras cosas Esencia del Dharma (Dharmata) o Reino Dhármico (Cosmos - Dharmadhatu), la base absoluta del Ser, del Buda Eterno. Si bien establece esta triple realidad dentro de la cual los seres ordinarios, los Bodhisattvas como aquellos que progresan hacia el Despertar, y los Budas difieren sólo subjetivamente, por así decirlo, la realidad de las tres modalidades es algo que está más allá del alcance de los seres ordinarios, e incluso de los Shravakas y Pratyekabuddhas. Esta Realidad subyacente, el Cuerpo del Dharma, es por definición la colección completa de cualidades que identifican y, de hecho, constituyen al Buda Eterno. En otras palabras, el Cuerpo del Dharma es la Budeidad, y ésta es la Realidad fundamental, no sólo de la existencia despierta, sino de todos los modos de existencia. Pero debemos tener cuidado, pues al usar la palabra "existencia" aquí podemos confundirnos de creer que la existencia es algo en contraposición a no-existencia, el Samsara en contraposición al Nirvana. Tal dicotomía no es posible en la visión de la Verdadera Naturaleza de la Realidad que presenta el Buda en este sermón.

Ahora, el Buda revela una serie de enseñanzas impresionantes que la mayoría de sus discípulos no comprenden incluso cuando usa analogías, y que muchos budistas no comprenden todavía en el Siglo XXI:

"Shariputra, cuando este Cuerpo de Dharma, encadenado por interminables aflicciones más numerosas que las arenas del Ganges, durante siglos sin comienzo sigue al mundo, flota junto con las olas de su océano y viaja entre el nacimiento y la muerte, se le llama ser sensible."

El Buda le dice a Shariputra que el Cuerpo del Dharma, en su modalidad del Samsara o realidad dual convencional, posee impurezas (Karma), crea una ola en la superficie de la Existencia (Nirvana - Realidad Ultima), y crea un ser sintiente (bifurca su existencia, creando un ser finito, una consciencia limitada). Entonces, un ser sintiente es como una ola en el Océano de la Existencia; el Samsara (Dualidad) es como una tormenta, siendo el agua (Esencia - Talidad) movida por los vientos del Karma, sobre el agua del Océano del Nirvana (Unidad). Esto es mejor expplicado por el Maestro Asvaghosha en su Tratado del Despertar de la Fe en el Mahayana. Veamos brevemente las enseñanzas más importantes del mismo.

En el Despertar de la Fe en el Mahayana, el Maestro Asvaghosha nos trata de mostrar la Ontología y la Metafísica Budista. El canvas sobre el cual se teje todo el discurso de la obra es la Talidad (Tathata), que traduzco al español como "Potencialidad" o "Esencia". Este es el Absoluto, la Realidad Ultima, lo no creado, no condicionado, no nacido, lo atemporal. Cuando la Talidad se mueve, se expresa como la Mente. La Mente entonces representa lo Absoluto expresado en el orden temporal. Entonces, la Mente contiene dos aspectos: lo Infinito y lo finito, lo trascendental y lo fenomenal, lo universal y lo particular, lo estático y lo dinámico, lo sagrado y lo profano, etc. Por ello, lo Absoluto no existe aparte de lo fenomenal. El ser humano es presentado entonces como el medio, y es expresado a veces como el Tathagatagarbha, la "Matriz del Buda". Esta es la Naturaleza Búdica, la capacidad innata de todos los seres de poder alcanzar el Despertar a esa unidad; la posibilidad de ser y encarnar esa unidad, y convertirse en un Buda. Es por eso que todos los seres poseen la luz de la salvación dentro de ellos. A esta luz era la que el Buda se refería en sus última palabras cuando le dijo a los seres "Sean una luz para ustedes mismos" (Sutra del Nirvana). Pero este potencial debe ser actualizado con la práctica budista.

Anteriormente hablamos de la doctrina Tendai de la Triple Verdad de la Unidad (Verdad Absoluta), la Dualidad (Verdad Convencional), y la Verdad del Camino Medio. En este tratado, la (1) Verdad de la Unidad corresponde a la Mente desde el aspecto del Abosluto, y la (2) Verdad de la Convencionalidad corresponde a la Mente en su aspecto fenoménico. Entonces, la (3) tercera Verdad del Camino Medio es la intersección del orden Absoluto y el orden Temporal: ambos son ontológicamente idénticos; son dos aspectos de una misma realidad. Por eso Nagarjuna dice que "no existe diferencia entre el Nirvana (Absoluto) y el Samsara (fenómenos)".

Luego de darnos sus dos aspectos, el tratado analiza la Mente en términos del Absoluto. El tratado dice: "La Mente en términos del Absoluto es el Mundo de la Realidad Dhármica (Tathata) y la esencia de todas las fases de la existencia en su totalidad". Recordemos que ambos aspectos emergen de una misma Esencia y no son diferentes; solo parecen diferentes para nosotros, los seres sintientes fnitos y limitados. Este aspecto es no-nacido, no-creado, y ni surge ni perece. Solo a través de sus movimientos parece dar la ilusión que es diferenciado. 

Toda explicación en palabras es insatisfactoria y solamente ilustrativa; aunque las palabras nos pueden ayudar a percibirlo mentalmente. Es por eso que esto siempre será un Misterio. Este aspecto Absoluto tiene dos aspectos, si es puesto en palabras: está vacío (Sunyata), o sea, es la Vacuidad de existencia independiente, y no está vacío (Asunyata) porque su existencia está dotada de cualidades. Este aspecto de Asunyata es el mismo aspecto de la Vacuidad (que presenta el concepto en términos negativos), pero en términos positivos: Talidad (o Potencialidad). 

El Absoluto está vacío porque no se relaciona con otros estados de existencia, manteniéndose puro, y sin ninguna marca de diferenciación: no se asocia con la mente ilusoria. Dado a que los seres finitos y limitados discriminan con sus mentes, se alejan y "separan" (ilusoriamente) del Absoluto, pero cuando  se iluminan, descubren que nunca estuvieron separados.

El Absoluto no está vacío porque la Mente es eterna, inmutable, pura; está en armonía con la Iluminación. Esto nos recuerda que la Vacuidad no es una vacío nihilista, sino que es la Potencialidad. 

Luego, el tratado explica el segundo ascpeto de  la Mente Única: la mente en términos fenoménicos. El mismo nos dice que la Mente en términos fenoménicos está enraizada en el Tathagatagarbha, la "Matríz Búdica". Aquí yace la "Mente Almacén" o el Alaya: el repositorio de todas las acciones (karma) de todos los seres a través del espacio y el tiempo.

Según la fenomenología budista (Yogacara), el ser es un compuesto de Cinco Agregados o Skandhas (cuerpo, sentimientos, pensamientos, volición y consciencia). De estos cinco, la consciencia se sub-divide en nueve: (1-5) las primeras cinco consciencias derivan de los órganos de los sentidos (tacto, gusto, olfato, visión y audición); la (6) sexta conciencia es la mente, o el órgano que analiza, interpreta y almacena la información recibida por los cinco sentidos; la (7) séptima es Manas o la conciencia limitante que se percibe a si misma como un producto separado e independiente del mundo, dado a su memoria y falso sentido del ego; la (8) octava conciencia es la Alaya, o la Consciencia Colectiva, la cual almacena todas las acciones (karma) de todas nuestras vidas (y la de otros seres); y finalmente (9) tenemos la novena consciencia o la Consciencia Fundamental (Amala) de la Budeidad (el Uno).

El Despertar de la Fe nos dice que es en la consciencia Alaya que se intersectan los órdenes Absolutos y fenomenal, o la iluminación y la ignorancia, en los seres sintientes.

El tratado luego explica el orden de la iluminación, comenzando con la Iluminación Original - la esencia de la Mente está libre de pensamientos. Es como el espacio abierto que permea todo. Este Uno o Absoluto es el Dharmakaya o la Esencia del Buda (Tathagata) - la Iluminación Original. Luego, esa Iluminación Original contiene la no-iluminación, por eso la necesidad de la práctica budista para revelarla. Los seres sintientes son uno con el Absoluto, el Buda, pero sufren porque se perciben de forma separada, y por ello, actúan de forma egoísta, lo que perpetúa el sufrimiento, ad nauseam, hasta alcanzar el Despertar. Pero como todos somos uno, no podemos buscar la salvación o la iluminación individual (como en el Budismo Hinayana); solo la podemos alcanzar junto con todos los seres: este es el trabajo del Bodhisattva. El tratado dice que cuando uno alcanza un estado elevado en el camino del Bodhisattva, pueden tener acceso a la naturaleza original de la Mente, y con ello, realizar su eternidad, alcanzando la Iluminación. Si una persona logra realizr el proceso del surgimiento y cesación de un pensamiento, puede revelar este estado.

La Iluminación Original, cuando se analiza en comparación con la no-iluminación, posee dos atributos: (1) Pureza de Sabiduría" y (2) "Funciones Supraracionales". Esto es en su contraste, porque desde el Absoluto únicamente, nada se puede decir.

1. Pureza de Sabiduría - dado a la permeación (perfumación o influencia) del Dharma, los seres desarrollan la aspiración de superarse y comienzan su estudio y práctica. Es el Uno llamando desde el corazón mismo de la existencia a los muchos. Así, realiza su ignorancia, la trasciende y alcanza el Despertar. La ignorancia es irradicable ya que no existe aparte de la Iluminación. Aquí el texto compara esto con el agua del océano (Iluminación) y las olas (modos mentales) movidos por el viento (la ignorancia). El agua y el viento son inseparables, pero el agua no se mueve sola por naturaleza, sino que es movida por el viento de la ignorancia; y cuando la ignorancia cesa, cesan las actividades ilusorias.

2. Funciones Supraracionales - el texto dice que aquel que ha descubierto la Iluminación Original puede crear condiciones excelentes porque su sabiduría es pura. Este es el uso de los medios hábiles.

Todo esto ha sido explicado desde el aspecto de la Iluminación. Veamos ahora el aspecto de la No-Iluminación.

Dado a que los seres no se dan cuenta de su unidad fundamental con el Absoluto, surge una mente no-iluminada y sus pensamientos. No obstante, no siguen estando separados de la Iluminación Original. Dado a su estado no-iluminado, la mente ilusoria produce tres aspectos: (1) la ignorancia - la agitación mental en su estado no-iluminado es llamado actividad. Cuando se ilumina, no se agita. Cuando se agita, surge la ansiedad y el sufrimiento; (2) el sujeto que percibe - dado al movimiento o la actividad que surge ("rompiendo" la unidad fundamental) aparece un perceptor. Cuando no se agita, la mente está libre de percepción; (3) el mundo de los objetos - debido al perceptor, surge ilusoriamente el mundo de los objetos.

Condicionado por la ilusión del mundos de los objetos, la mente "individual" produce seis aspectos: (1) el intelecto discriminante - esto produce el gusto y el disgusto, la discriminación; (2) continuidad - dado a la función discriminante del intelecto y la memoria, el sujeto produce la consciencia del placer y el sufrimiento sobre el mundo de los objetos, y si se aferra a ellos, produce continuidad mental; (3) apego - dado a la continuidad, la mente, imponiendo sus ideas sobre el mundo y sus placeres y sufrimientos, produce apegos a lo que le gusta; (4) especulación - nombres, conceptos; (5) karma - el apego y las acciones en pensamiento, palabra y acción crean karma, acciones y sus múltiples resultados (presentes y futuros); (6) sufrimiento - dado a la ansiedad de la percepción "individual" y los efectos del karma, el ser sintiente sufre y no es libre.

En la próxima sección del tratado, el Maestro Asvaghosha nos habla de la relación entre la Iluminación y la No-Iluminación: identidad y no identidad. Interesantemente, las analogías usadas por el Maestro Asvaghosha son las mismas del Canon Budista, por lo que veremos que son similares a las usadas en el Sutra de la Naturaleza Búdica y este Sutra, el Sutra de la Unidad Fundamental.

1. Identidad - así como diferentes piezas de oro fueron hechas del mismo oro, y por ende, poseen la misma naturaleza, igualmente las manifestaciones (maya) de tanto la iluminación como la no-iluminación son aspectos de la misma Esencia, la Talidad. Incluso los asepctos visibles iluminados de los Budas y Bodhisattvas son ilusorios, ya que son emanaciones compasivas de la Talidad.

2. No-Identidad - así como diferentes piezas de oro difieren en forma y función unas de otras, existen diferencias en los estados de iluminación y no-iluminación, dado a sus manifestaciones de acuerdo a las mentes de los seres, ya que están ciegos a la naturaleza esencial de la Talidad - del Uno. 

Como vemos, esto muestra las primeras dos verdades de la Triple Verdad: (1) todo es Uno, (2) pero el Uno se manifiesta en dos (muchos), (3) por lo que ambas verdades son verdades parciales, siendo la "verdadera" verdad la intersección del mundo del Uno (Absoluto) con el mundo de los muchos (fenómenos). Es por eso que el Budismo afirma el mundo. 

Esto nos muestra la gran similitud que existe entre el Vedanta, la filosofía monista del Hinduismo, y las Enseñanzas Perfectas y Completas del Verdadero Budismo. La realidad histórica detrás de esto es que Shakara, el principal exponente del Vedanta, utilizó conceptos del Budismo (predominantemente, los conceptos de Asvaghosa) en su re-formulación del Advaita Vedanta; no fue al revés.

A primera instancia, el Budismo y el Vedanta dicen lo mismo, pero desde premisas y contextos distintos. La diferencia radica en su aplicabilidad. El Budismo (que es igualmente monista) dice que todo es el Absoluto, pero a su vez no dice que el mundo convencional es irreal (como el Vedanta), pues el Absoluto es solo una verdad a medias, y la realidad convencional es igualmente real. Por eso la importancia del Camino Medio (de la Triple Verdad). Aquí radica la importancia de la práctica y el rol del Bodhisattva (ausentes en el Vedanta) En el Vedanta, se dice que todo es Uno (Brahman), y que los muchos (Maya) son una ilusión falsa, por lo que la meta de la práctica es realizar ese Uno y trascender el nacimiento y la muerte: la total absorción en el Uno. En el Budismo, todo es Uno, pero también son muchos, y el Uno no es más real o verdadero que los muchos; por eso la importancia del mundo fenomenal o convencional y el trabajo activo del Bodhisattva en el mundo.

Hasta ahora, hemos visto cómo el Maestro Asvaghosha nos muestra que la Mente  Única (el Uno) se divide en sus dos aspectos: (1) el aspecto del Absoluto (Tathata - Talidad), el Uno, y el otro aspecto de la (2) Mente en términos fenoménicos (Samsara), los muchos; y ambos aspectos permean todal a existencia, siendo mutuamente inclusivos, como dos manifestaciones de la misma Esencia, y vimos con detalles una explicación del aspecto del Absoluto y las implicaciones de esta doctrina para todos los seres en el universo. Ahora, regresemos al Sutra de la Unidad Fundamental antes de abordar el segundo aspecto de la Mente en términos del Samsara, y cómo los seres se encuentran en la Rueda de Nacimientos y Muertes.

El Buda, habiendo explicado cómo los seres surgen en el Samsara sobre la superficie del Nirvana (Unidad), explica qué diferencia a un ser común y corriente - un ser ignorante - de un ser que ha comenzado a iluminarse:

"Shariputra, cuando este Cuerpo del Dharma, cansado del sufrimiento de los repetidos nacimientos y muertes en el mundo, abandona todos los deseos y búsquedas, y se entrena para alcanzar el Bodhi (Despertar) practicando los Diez Paramitas y atravesando las 84,000 Puertas del Dharma, se le llama Bodhisattva."

Cuando un ser sintiente evoluciona espiritualmente, es guiado por el Buda (quien nunca lo ha abandonado, pues es uno con su Espíritu) hacia la religión, y de la religión, a la Verdadera Religión, el Dharma Eterno del Buda. A través de su fe, estudio y práctica, el ser sintiente deja de pensar solo en sí mismo y ve su interconexión con todos los seres, despertando así su Bodhicitta, su Deseo de Alcanzar la Budeidad por el Bien de Todos los Seres Sintientes. Esto hace que se una a la Familia del Buda, y sea un Hijo del Buda, un Bodhisattva. 

La segunda parte del Tratado del Despertar de la Fe en el Mahayana, se titula "Las Causas y Condiciones de los Seres en el Samsara", el aspecto de la no-iluminación de la octava consciencia Alaya, la ignorancia. Los seres se encuentran en el Samsara dado a que son ignorantes de lo Absoluto y su unión, aunque son parte, un manifestación, del Absoluto. 

El tratado dice que los seres se encuentran en el Samsara dado a que sus mentes (ego o mente consciente - manas) y consciencias (vijnana) se desarrollan en la octava consciencia o Consciencia Almacén (Alaya - citta). Luego, el tratado detalla cada uno de estos componentes en detalle:

a. Mente (manas) - la mente surge del aspecto de la no-iluminación, el cual percibe incorrectamente y reproduce los objetos fwnoménicos, y concibiéndolos como reales, desarrolla pensamientos erróneos, lo cual produce la mente.

La mente posee cinco diferentes nombres:

1. Mente Activadora - rompe la unidad con el Absoluto por medio de la ignorancia.

2. Mente Evolutiva - emerge o evoluciona de la mente agitada como un sujeto.

3. Mente Reproductora - produce el mundo de los objetos así como un espejo reproduce imágenes. Surge de los sentidos en frente del sujeto.

4. Mente Analítica - diferencia los objetos fenoménicos discriminatoriamente.

5. Mente Continuante - se forma al haber continuidad aparente con el flujo de pensamientos. Retiene el karma, bueno o malo, acumulado en el pasado, junto con el de todos los seres en la octava cosnciencia. Posee igualmente la memoria.

Por todo esto, el tratado dice que el mundo fenoménico es ilusorio y se contiene en la mente. En la realidad del Absoluto, no existen diferencias ni divisiones; todo es Uno. Toda división o diferenciación es producida por la mente. Esto hace eco al Sutra Avatamsaka cuando dice:

"Las cosas no tienen origen
y nadie puede crearlas.
Son increadas y no-nacidas.
No pueden ser discriminadas"

Igualmente dice:

"Si los seres desean conocer
a todos los Budas de todos los tiempos,
deben contemplar la naturaleza del Cosmos:
Todo es una construcción mental.
Es como un pintor
que esparce diferentes colores.
La ilusión se aferra a diferentes formas,
pero no existe realmente distinción...

"La mente nunca se detiene
manifestando todas las formas,
incontables, inconcebibles,
desconocidas unas para otras.
Igual a un pintor
que no conoce su propia mente,
pero pinta dado a la mente,
igualmente es la naturaleza de las cosas...

"La mente es como un artista,
capaz de pintar todos los mundos:
los cinco agregados nacen del funcionamiento mental.
No existe nada que no produzca.
Si los seres saben cómo funciona la mente
y cómo crea los mundos,
pueden ver al Buda
y entienden la verdadera naturaleza del Buda".

b. Consciencia (vijanana) - esta es la Mente Continuante. Dado a los apegos, los seres imaginan que existe un "yo" o un sujeto y se aferran a esa idea. Con esto, discriminan los diferentes objetos fenoménicos de los cinco sentidos y de la mente. Pero los seres no entienden esto. Los seguidores del Hinayana no lo conciben, solo los Bodhisattvas avanzados y los Budas. Esto es porque la ignorancia acompaña o es una igual manifestación del Absoluto. Siendo permeada por la ignorancia, la mente surge. Pero aunque es manchada por la ignorancia, le Mente es eterna e inmutable. Su verdadera naturaleza está más allá de los pensamientos. La ignorancia surge dado al carácter mutable y activo dentro del Absoluto. Solo los Iluminados pueden entender esto. 

c. Estados /Mentales - existen seis estados mentales condicionados por la ignorancia:

1. Mentalidad Unida al Apego (al Ser) del cual se liberan los seguidores del Hinayana y los Bodhisattvas principiantes.

2. Mentalidad Unida a la Mente Continuante, de la cual aquellos en el estado del "establecimiento de la fe" y los que comprenden los medios hábiles pueden liberarse cuando llegan al estado de "pureza de corazón".

3. Mentalidad Unida a la Mente Analítica,  de la cual los que se encuentran en el estado de "observar los preceptos" comienzan a liberarse y se liberan al llegar al estado de "medios hábiles sin marcas".

4. Mentalidad Sutil desunida del mundo representado de los objetos.

5. Mentalidad Más Sutil desunida de la Mente Evolutiva que percibe.

6. Mentalidad Mucho Más Sutil desunida de la  Mente Activadora, la cual existe antes de la separación del Uno y del aspecto del sujeto y objeto - la Budeidad.

Todo esto es explicado para detallar el proceso por el cual el sujeto (individuo) se separa del Absoluto. Dado a la ignorancia, surjen los estados mentales (Mente Activadora)  y emerge un sujeto que percibe (Mente Evolutiva) erróneamente y reproduce (Mente Reproductora) y erróneamente predica el mundo del os objetos, lo cual causa que uno se desvíe o "separe" de la Unidad Fundamental, el Absoluto. No obstante, todo sigue siendo Uno, es solo la mente la que percibe erróneamente una separación, adaptándose a las circunstancias del mundo. 

Dado a que los seres son ignorantes a estos hechos y sufren, los Budas, emanaciones compasivas del Absoluto, vienen a los mundos para traernos la sabiduría del Dharma, para que podamos aliviar el sufrimiento y trabajar en conjunto por el bienestar común de todos los seres.

Luego, el tratado explica las características de los seres en el Samsara, y distingue dos tipos de seres: (a) los crudos, y (2) los sutiles, que se pueden subdividir cada uno en más crudos y más sutiles, dependiendo de sus capacidades mentales y su percepción de la verdadera naturaleza del mundo. Por ello es que hay diferencias en los medios hábiles empleados por los Budas para efectuar su plan salvífico en el mundo. 

Luego el tratado explica qué pasaría si la mente cesa: cesaría la mente pero no la esencia - es como el agua y el viento que causa movimientos en la superficie del agua; si el agua cesara, todo se nulificaría, pero como el agua no cesa, los movimientos continúan, pero si el viento cesa, cesarían los movimientos, pero esa no es la cesasión del agua. Igual ocurre con la ignorancia: en la esencia de la Mente hay movimiento; si la esencia de la Mente cesara, todos los seres y el mundo se nulificaría; pero como la esencia no cesa, lam ente continúa. 

El tratado luego ilustra nuevamente esta idea con el concepto de la permeación. La permeación es la idea de que la ropa no posee ningún olor innatamente, pero si se perfuman, se permean con la fragancia. El Absoluto no contiene impurezas ni divisiones, pero es permeado por la ignorancia, y por ellos aparecen las diferencias y divisiones. La ignorancia no posee ninguna fuerza unificadora, pero como es permeada por el Absoluto, posee una influencia purificadora. Esta es la actividad dinámica que existe dentro de la Existencia (Absoluto) para salvarnos del sufrimiento. 

Esto nos muestra que el sufrimiento, si bien es incómodo e indeseable, es teleológico y posee un propósito: movernos fuera de nuestros patrones habituales y ayudarnos a buscar alcanzar el Despertar para así ayudar a todos los seres. Es el llamado desde el centro mismo de la Existencia para que reconozcamos nuestra unidad fundamental y que regresemos a nuestro Verdadero Hogar.

El tratado nos dice que los seres, desde que despiertan el deseo de alcanzar el Despertar (Bodhicitta) hasta wue alcanzan la Budeidad, meditan sobre los Budas y Bodhisattvas, los cuales se manifiestan en sus vidas como personas cercanas que les ayudan; incluso como enemigos. A través de las cuatro prácticas (caridad, buen hablar, acciones benéficas y ayudar a los demás), los seres ejercitan la permeación creada por su gran compasión, y pueden beneficiar a todos los seres. Esto les permite alcanzar la Budeidad rápido, o en un futuro distante, de acuerdo a sus karmas. A través de sus propios méritos, y con la ayuda de los Budas (dado al a permeación o gracia de estos) es que los seres pueden alcanzar el Despertar. Es por eso que todos los seres pueden buscar la ayuda de los Budas, los cuales son manifestaciones de la actividad dinámica salvífica del Universo - son uno y lo mismo; ambos son manifestaciones de la misma Esencia. Esta es la unión de los seres con la influencia del Absoluto. 

La ignorancia, desaparece con la Budeidad. Es por eso que la Ignorancia, la cual no tiene principio, sí tiene un fin, pero la Esencia no tiene principio ni fin. 

Regresando al Sutra de la Unidad Fundamental, luego de explicar el progreso espiritual de un ser sintiente a un Bodhisattva, el Buda explica el proceso de evolución espiritual de un Bodhisattva a un Buda:

"Además, Shariputra, cuando este Cuerpo del Dharma ha superado todo sufrimiento en el mundo y ha dejado atrás las cadenas y la inmundicia de todas las aflicciones, revela su pureza y mora en la naturaleza pura del dharma (Dharmata) en la orilla opuesta (Nirvana). Debido a que ha alcanzado la comprensión insuperable de todos los estados de realización, está libre de todos los obstáculos y obstrucciones, y ha adquirido el poder de la libertad en medio de todos los dharmas, y se le llama Tathagata, un Buda. Por lo tanto, Shariputra, el Cuerpo del Dharma no está separado del reino de los seres sintientes. El reino de los seres sintientes es el Cuerpo del Dharma; el Cuerpo del Dharma es el reino de los seres sintientes. Shariputra, estos dos dharmas con nombres diferentes tienen el mismo significado."

Un Buda es un Bodhisattva (un ser sintiente despierto) que vive con la consciencia de la Unidad, del Nirvana, en todo momento, y mora en ese estado de vida mientrs continúa su labor salvífica dhármica de salvación de todos los seres en el Cosmos, por la eternidad. Es el Tathagatagarba (Espíritu del Buda - Naturaleza Búdica) revelado, manifestado y en completa acción en el mundo fenoménico. Es la manifestación de los dos significados de la palabras "Tathagatagarbha": (1) el producto del Cosmos (Matriz Búdica), (2) que produce Budas (Embrión del Buda). El Buda expande esto cuando dice:

"Además, Shariputra, como dije antes, hay tres dharmas en el reino de los seres sintientes. Son la verdadera talidad (Bhuta-tathatā), sin diferencia ni distinción. ¿Cuáles son estos tres dharmas? Son (1) la naturaleza pura del dharma del almacén del Tathagata, que es innatamente coherente con el estado original del almacén del Tathagata; (2) las aflicciones que envuelven nuestra reserva  del Tathagata, que son innatamente incoherentes con el estado original de nuestra reserva del Tathagata; (3) la existencia del almacén del Tathagata, que tiene la naturaleza de ser inmutable en todo momento."

A la pregunta de cómo los seres pueden convertirse en Budas, el Buda responde que es porque siempre han morado en el Cuerpo del Buda (Dharmakaya), porque poseen el Espíritu del Buda (Tathagatagarbha), y porque son uno en Esencia (Dharmata) con el Buda. 

Antes del capítulo final, el Tratado presenta una pregunta: Si el espacio, los mundos, los seres y sus mentalidades son infinitos, ¿cómo podemos descubrir el Absoluto? Luego, a manera de resumen de todo el contenido doctrinal del Tratado, el mismo contesta: todo surge del Uno, la Mente Unica, y no existe la dualidad; dado a que los seres discriminan con sus mentes, surgen las divisiones, creando el perceptor y el objeto de percepción - el mundo-, pero esto no afecta ni corresponde con la Realidad. Dado a que crean divisiones, sienten alienación, y dado a sus pensamientos, palabras y acciones, los seres crean karma y sufrimiento. Los Budas y Bodhisattvas son manifestaciones compasivas del Absoluto para llevar un mensaje de unidad y aliviar el sufrimiento de todos los seres.

Los Budas son emanaciones compasivas del Dharmakaya, siendo todos uno y amnipresentes. Ellos se revelan a los seres de diferentes formas en diferentes tiempos para llevar el Dharma y ayudar a los seres sintientes, pero los seres, al estar ciegos por su ignorancia, no reconocen esto. 

"Shariputra, debes saber que la naturaleza pura del dharma de la tesorería del Tathagata, que es innatamente coherente con el estado original de la tesorería del Tathagata, está de acuerdo con la verdadera Realidad y no es falsa. Es un dharma inconcebible, no separado ni desapegado del Reino del Dharma de la sabiduría, la pureza y la verdadera Talidad (Tathata). Desde el origen sin principio, esta naturaleza pura y coherente siempre ha existido. Shariputra, de acuerdo con el Reino del Dharma de la pureza y la verdadera Talidad, pronuncio a los seres sintientes este Dharma inconcebible de la mente pura inherente (Prakrti-parishuddha-citta]."

Aquí el Buda reitera la presentación hecha por el Maestro Asvaghosha y que diferencia el Budismo del Vedanta de que el mundo no es una ilusión, sino la Verdadera Realidad (Unidad) vista distorcionadamente; es una modalidad o manifestación natural - no anormal - de la misma.

La Realidad es una, pero se manifiesta de dos formas, unida y desunida, pero son ilusorias; solo hay una Realidad. El uno y el mismo Cuerpo del Dharma se manifiesta o aparece como seres ordinarios cuando está cubierto de impurezas, en cuyo caso transmigra, o parece transmigrar a través de los Seis Reinos de la Existencia, el Sansara. Igualmente, aparece como alguien en el sendero, como un Bodhisattva, cuando tiene actitudes indicativas de insatisfacción con la transmigración y de atracción por el sendero trazado por el Buda. Es claro que esta caracterización del Cuerpo del Dharma como Bodhisattva no es precisamente paralela a la del Cuerpo del Dharma como ser ordinario, ya que este último retrata una esencia oculta bajo velos de elementos negativos, mientras que el primero se refiere explícitamente a la volición, la actitud y la actividad. La perfección final, la Budeidad, es el mismo Cuerpo del Dharma libre de toda negatividad, por un lado (llamado en la Tradición Budista como Nirmala Tathata), y perfecto en todas sus aspiraciones, por el otro (Simala Tathata). 

"Shariputra, debes saber que el dharma impuro de las aflicciones que envuelven tu Espíritu del Tathagata siempre ha estado separado, desapegado e incoherente con el estado original de tu reserva del Tathagata. Sólo puede ser erradicado mediante la sabiduría del Bodhi del Tathagata cuando uno se convierte en un Buda. Shariputra, de acuerdo con este inconcebible Reino del Dharma de aflicciones incoherentes que envuelven el almacén del Tathagata, pronuncio a los seres sintientes este inconcebible Dharma de la mente pura inherente de uno, contaminada por las aflicciones propias de un visitante.

"Shariputra, debes saber que el almacén del Tathagata, cuya existencia es inmutable a lo largo de todos los tiempos, es la raíz de todos los dharmas, proporciona todos los dharmas, posee todos los dharmas y no está separado ni desapegado de la verdadera Realidad de todos los dharmas. Sostiene todos los dharmas y abarca todos los dharmas. Shariputra, de acuerdo con este refugio permanente, tranquilo e inmutable sin nacimiento ni muerte, el inconcebible Reino del Dharma puro, digo que [el Reino del Dharma] se llama seres sintientes. ¿Por qué? Porque 'seres sintientes' es un nombre diferente para un refugio permanente, tranquilo e inmutable, sin nacimiento ni muerte, y para el inconcebible reino del dharma puro. Basado en este significado, de acuerdo con ese dharma, digo que se les llama seres sintientes."

En estos párrafos anteriores, el Buda nos asegura que, aunque su Espíritu dentro de los seres atravieza diferentes transmigraciones y está cubierto de numerosos klehsas y mal karma, no se ve afectado por el mismo; se mantiene puro y sin mancha, y no deja de ser uno con la Unidad Fundamental.

"Shariputra, estos tres dharmas son la verdadera Talidad, sin diferencia ni distinción. Confiando en estos tres dharmas, que son la verdadera Talidad, sin diferencia ni distinción, uno nunca provoca los dos puntos de vista extremadamente malvados y erróneos. ¿Por qué no? Porque uno ve los dharmas de acuerdo con la verdadera Realidad. En cuanto a la visión del aumento y la visión de la disminución, Shariputra, los Buda siempre se mantienen alejados de estas dos visiones erróneas."

La Verdadera Naturaleza de la Realidad, como mencionamos al principio de este Sutra, es tripartita, pero es triuna. Esto refleja una armonía y un orden inherente en el Cosmos, pues el mismo es el Cuerpo, la Palabra y la Mente (Espíritu) del Buda Eterno. Es por eso que los "tres dharmas" del Buda, el Cosmos y los seres sintientes son un solo dharma; son uno - diferentes manifestaciones de la misma Realidad. El conocer y realizar esto - en la mejor medida posible con nuestras mentes finitas - es seguir el Verdadero Dharma del Buda; es seguir al Buda. Como nos dice el mismo Buda:

"Shariputra, si entre los bhikṣus (monjes), bhikṣuṇis (monjas), upasakas (laicos) y upasikas (laicas) hay quienes sostienen uno o ambos de estos dos puntos de vista erróneos, debes saber que los Buda no son sus Honrados por el Mundo. Estas personas no son mis discípulos. Shariputra, al sostener estos dos puntos de vista erróneos, irán de oscuridad en oscuridad, de ignorancia en ignorancia. Yo digo que se llaman Icchantikas. Por lo tanto, Shariputra, ahora debes estudiar esta enseñanza para transformar a los seres sintientes, permitiéndoles mantenerse alejados de estos dos puntos de vista erróneos y mantenerse en el camino correcto. Shariputra, deberías estudiar otras enseñanzas similares para mantenerte alejado de estos dos puntos de vista erróneos y permanecer en el camino correcto."

 Ser budistas es seguir el Verdadero Dharma del Buda Eterno, no a medias, no de forma incorrecta, no solo lo que nos guste o lo que sea acorde con nuestras creencias e ideologías, sino lo que el Buda reveló en us Palabra; lo que está contenido en su Canon Budista y ha sido preservado por la Tradición Budista, como es presentado de forma perfecta y pura en este Sutra. 

Al concluir este sermón, el Buda se apenó mucho, porque pudo ver con sus ojos espirituales que muchos de sus discípulos no entendieron ni estaban listos para ello, pero los pocos que sí lo recibieron lo mantendrían fielmente para la posteridad, y los que no lo entendieron ahora sembraron la semilla para entenderlo posteriormente, sobre todo, cuando revelara su Verdadero Dharma, su Gran Revelación: el Sutra del Loto. Que todos podamos ser como esos pocos discípulos que sí lo entendieron, y podamos llevar la buena nueva del Buda a todos los seres en este mundo.